Los municipios de Valladolid reciben 850.000€ para mantener sus iglesias
Hasta 56 localidades vallisoletanas perciben ayudas para mantener vivo su patrimonio / «Restaurar la iglesia de los pueblos es una de las principales demandas de los alcaldes»
La provincia de Valladolid cuenta con una gran cantidad de patrimonio histórico. Cuadros, retablos, grabados, esculturas y, también arquitectura. Palacios y castillos, pero además, iglesias y ermitas. Muchas de estas últimas se encuentran distribuidas por todos los municipios de la provincia y todas ellas necesitan someterse a un mantenimiento, de cuando en cuando.
Valladolid quiere cuidar su patrimonio histórico, pero no solo el de la capital, también el que se encuentra en sus pueblos. Por ello, como cada año, la Diputación de Valladolid destina una partida presupuestaria a la conservación y restauración de las iglesias y ermitas de sus municipios.
El objetivo es de esta partida presupuestaria, como explica Alberto Collantes, diputado delegado dentro del área de Asistencia y Cooperación a municipios, es apoyar a los municipios en la conservación y restauración de sus monumentos y, de esta manera, «mantener viva» la historia y el arte en cada uno de ellos.
En total, durante este año se recibieron alrededor de dos millones y medio de solicitudes de ayuda de los ayuntamientos de los pueblos. «Restaurar la iglesia de los pueblos es una de las principales demandas de los alcaldes, además de las carreteras e infraestructuras», aseguró Collantes, a lo que añadió que se debe hacer un proceso de selección para dar las ayudas. «Tienen prioridad los edificios que tienen daños estructurales que pueden suponer un peligro para las personas, y después los que, aunque tienen dañada su estructura, no suponen ningún peligro», explicó el diputado delegado.
Tras realizar la selección, en total son 56 los municipios que se han visto beneficiados de las subvenciones de la institución provincial durante este año. En su conjunto, la cantidad de dinero invertida en el mantenimiento de estos edificios históricos asciende a 875.000 euros en toda la provincia vallisoletana. Del total, alrededor de 300.000 euros los proporciona el arzobispado, 400.000, la Diputación y, el resto, cerca de un 20%, los ayuntamientos municipales.
El año pasado no se realizó ninguna campaña para el mantenimiento del patrimonio, debido a que la partida no salió en los presupuestos, pues había otras necesidades prioritarias. No obstante, en anteriores partidas también participaba la Junta de Castilla y León, por lo que la inversión era mayor a la aportada en la actualidad.
Las labores de restauración difieren de manera considerable de una localidad a otra. Las labores de mantenimiento comprenden desde la reparación de grietas y humedades, hasta retejar y restaurar la cubierta o acondicionar el edificio por completo. Debido a ello, los presupuestos destinados a cada municipio son muy diferentes los unos de los otros.
De esta manera, tan solo 12 municipios de la provincia son beneficiarios de ayudas superiores a los 25.000 euros. Estas localidades son Bobadilla del Campo, Bocigas, Castrillo Tejeriego, Matapozuelos, Mojados, Olmos de Esgueva, Piña de Esgueva, San Miguel del Arroyo, Valbuena de Duero, Vega de Ruiponce, Villabañez y Villavicencio de los Caballeros.
La iglesia de Villalba de Adaja, pedanía dentro del municipio de Matapozuelos, se encuentra en su segunda fase de restauración, en la que se han invertido 38.880 euros. La de Villalba de Adaja es la cantidad más elevada empleada con este fin en el año 2017.
Por otra parte, Bobadilla del Campo ha recibido un total de 32.000 euros para reparar la cubierta de la iglesia de San Matías Apóstol, que combina los estilos mudéjar, renacentista y barroco.
También la iglesia de San Salvador de Vega de Ruiponce, que necesita una reparación del pavimento del templo, recibió 31.200 euros.
Por otra parte, la Diputación de Valladolid también dio a conocer las subvenciones que se han concedido de cara al año 2018, a falta de aprobarse los presupuestos, con el fin de restaurar y conservar las iglesias y ermitas de los municipios vallisoletanos. En esta ocasión se benefician de las ayudas 55 localidades, que recibirán en su conjunto un apoyo económico por valor de 566.060 euros, sin contar con lo que aportan los ayuntamientos.
En esta ocasión, el municipio que recibe más ayudas es Íscar, que lo invertirá en la reparación de la cubierta de la iglesia de San Miguel, con 44.400 euros. La segunda posición la ocupa la localidad de Villafrechós que, al igual que Íscar, invertirá la subvención, de 370.040 euros, para continuar con las labores de mantenimiento de la cubierta de la iglesia parroquial de San Cristóbal.