Diario de Valladolid

En Peñafiel todos se mojan

La localidad celebra su tradicional chúndara los días 15, 16 y 17 de agosto / Los asistentes se refrescarán con el agua, mientras bailan con el pasodoble

Los asistentes al chúndara se refrescan con el agua que lanzan los vecinos desde los balcones.-EL MUNDO

Los asistentes al chúndara se refrescan con el agua que lanzan los vecinos desde los balcones.-EL MUNDO

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Patricia Martín

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El agua y la música son los protagonistas de estos días en Peñafiel. La localidad vallisoletana celebra desde hoy, y hasta el 18 de agosto, sus fiestas patronales de Nuestra Señora y San Roque, en las que destaca de manera especial su tradicional chúndara, que tendrá lugar, como es habitual, los días 15, 16 y 17 de agosto a las 17.00 horas.

Pero, ¿qué es el chúndara? Pues bien, se trata de un tradicional pasacalles en el que cientos de personas que recorren bailando algunas vías de la localidad (desde Plaza España hasta la Plaza del Coso), mientras los vecinos les lanzan agua desde los balcones y ventanas, ya sea mediante el uso de cubos o, los más drásticos, incluso con mangueras. De esta manera, todos los asistentes terminan empapados, frescos y, sobre todo, pasándoselo en grande, con una tradición que, como destaca el alcalde de la localidad, Roberto Díez, no sería posible sin «la participación voluntaria de los vecinos ni sin el esfuerzo de la banda de música».

El pasacalles se encuentra animado en todo momento por la banda de música del Ayuntamiento de Peñafiel que toca durante el evento, de entre dos horas y media y tres de duración, el mismo pasodoble. Y es que chúndara y La Entrada, nombre de la canción del alicantino Miguel Esquembre que acompaña a la fiesta, no se entienden el uno sin el otro.

De hecho, la refrescante celebración debe su nombre a la onomatopeya usada por los vecinos para tararear los primeros instantes del inicio del pasodoble. Además, el ritmo de la melodía se ha acelerado con el paso de los años para adecuarlo al ambiente festivo del pueblo.

No obstante, detrás de una tradición, siempre existe un origen y, en el caso del chúndara no podía ser de otra manera. Según el alcalde de la localidad, la fiesta comenzó a a celebrarse de manera oficial en los años 50. Su origen se encuentra en la posesión que realizaban durante aquellos años las autoridades del lugar junto con los toreros que participaban en los festejos taurinos. «Para retrasar la llegada de la procesión a la Plaza del Coso, los vecinos empezaron a lanzarles agua», explicó Díez.

Con el paso del tiempo, las autoridades institucionales fueron sustituidas por vecinos y visitantes y el agua y la música permanecieron siento una constantes en las fiestas del municipio vallisoletano de Peñafiel.

Además, el chúndara de Peñafiel es una fiesta única que desde el día 17 de agosto, contará con su propio cupón de la ONCE con su imagen. «Es algo que ha emocionado mucho a los vecinos y que va a llegar a mucha gente de toda España, una acción que no podríamos realizar desde el Ayuntamiento», declaró agradecido el alcalde de Peñafiel.

En definitiva, Peñafiel es una localidad que tiene mucho que ofrecer y en la que, durante las celebraciones patronales, disfrutar está garantizado. O como asegura su alcalde, Roberto Díez, «las fiestas de Peñafiel son auténticas, variadas y diferentes a las que se celebran en otros pueblos de la provincia».

LOS ORÍGENES DEL CHUNDARA

El chúndara. El nombre de la festividad tiene su origen en el tarareo de los primeros compases del pasodoble La Entrada.

El origen de la fiesta. El chúndara tiene su origen en una antigua procesión que realizaban las autoridades del pueblo junto a los toreros que iban hacia la Plaza del Coso. Para retrasarla, los vecinos comenzaron a tirarles cubos de agua.

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