Tres heridos en un difícil encierro campero de fin de fiestas en Íscar
Los novillos cornearon a dos de ellos, que fueron atendidos por heridas leves, y arrolló a otro provocándole una herida en la rodilla
Íscar vivió ayer con varios sobresaltos el segundo de sus encierros camperos, en la última jornada de sus fiestas patronales que se prolongan desde el pasado jueves. Los novillos cornearon a dos aficionados, que fueron atendidos por los servicios sanitarios con heridas leves, y a un tercero, de la cercana localidad de Alcazarén, lo arrolló otro de los astados, enganchándolo por por la ropa y provocándole una herida en la rodilla.
La manada estaba compuesta por cinco novillos y siete cabestros. La entrada al empedrado fue complicada.En el embudo se produjo la mayoría de los momentos de peligro. Abundaron los caballistas, como en la jornada anterior, con casi 300. Miles de aficionados se congregaron en el recorrido urbano desde las diez de la mañana, cuando la manada partía de los corrales de la Varga de San Miguel.