Carnero señala a los tres Alcaides como valedores «de la Marca España»

Se lo advirtió ayer a los tres galardonados el presidente de la Diputación, Jesús Julio Carnero: «Este es un premio que lleva trampa, porque con él os comprometéis a ser embajadores no sólo de este castillo, sino de nuestros vinos». Con estas palabras dio la bienvenida, en el acto de entrega, a los tres nuevos ‘Alcaides de Honor 2017’ del Museo Provincial del Vino, en el emblemático castillo de Peñafiel.

Se trata del presidente del Grupo Freixenet y de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, la campeona olímpica Ruth Beitia y el bodeguero José Luis Sanz Busto, de Bodegas Dehesa de los Canónigos. Carnero mostró su agradecimiento a los galardonados por aceptar el nombramiento, y destacó que los tres son «perfectos representantes de la Marca España».

De Bonet aseguró que representa «lo mejor del espíritu emprendedor español», pues como presidente de Freixenet, «sabe mejor que nadie la importancia de poseer unos valores compartidos que son una filosofía de vida, una cultura arraigada en la conciencia familiar y que se refleja en la continuidad y en el éxito de una empresa de más de 100 años».

En referencia a la situación política en Cataluña, Carnero valoró de forma especial la «coherencia» de Bonet al poder proclamar «que es catalán y español» y además «mantener su empresa en Cataluña, porque eso es bueno no sólo para esa Comunidad sino también para el resto de España».

El presidente de la Diputación se refirió a los valores aprendidos en el seno familiar para referirse a la santanderina Ruth Beitia, la atleta española más laureada de la historia. Fue la primera en conseguir un oro olímpico (Río 2016), y fue cuatro veces Campeona de Europa (2012, 2013, 2014 y 2016).

Posee «cualidades personales y valores compartidos en familia y que se basan en el trabajo, la constancia, el sacrificio, la honestidad, la limpieza, la calidad y la fidelidad», aseguró Carnero. «Nos ha demostrado a través de su trayectoria que hay que levantarse cuando las cosas no van bien, porque solo así se alcanza el éxito».

Carnero se refirió a José Luis Sanz Busto como «la personificación de una vida comprometida en hacer realidad un sueño basado en dos grandes protagonistas: la tierra y la familia», y destacó que cuando abrió su bodega sólo había 20 elaboradoras en la Ribera del Duero, y ahora «más de 200». El éxito de Dehesa de los Canónigos radica, según el presidente de la Diputación, «en esos dos pilares y en el trabajo con ilusión, humildad, esfuerzo y pasión, valores que Luis ha sabido transmitir a sus hijos Belén e Iván».

Calidad

El presidente de la Diputación se refirió al vino en la provincia de Valladolid, «con más de 22.000 hectáreas dedicadas al cultivo de la vid en 106 municipios amparados por alguna de las seis figuras de calidad de la provincia, cinco Denominaciones de Origen y una Indicación Geográfica Protegida».

También destacó otras «dos cosas» que relacionan a los tres nuevos Alcaides de Honor, «y que, sin duda, les ha llevado a alcanzar el éxito personal», aseguró Carnero. Esas dos cosas son «una forma de concebir la vida basada en la fidelidad a los principios y valores aprendidos en el seno de su familia y el amor a su tierra natal. Un amor que les ha hecho permanecer en ella incluso desoyendo las voces que les ofrecían nuevas posibilidades o un camino más fácil si decidían buscar otro espacio vital en el que desarrollar su actividad. Una vinculación a lo propio que les confiere, sin duda, un marchamo especial».

El máximo responsable de la institución provincial finalizó su intervención reiterando su agradecimiento a los tres galardonados por haber aceptado ser, a partir de ayer, «Alcaides de Honor del Museo Provincial del Vino y, en consecuencia, nuevos embajadores del enoturismo en la provincia de Valladolid».

Unos galardones con los que, además, «queremos mostraros nuestra admiración, pues sois un ejemplo a seguir por todos nosotros», remarcó Carnero. «Y, junto a ello, queremos agradecer el trabajo, el compromiso y la lealtad que venís demostrando desde hace años, desde vuestros respectivos ámbitos, en defensa de la imagen de nuestro país dentro y fuera de nuestras fronteras».

Los tres adjetivos más repetidos por el presidente para describir a los tres nuevos ‘embajadores del vino’ fueron «constancia, perseverancia y coherencia». Adalides de la Marca España «desde el mundo del vino, del deporte y de la empresa».

Sanz: «el museo es un gran embajador del vino»

El bodeguero José Luis Sanz, de Dehesa de los Canónigos, agradeció la distinción dada por la Diputación y valoró la labor desempeñada durante todos estos años por el Museo Provincial del Vino: «Está ejerciendo de embajador impresionante por los las visitas turísticas que vienen, y nosotros estamos encantados», dijo, a la vez que dedicó un recuerdo al desaparecido Pascual Herrera, primer director del Museo. También defendió la calidad de los vinos, «que está bastante bien situada y hay que continuar el esfuerzo por realizar buenos vinos, para que sigan su andar por el mundo y sigan representando a España». Sanz rememoró los inicios de su bodega, a la que ahora dedican sus esfuerzos dos de sus hijos: «Todo empezó con un sueño, un anhelo de mi mujer, y este premio nos compromete a seguir trabajando», concluyó.

Beitia: «vender estos vinos es un bendito compromiso»

La atleta Ruth Beitia agradeció el galardón recibido y consideró su labor adquirida de ‘embajadora’ de los vinos como un «bendito compromiso». «Me siento orgullosa de estar hoy aquí en Peñafiel.

Encantada y orgullosa de representar a los vinos», aseguró, a la vez que bromeó con la insignia acreditativa de la distinción: «Quién me iba a decir a mí que iba a volver a ganar una medalla», dijo.

La mejor atleta española fue la primera en conseguir un oro olímpico y fue cuatro veces campeona de Europa. «Bendito compromiso, vender este tipo de vinos», remarcó, al tiempo que confesó no entender mucho de vinos, «pero mi paladar siempre se decanta por un Ribera del Duero», aseguró.

La atleta, que tenía «una cuenta pendiente con Peñafiel», dijo tener «muchas ganas» de visitar el Museo Provincial delVino de Valladolid.