Mensaje en el móvil: «Ya ha salido la noticia en 3 televisiones, ja, ja...»
El encubridor relata cómo Adrián le mostró el cargador: «Sólo ha dejado una bala», le dijo
Prolija fue la declaración del cuarto encausado, Pablo Azcona, a quien se piden dos años de prisión por encubrimiento. Fue el único que se prestó a responder a las preguntas del fiscal. Pese a que Adrián Blanco quiso exculparle asegurando que el arma del crimen «nunca estuvo en posesión de Pablo», de la declaración de este último se deduce que facilitó a Adrián el teléfono de «Ramón, el gitano», para que le comprara la pistola de 9 milímetros parabellum.
La razón de que Azcona no denunciara los hechos, pese a que Adrián le contó lo sucedido ese día, es que «sólo quería que Adrián saliera» de su casa, y para ello «necesitaba dinero». Adrián le habría contado lo sucedido en el Club Las Vegas «llorando y muy nervioso». Tan nervioso estaba, y confundido, «que me dijo que Manuel había matado a tres o cuatro personas en el club», aseguró Azcona. Adrián abrió el cargador, se lo mostró y le dijo: «Sólo ha dejado una bala», en referencia a Manuel Martínez.
Así, con la venta del arma Adrián consiguió «39 billetes de 50 euros» según se puede observar en una foto de Whatssap que envió a Pablo. Eso suma 1.950 euros, 650 más de lo que habrían pagado por ella en Fuenlabrada.
Pese a que Azcona aseguró desconocer que Adrián Blanco se dedicaba al trapicheo de drogas, la acusación le afeó el discurso leyéndole mensajes de Whatsapp entre los dos, recuperados después por la Policía, que hablan abiertamente de esos trapicheos.
La acusación quiso probar un mayor conocimiento de los hechos por parte de Pablo Azcona al mencionarle otro mensaje de móvil en el que se mofaban de lo ocurrido: «Ya ha salido la noticia en tres televisiones, ja, ja...», se escribieron.