Mojados exhuma a Pedro de la Calle, el pastor socialista que murió a manos de unos pistoleros falangistas

Después de varios años de lucha, la familia de Pedro de la Calle, un pastor socialista de Mojados que fue asesinado por pistoleros  falangistas en 1936, consigue que sus restos puedan tener una sepultura digna. La localidad vallisoletana se convierte en testigo de la primera exhumación que se produce en Castilla y León desde que el PP y Vox presentaron en las cortes su proyecto de Ley de Concordia, tal y como se explica en la nota informativa remitida por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica. Una exhumación ya prevista por la ARMH, tal y como ya publicó este periódico.

Ya desde 2006, Ángela, la hija del pastor represaliado intentó que el Ayuntamiento de Mojados pusiera todos los medios posibles para proceder a la exhumación de sus restos, ya que éste fue enterrado en el "cementerio pequeño" de la localidad, sin ningún tipo de identificación, concretamente en una zona de tierra dentro del recinto del camposanto. Ante la negativa del consistorio, el nieto del represaliado se dirigió a la ARMH con el objetivo de que su abuelo pudiera recibir por fin una sepultura digna.

Según el certificado de defunción, De la Calle murió por asfixia, y según su familia, el cuerpo del pastor apareció colgado de un pinar cercano. El documento remitido por la ARMH destaca que fue detenido dos veces. En la primera fue trasladado a los calabozos del Ayuntamiento, donde recibió una paliza. Ya en la segunda detención, falangistas de Alaejos, Ataquines y Mojados, según se explica en el escrito, lo colgaron de un pino "después de sufrir vejaciones y mofas por parte de sus ejecutores".

La familia recuerda que fue detenido en su domicilio, cuando estaba escogiendo garbanzos junto a sus dos hijas.