Diario de Valladolid

Mohíno exige medio Gobierno y Gómez rechaza ser «un títere»

La portavoz de ‘Medina Primero’ mantiene sus demandas sobre la tenencia de Alcaldía y ocho cocejalías, pese a su debilitada situación tras la investidura

Olga Mohíno promete el cargo, el pasado sábado.-S. G. C.

Olga Mohíno promete el cargo, el pasado sábado.-S. G. C.

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Santiago G. del Campo
Valladolid

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La portavoz de la formación Medina Primero (MP), Olga Mohíno, reiteró ayer en rueda de prensa su voluntad de entrar en el equipo de Gobierno, pero en vez de plantear una negociación a base de diálogo, expuso un decálogo de condiciones que, en resumidas cuentas, exige la mitad del poder municipal. Y eso que el nuevo partido, en caso de entrar en ese Gobierno, aportaría la mitad de los concejales (cuatro), que aporta el ganador de las elecciones municipales, el Partido Popular (ocho).

No sólo demanda la primera tenencia de Alcaldía –un cargo que entraría dentro de los estándares de estas coaliciones–, sino que quiere ocho concejalías. Y además no de ocho áreas cualquiera, sino que ella debe ser quien elija primero. Son, a saber, las concejalías de Contratación, Patrimonio y Publicidad; Régimen interior; Relación con otras instituciones; Desarrollo local; Comercio e Industria; Coordinación de Servicios Generales; Juventud, Mujer e Igualdad y Participación Ciudadana.

A eso habrá que añadir la realización de una auditoría externa que permita conocer el estado económico actual del Ayuntamiento y que los ediles de MP dispongan del 50% de los remanentes para proyectos programáticos.

A toda esta cuota de poder, hay que sumar la puesta en práctica de las medidas de su programa electoral; la inclusión en el Presupuesto municipal de la beca ‘Rodrigo de Dueñas’ para la juventud medinense; acciones urgentes en el área recreativa de las Salinas; elevar a Fiscalía el caso de la enajenación de bienes del Mercado Nacional de Ganados –asunto sobre el que se había iniciado una comisión de investigación–; el compromiso de aclarar los pagos por publicidad municipal y contar «con el personal necesario en las distintas concejalías solicitadas», así como «un reparto justo de los presupuestos municipales para dichas concejalías».

Por su parte el alcalde de Medina del Campo, Guzmán Gómez, lamentó en respuesta a este periódico que MP «esté exigiendo hoy exactamente lo mimo que el día 10 de junio». Él entiende como una negociación «una propuesta que es flexible, que se está dispuesto a ceder en algunas condiciones a cambio de que se llegue a un acuerdo», pero la tesitura de MP «es que tienen una serie de condiciones sin ninguna cesión», añadió.

Gómez subrayó que «el primer partido» que ha estado dispuesto a que MP entrara en el Gobierno «ha sido el PP». Y es que «se le ha ofrecido primero la segunda tenencia de Alcaldía, Servicios Sociales, y ser una de las cuatro personas de confianza como concejal de área».

Más avanzadas las conversaciones, el PP fue aportando más y llegó a ofrecer Medio Ambiente, Desarrollo Local, «e incluso en una última instancia, la posibilidad de renunciar a formar parte de la Diputación», aseguró Gómez, aun cuando se muestra convencido de que en una negociación «no hay que negociar los cargos, sino las medidas que hagan mejor la vida de los medinenses».

Precisamente en cuanto a eso, a las medidas electorales, el PP aceptó todas las planteadas por MP, porque «las propuestas de ambos partidos estaban muy en sintonía», explicó Gómez. Ahora lamenta que, a la vista de lo dicho por Mohíno en la rueda de prensa de ayer, «se ve cómo piden la mitad del Ayuntamiento, teniendo la mitad de concejales, algo que no es razonable». Gómez, llegó a proponer a Mohíno «que fuera ella la alcaldesa, y nosotros ocho gestionáramos el Ayuntamiento, con ocho áreas y ocho servicios. También dijo que no».

El nuevo regidor aseguró que aunque «el PP sigue abierto a todo tipo de acuerdos», él no quiere ser «un alcalde marioneta, una especie de títere al que le mueven los hilos». Además, valoró los «gestos» de diálogo que han tenido otras formaciones como Ciudadanos, y también el PSOE y Gana Medina (IU-Equo) y señaló, de cara a futuribles negociaciones, que la situación municipal ahora «es otra».

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