MONTEALEGRE DE CAMPOS
La Casona de Montealegre reabrirá como alojamiento rural y centro formativo
La Asociación Cultural Campoalegre gestionará la posada tras la cesión gratuita del inmueble por parte de la Diputación de Valladolid
Después de un año cerrada, la Casona de Montealegre recuperará su uso hostelero. Así se confirmó en la última sesión plenaria de la Diputación de Valladolid, propietaria del inmueble, que abrobó la cesión gratuita del mismo a la Asociación Cultural Campoalegre, que recientemente ha presentado un proyecto para su recuperación como alojamiento rural y centro formativo.
Con los votos a favor del Grupo Popular y VOX, la abstención del PSOE y el voto en contra de TLP, se ratificó la cesión gratuita de la finca a esta entidad sin ánimo de lucro, bajo cuyo nombre se encuentra la Escuela de Profesionales Alcazarén, centro de formación profesional especializado en hostelería, turismo y educación.
En el proyecto, la Asociación Cultural plantea la recuperación del del inmueble como alojamiento rural con propuestas didácticas para que los alumnos matriculados en los diferentes ciclos de FP (Cocina y Gastronomía, Dirección de Cocina, Gestión de Alojamientos Turísticos y Marketing y Publicidad) puedan realizar prácticas de proyectos reales en las instalaciones y el restaurante de la posada.
Además, proyecta una larga lista de propuestas destinadas a la explotación de la Casona, con el objetivo de que «redunde de manera evidente y positiva en beneficio de los habitantes del término municipal y de la comarca», tal y como se puede leer en el pliego del proyecto. De esta manera, se proyectan diferentes de cocina basados en los productos locales y regionales; concursos que involucren a los habitantes y al alumnado de la escuela para promover el conocimiento del entorno y de los productos locales; celebración de jornadas gastronómicas de cocina tradicional y fusión, un huerto ecológico para impulsar los grados de cocina y experiencias culturales en colaboración con el Ayuntamiento de Montealegre de Campos.
David Esteban Rodríguez, vicepresidente segundo y delegado del Área de Innovación Digital, Gobierno Abierto y Contratación, gestora de esta cesión, afirma que este es «un buen proyecto para la zona» y que ayudará a «redimensionar las posibilidades de empleabilidad» del municipio, en declaraciones a este medio.
El edil de la localidad de Medina de Rioseco alegó en el pleno correspondiente al mes de junio que la Diputación de Valladolid siempre está «con las antenas puestas en proyectos que puedan generar externalidad positiva», señalando que el reglamento de bienes de las entidades locales permite la cesión gratuita de bienes de estas características a instituciones privadas de interés público sin ánimo de lucro.
Esteban defendió que, ante la ausencia de proyectos para este espacio, «cuando hay uno, lo que tienen que hacer todas las administraciones y los responsables públicos es provocar que eso pueda suceder». En sus palabras, la cesión a esta asociación es «idónea, a todas luces» y permite «tejer una red colaborativa público y privada» gracias a un proyecto «atractivo e interesante», pidiendo al resto de diputados su apoyo a la iniciativa.
El tiempo de duración de la cesión será de cinco años prorrogables y todos los beneficios obtenidos de la explotación del alojamiento y restaurante deberán ser invertidos en su mantenimiento y en la organización de las actividades planteadas, tal y como recoge el acuerdo de la sesión plenaria.
El edificio es propiedad de la Diputación Provincial desde el año 1969 y fue rehabilitado a principios del milenio con una inversión cercana al millón de euros. Posteriormente, fue cedido al ayuntamiento del municipio, quien lo licitó hasta 6 veces entre los años 2005 y 2013, año en que el consistorio anuló la licitación. Después de casi una década a la espera de un proyecto, una UTP pujó a principios de 2022 para reflotar el negocio, que apenas duró un año hasta que echó el cierre el pasado mes de septiembre.
El inmueble, uno de los pocos alojamientos rurales de la provincia catalogados con la marca de Posada Real, consta de un edificio principal de dos alturas y dispone de 7 habitaciones con baño completo. En la planta baja se ubica el restaurante, el salón y un amplio jardín.