Caramanzana ve en la «revolución digital» una oportunidad para el mundo rural
El presidente de la Cámara de Comercio de Valladolid inaugura el Mercado Artesanal de Tordehumos
Víctor Caramanzana recibe un pin del escudo de Tordehumos, en los momentos previos a su discurso inaugural.-REPORTAJE GRÁFICO: JOSÉ C. CASTILLO / PHOTOGENIC
Una oportunidad. Así ve el presidente de la Cámara de Comercio de Valladolid, Víctor Caramanzana, al cambio de modelo económico mundial para el medio rural. «Su impacto [el de la revolución digital] no se limita a mejorar los productos y servicios existentes, sino que además ha permitido la aparición de nuevas formas de mercado y sobre todo ha conseguido que se pueda competir a escala sin tenerla», expresó ayer Caramanzana en su discurso de inauguración del XIX Mercado Artesanal de Tierra de Campos de Tordehumos, que se celebrará en el pueblo hasta hoy por la noche.
El presidente de la Cáma de Comercio enunció tres causas de la despoblación: la falta de trabajo, la falta de puestos alternativos y la falta de centros de expansión. Pero Caramanzana quiso enviar un mensaje «de esperanza».
«Nadie duda a estas alturas que la revolución digital está suponiendo una transformación profunda de las estructuras de mercado y de la sociedad», indicó, acompañado de cientos de vecinos de la localidad.
Caramanzana vinculó esta revolución digital a la economía circular, al cambio de tendencia en la agricultura –«Venimos de la época mecánica, tractor, cosechadora, y estamos pasando al mundo bioquímico: biotecnología y química»–.
«Pero además, en poco tiempo estaremos en la e–agricultura y la ciberagricultura», anunció el también empresario.«Que nos se nos olvide que el campo necesita a la ciudad, pero también la ciudad al campo», sentenció Caramanzana.
«Nuestros pueblos de tierra de campos se vacían, pero no se vacían ahora, llevan décadas quedando fuera del tiempo», aseveró el empresario. «Se vacían por estar situados en espacios complejos, con climatologías y geografías fuera de lo deseable, con capacidad para aportar recursos materiales tan solo a economías a las que nadie quiere resignarse, y en donde la pervivencia solo es resultado de una opción de vida», añadió.
Ante esta situación, «que no solo ocurre en nuestra zona», «llega el momento de que hablemos de repoblación y no de despoblación», sentenció Caramanzana.
El presidente de la máxima institución intermediaria en la relación entre la Administración vallisoletana y las empresas se mostró optimista ante el futuro que le espera al mundo rural en Valladolid. Caramanzana citó a John Maxwell y su afirmación que decía que, ante un velero que se hunde, «el pesimista se queja del viento, el optimista espera que cambie y el líder arregla las velas».
«Eso es Tordehumos. Fuisteis líderes con esta fiesta, con este mercado y sois un Pueblo orgulloso de su historia, la que dice que aquí la gente siempre fue emprendedora, valiente y trabajadora», continuó Caramanzana durante su intervención. «Vosotros sois herederos de ese pueblo y de esa historia», interpeló a los ahumados.
Caramanzana instó también a que se unieran los municipios vecinos y recuperaran la ruta Juan de Austria. «La unión hace la fuerza», sentenció el empresario.