La alcaldesa aplaza el Pleno que iba a visar la bajada de su sueldo

La alcaldesa de Zaratán, Susana Suárez (PP), desconvocó ayer el Pleno ordinario de octubre, que se iba a celebrar, como cada último martes de mes, a partir de la seis de la tarde. Los concejales de los grupos de la oposición se encontraron con un mensaje de whatsapp minutos antes de la sesión, y con un cartel en la puerta de la Casa Consistorial que informaba del aplazamiento del encuentro al 8 de noviembre.

El portavoz de Izquierda Unida en la Corporación Municipal, Miguel Torres, atribuyó tal medida urgente a la voluntad de la alcaldesa de que el Pleno no debatiera la bajada de su sueldo y la de otros dos ediles de su equipo de Gobierno. La moción que pide tales rebajas en las retribuciones había sido presentada a Registro por el propio Torres el día anterior, lunes 24 de octubre.

Suárez, por su parte, con quien intentó ayer comunicarse este periódico, sin éxito, atribuyó la decisión, según el relato de Torres, a la ausencia inesperada de una concejala del Partido Popular, que agravaría la situación de minoría en la que gobierna la formación.

El grupo de IU considera que la «casi inexistente» gestión del equipo de Gobierno desde las últimas elecciones municipales «no justifica que se estén cobrando sueldos que le cuestan 52.000 euros al año al Ayuntamiento».En concreto la moción pide que se reduzcan a la mitad las retribuciones de la alcaldesa, que cuenta con una asignación de 34.000 euros anuales por dedicación exclusiva; de la concejala de Hacienda, Esther Peláez, con otra de 12.000 euros anuales por una dedicación parcial del 50%; y del concejal de Festejos, Roberto Migallón, con una dedicación parcial del 25% y 6.000 euros.

La propia alcaldesa había pedido en 2013, cuando estuvo en la oposición, que ningún edil cobrara por la gestión municipal.