AUTOVÍA DEL DUERO
Un viaducto sobre el Duero en la A-11 de Valladolid
Pistoletazo de salida a los trabajos para crear esta infraestructura para salvar el río en el tramo vallisoletano entre Quintanilla de Arriba y Olivares de Duero
Faltan años todavía para que la Autovía del Duero sea una realidad y por dejar atrás la fatídica N-122. Una infraestructura necesaria para Castilla y León que no avanza al ritmo deseado. Unos trabajos que avanzan de forma lenta y que cuentan con dos tramos en la provincia de Valladolid: Quintanilla-Olivares y Olivares-Tudela. En el primero de ellos han comenzando las obras para levantar un viaducto que ‘salve’ el paso del río Duero.
El tramo entre Quintanilla de Arriba y Olivares de Duero deberá contar con una infraestructura para evitar el río, la carretera N-122 discurre en paralelo al Duero en ese tramo. Con este fin han comenzado esta última obra de la A-11 en territorio vallisoletano. Constará con dos carriles por cada sentido con sus correspondientes quitamiedos, dos apoyos, uno a cada lado del río; y un arco en el medio de ambos carriles con diversas columnas para su sujeción; tal y como se puede observar en las recreaciones que acompañan la información. Por el momento, grúas y operarios se afanan en realizar los soportes que sujetarán toda la estructura del viaducto sobre el río Duero.
Esta es una de las infraestructuras más demandadas en la Comunidad, por no decir la que más porque es una autovía en la que se lleva trabajando más de tres décadas con grúas y operarios parando intermitentemente. Su construcción avanza lento y permitiría a muchos conductores dejar atrás la N-122 con un recorrido similar, pero sería una alternativa mucho más segura, rápida y moderna.
Los distintos tramos de esta autovía avanzan de forma distinta, aunque solo hay uno que se encuentra en servicio, el trayecto comprendido entre Tudela de Duero y Zamora, entre Tordesillas y Valladolid tiene continuidad a través de la A-62.
En lo que respecta a la provincia vallisoletana, el tramo comprendido entre Olivares de Duero y Tudela de Duero mide 14,5 kilómetros y tiene un presupuesto de 109 millones de euros. El segundo tramo, el que se encuentra entre los municipios de Quintanilla de Arriba y Olivares de Duero tiene una longitud mayor, de 20,2 kilómetros y un presupuesto de ejecución de 90 millones. Entre ambos suman 200 millones de euros de inversión para 34 kilómetros de autovía. En ambos casos la fecha de finalización de las obras debería haber sido en 2022, según los plazos establecidos en la licitación. Es decir, acumularán más de dos años de retraso.
Una infraestructura a la que todavía le falta tiempo para estar completada en su totalidad. De hecho, la última adjudicación del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible fue el pasado mes de septiembre y se trató del tramo entre Zamora y Portugal. Un recorrido de poco más de 1,5 kilómetros por siete millones de euros.