Las viviendas de los camineros de Medina de Rioseco ya tienen dueño

La directora general de Vivienda, María Pardo, junto al alcalde de la localidad, David Esteban, ha presenciado el procedimiento para la adjudicación celebrado en el Ayuntamiento. La Junta de Castilla y León ha rehabilitado 6 viviendas de titularidad pública para incrementar el parque público de viviendas energéticamente eficientes que están destinadas al alquiler social. 

El coste total de la rehabilitación supera los 900.000 euros, y ha recibido financiación de parte de los fondos europeos REACT-UE (FEDER) que buscan apoyar la iniciativa.

Las obras han transformado las 6 viviendas de camineros que estaban en desuso en una promoción accesible y eficiente energéticamente. Para ello, se han dotado de una certificación energética B. Del mismo modo, junto a la restauración realizada en el interior, las obras han supuesto una mejora en su eficiencia con el objetivo de disminuir el consumo de energía y el coste de la factura de los futuros inquilinos, contribuyendo con ello a la reducción de emisiones de CO2.

Para lograrlo, se han implementado una serie de medidas, como la instalación de un sistema de aislamiento térmico exterior (SATE) sobre la fachada existente, nuevas ventanas y la incorporación de aislamiento térmico y acústico en las paredes entre las viviendas. Finalmente, se ha mejorado el aislamiento térmico de la cubierta y el suelo del edificio, según informa la Junta de Castilla y León en un comunicado.

El edificio cuenta también con una instalación de aerotermia. Gracias a esta actuación se ha conseguido una certificación energética B para las viviendas, lo que se traduce en un bajo consumo de energía de 54,7 kWh/m² por año y una emisión de CO2 de 9,3 kgCO2/m² por año.

Para que se adjudiquen estas viviendas, los arrendatarios deben cumplir unos requisitos generales. Entre ellos está la inscripción previa en el Registro Público de Demandantes de Viviendas Protegidas de Castilla y León y el hay que cumplir con los límites de los ingresos máximos y mínimos establecidos en la normativa vigente.

El 2 de agosto se publicó en el Bocyl la convocatoria del procedimiento de selección de arrendatarios de las viviendas de camineros y, posteriormente, se publicó la lista provisional de admitidos. Una vez resueltas las alegaciones, se publicó la lista definitiva y se fijó para hoy la fecha de celebración del sorteo ante notario para su adjudicación.

Celebrado el sorteo y publicado oficialmente su resultado, la Dirección General de Vivienda notificará de forma individual para que, en un plazo de 10 días hábiles acepte o renuncie a la vivienda adjudicada. En caso de aceptar, se contactará de nuevo con la persona seleccionada para ejecutar la firma del contrato de arrendamiento que será visado por el Servicio Territorial de Movilidad y Transformación Digital de Valladolid. En caso de no cumplir los requisitos del visado o no aportar la documentación solicitada, la persona pierde la condición de elegida.

Sobre las viviendas, se ofrece la incorporación al parque público de alquiler de 6 viviendas de 3 dormitorios con una superficie que girará entorno a los 88,19 m² y los 89,82 m².

Las viviendas se destinarán al alquiler social durante un plazo mínimo de 50 años. El plazo de duración del contrato de arrendamiento será de un año, prorrogable obligatoriamente por plazos anuales hasta que el alquiler alcance una duración de siete años, a excepción de que el arrendatario manifieste su intención de no renovarlo.

Con carácter general, se pretende atender de forma directa a demandantes de vivienda protegida en alquiler en el municipio de Medina de Rioseco.

Para el cálculo de la renta de alquiler de los futuros arrendatarios se aplican las reglas contenidas en las órdenes MAV 868/2022, de 11 de julio, y 1445/2023, de 15 de diciembre, de las que resulta la aplicación de un coeficiente reductor del 25 % en el precio de referencia por ser la Junta la promotora de la actuación. A ese coeficiente reductor se le añade una bonificación prevista en esta orden del 10 % o del 20 %, en función de los ingresos de dichos inquilinos.

Conforme a esas bonificaciones, la vivienda más cara tendrá una renta de 232,09 o 261,11 euros, en función de cuál de los dos coeficientes resulte de aplicación, y la vivienda más barata tendrá una renta de 227,88 euros o 256,37 euros.