La ARMH comienza el ‘rastreo’ de la represión en el archivo de la provincia de Valladolid

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha dado ya los primeros pasos para iniciar una investigación en el Archivo Provincial centrada en recabar nuevos datos que les permitan avanzar en el estudio de la repercusión y el alcance de la represión franquista en Valladolid.

A la espera de firmar un convenio con la Diputación para beneficiarse de una subvención de 25.000 euros destinada a la contratación de personal especializado en el análisis documental, la asociación ya ha visitado las instalaciones del archivo, ubicadas en el edificio Doctor Villacián de Parquesol, para poder organizar los posteriores trabajos de ‘rastreo’.

Arranca así la búsqueda de información en uno de los archivos «más importantes» de la provincia donde aún no se había podido entrar, explicó el presidente de la ARMH de Valladolid, Julio del Olmo, pendiente todavía del visto bueno para ahondar en los documentos que alberga el de la Guardia Civil aunque, por el momento, no tienen «esperanzas» de obtener el beneplácito del Gobierno central, tras la negativa también del anterior Ejecutivo socialista.

Su labor, por tanto, se centrará en los próximos meses en el examen de los ficheros custodiados por la institución provincial. No con el objetivo de localizar fosas comunes, pues «no hay referencias de sus ubicaciones, e incluso las anotaciones que se realizaban en los cementerios son mentira, porque su pretensión era ‘hacer desaparecer’», sino con la intención de conseguir nuevos datos sobre «el impacto de la represión en las familias».

«A través de la Diputación se encauzaban ayudas de tipo social, por ejemplo, las de los niños huérfanos», avanzó Del Olmo, quien recordó que recientemente encontraron en Medina de Rioseco un libro donde se registraban esas subvenciones. «Gracias a las ayudas que se daban a los niños sabemos quiénes eran sus padres. Allí había más de 270 menores de 18 años huérfanos y sin recursos».

Los presos que fallecieron en el antiguo manicomio – «utilizado como cárcel donde trasladaban a los enfermos»– o las mujeres que dieron a luz dentro de las prisiones son todavía líneas de investigación abiertas y sin datos oficiales, pues las referencias conocidas hasta ahora proceden de testimonios personales. «Nos faltan muchos datos para completar la información», destacó Del Olmo.

Sin embargo, sumergirse en los legajos del archivo provincial les ha resultado imposible hasta que en diciembre del año pasado las Cortes de Castilla y León aprobaron por unanimidad una proposición destinada a introducir una reforma parcial en la ley de Archivos y Patrimonio Documental de la región.

Gracias a esta modificación se rebajaron a la mitad los plazos para poder consultar documentos que pudieran afectar a la seguridad de las personas, a la averiguación de delitos, a su honor, a la intimidad de su vida privada y familiar o a su propia imagen. En vez de esperar cien años a partir de la fecha de los documentos, ahora tienen que transcurrir 50.

«Había una contradicción entre la norma general y la ley de Castilla y León, y la Diputación de Valladolid se había aferrado hasta ahora a este hecho para que no pudiéramos acceder hasta que, gracias al apoyo de todos los partidos, se cambió el texto», enmarcó el presidente de la ARMH de Valladolid para explicar por qué hasta ahora no habían podido adentrarse en el Archivo Provincial para trabajar en sus investigaciones. «Ahora por fin podemos volcarnos».

Salvado este escollo, la asociación espera ahora que la Diputación finalice la redacción del convenio que se comprometieron a rubricar para que puedan contratar archiveros especializados en la materia, aunque antes tendrán que aclarar si recurrirán a personal de la Universidad de Valladolid para llevar a cabo esas labores, como propone la institución provincial, o a otros profesionales, como solicita la ARMH, pues entienden que los estudios de la UVA nunca han coincidido con los suyos y, por tanto, no es necesaria su participación.

El portavoz de la Diputación, Guzmán Gómez, confió en «llegar a un acuerdo» entre ambas partes y anunció que el texto del convenio está «prácticamente elaborado, a punto de terminar la redacción», después de que el 25 enero mantuvieran una reunión con la asociación para sentar las bases sobre la propuesta de colaboración.

Han transcurrido, por tanto, dos meses desde el encuentro y el presidente de la ARMH apremia para que no se dilaten más los plazos. De hecho, anunció que si no tienen respuesta en un mes, «o no es la esperada», iniciarán la investigación con voluntarios, aunque eso suponga alargar los trabajos. «Vamos a vaciar el archivo este año, con o sin ayuda», aseveró Del Omo.

LA ASOCIACIÓN REALIZA UNA NUEVA CATA EN LA CARRETERA DE OLIVARES

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Valladolid se ha trasladado este fin de semana a la carretera de Olivares para realizar una cata en busca de una fosa común que ya intentaron localizar hace una década, con resultado negativo. El testimonio de un vecino de la zona, que aseguró haber encontrado restos óseos al abrir una zanja de riego, les ha servido de ‘pista’ para retomar la investigación en este paraje, aunque el presidente de la entidad, Julio del Olmo, lamentó las dificultades para localizar enterramientos, ya que el paso del tiempo dificulta que existan testimonios directos sobre posibles ubicaciones. Si el resultado de la cata es positivo, Del Olmo confía en contar con la ayuda de la Diputación de Valladolid para desarrollar las labores de exhumación e identificación de los cuerpos, como la tuvo del Ayuntamiento de la capital en los trabajos realizados recientemente en el cementerio del Carmen, recordó.