«Es muy sano que el PP aprenda a escuchar y alcanzar acuerdos»

Teresa López, a la vez diputada provincial y alcaldesa de Medina del Campo, supera su primer año como cabeza visible del Grupo Provincial Socialista. Un tiempo tranquilo en un equipo que acumuló episodios convulsos con sus dos anteriores portavoces, enfrentados al ‘aparato’ del partido. «Eso fue hace ya mucho tiempo», asegura.

Pregunta.– El PP gobierna en minoría en la Diputación desde hace trece meses. Este tiempo se ha caracterizado –como en anteriores legislaturas–, por amplios consensos entre los grupos políticos provinciales, también los de PP y PSOE. ¿No pueden tomar ejemplo los políticos nacionales para llegar a un acuerdo y formar un Ejecutivo ya?

Respuesta.– Ésa es una pregunta con trampa. No es equiparable la situación nacional con la de una diputación. Una cosa es que alcancemos acuerdos en la Legislatura, y otra que el PSOE se pliegue a facilitar un Gobierno del PP.

El PP debe hablar con sus partidos más cercanos, y pactar. Como hizo en la Diputación con Ciudadanos, que yo entiendo que es un partido de centro derecha. Luego, cuando Mariano Rajoy esté investido, ya llegaremos a acuerdos y consensos para sacar adelante políticas. Pero nunca acuerdos de legislatura entre el PP y el PSOE. No nos podemos mezclar. Somos como el agua y el aceite. Por otra parte, es mucho más fácil llegar a acuerdos entre grupos en una diputación, por la naturaleza de la función que tiene, que en otras instituciones como en un Ayuntamiento o en el Gobierno central.

P.– Pero el presidente, Jesús Julio Carnero, dice que no es tan fácil, que se deja ‘muchos pelos en la gatera’ cuando le toca negociar...

R.– Sin duda. Le cuesta porque por primera vez el PP está en minoría y se tiene que echar atrás en muchas cosas. Gracias a eso, ahora alcanzamos pactos que antes eran impensables, como el de la Memoria Histórica. Eso es lo que le pasa a Jesús Julio Carnero, que le cuesta porque no están acostumbrados.

Igual que no está acostumbrado Rajoy. ¿Qué está haciendo para negociar? Otra cosa sería si ofreciera, por ejemplo, derogar la reforma laboral, la ‘Ley mordaza’, un gran pacto por la educación, una reforma constitucional...

P.– El cambio de voto de un solo diputado provincial podría haberle hecho a usted presidenta de la Diputación... ¿Se vio en algún momento en ese papel?

R.– Nunca me he visto presidenta de la Diputación. Vimos la posibilidad de formar un gobierno de izquierdas, y tuvimos una única conversación con los grupos políticos en la que ya se vio que sería imposible. Pero había que intentarlo...

P.– Justo en el momento en que PSOE y Ciudadanos pactaban para hacer presidente a Pedro Sánchez, la diputada provincial de la formación naranja votó en contra de las Ubost, con gran sorpresa para el PP. ¿Vio en aquel momento la posibilidad de que cambiara de ‘bando’ y facilitara una moción de censura?

R.– No, nunca. No soy partidaria de las mociones de censura, a no ser que una institución determinada atraviese un momento de ingobernabilidad que para nada está ocurriendo en la Diputación.

Se está haciendo un buen trabajo, llevando adelante muchas enmiendas, por ejemplo a los presupuestos, incrementando los planes provinciales, plan de empleo, ayudas para escuelas infantiles... Estamos atravesando un momento muy sano. Es muy sano que el PP aprenda a escuchar. A hablar, escuchar y negociar.

P.– Si no le gustan las mociones, no le gustará tampoco lo que ha ocurrido en Valdestillas, donde Ciudadanos, con el apoyo del Grupo municipal popular, se ha hecho con la Alcaldía...

R.– No me ha gustado nada. No apoyo esa moción en absoluto, sobre todo cuando alguien que se ha convertido prácticamente en un juez anticorrupción pacta con quien ha dejado el Ayuntamiento en bancarrota.

P.– En las dos últimas elecciones, el Partido Popular ha recuperado 28.000 votos. ¿Qué ha hecho mal el PSOE para perder la confianza del electorado? ¿Qué tiene que hacer para crecer?

R.– Yo creo que la pregunta correcta sería: ¿por qué al PP no se le castiga por los casos de corrupción? Quien fue nuestro senador y diputado, Mario Bedera, dice que los casos de corrupción del PP los termina pagando el PSOE. Creo que está en lo cierto. Parece que los ciudadanos han indultado a Rajoy. Sí es cierto que en el 20-D se le dio un castigo, pero en el 26-J se le ha indultado.

Es un resultado que no se entiende. Sobre todo cuando vemos que el PSOE desbloqueó la situación mientras Rajoy se quedó sentado esperando que otros hicieran su trabajo.

P.– Volviendo a la política provincial... ¿Qué se ha conseguido en la Diputación en este primer año de Legislatura?

R.– En primer lugar, hemos conseguido que se dedique una mayor parte del presupuesto al mundo rural. Por ejemplo, las subvenciones que se concedían a entidades que no tienen que ver con los municipios, hemos revertido ese dinero a los pueblos.

Por ejemplo, recientemente hemos destinado ayudas por valor de 305.000 euros para que municipios que se quedaron fuera del Plan de Empleo de la Junta, en ‘terreno de nadie’, puedan disfrutar de esas ayudas al empleo. ¿Cómo hemos conseguido esas cosas? Pues por ejemplo, impidiendo ayudas como la de 20.000 euros que se iba a dar para arreglar el césped en un polideportivo de Zaratán.

P.– ¿Y cuáles son los objetivos para el resto de la Legislatura?

R.– Lo más importante, intentar que la Junta asuma sus competencias. Que la Diputación también asuma las suyas , pero que no tenga que hacerse cargo de un montón de competencias impropias de las que debería hacerse cargo la Institución regional.

P.– Además de portavoz del Grupo socialista en la Diputación, es usted alcaldesa de Medina del Campo, que ha perdido 800 habitantes en los últimos años, acercándose a la barrera de los 20.000. Si el censo disminuye de esa línea pasaría a estar bajo la tutela de la Diputación. ¿Qué cambiaría?

R.– No contemplamos en absoluto la posibilidad de bajar de 20.000 habitantes. Queremos mejorar esa Agenda de la Despoblación de la Junta, que no ha dado ningún resultado. Cuando nos manifestábamos por el AVE, lo hacíamos contra la despoblación; cuando nos manifestábamos por la línea de cercanías, lo hacíamos contra la despoblación. No vamos a permitir que el censo baje de los 21.000 habitantes que tiene ahora.

P.– ¿Sería más fácil, al menos, conseguir la construcción de la tan polémica residencia pública de mayores?

R.– La residencia estaba conseguida. Echarlo atrás ha sido una decisión política de los hermanos mayores de Crescencio Martín Pascual. Yo mismo escuché hablar a dos personas del PP en los pasillos de Las Cortes, que decían que nos teníamos que enterar de quién mandaba. Uno de los interlocutores era Martín Pascual. Y desde luego, a la luz de los acontecimientos, nos hemos enterado de quién manda.

P.– Hemos hablado de los acuerdos que se alcanzan entre grupos en la Diputación. ¿Por qué no los alcanza con el Grupo Municipal Popular de Medina?

R.– En el terreno personal, me llevo bien con todos. Hay buen trato. Pero el problema es que luego, en materia de acuerdos, es prácticamente imposible. No tiene nada que ver la capacidad de negociación y diálogo del Grupo provincial con las del Grupo municipal. Estos últimos no la tienen.

P.– Mencionaba antes el acuerdo sobre el apoyo a la Memoria Histórica que se alcanzó por unanimidad a través de una proposición al Pleno. ¿En qué quiere el Grupo Socialista que se concrete esa iniciativa?

R.– Para mí eso se concreta en que no tiene que haber ningún represaliado en las cunetas si hay un solo familiar que quiere darle sepultura, para saber dónde tiene que ponerle una rosa. Aquel que perdió a un familiar no le está buscando para desenterrar antiguas hachas de guerra. Creo que esa resolución se concreta con el apoyo económico a las asociaciones que se dedican a ello, y que permite a estos familiares encontrar a los miembros de su familia que desaparecieron.

P.– El Grupo Provincial Socialista vivió momentos convulsos en pasadas legislaturas. La destitución de Ana Vázquez para darle la portavocía a Juan José Zancada, el enfrentamiento de este último al aparato provincial del partido... Y luego llegó usted. ¿Se han solucionado estas crisis? ¿Qué tal funciona?

R.– Esos tiempo convulsos de los que habla usted pasaron ya hace mucho tiempo. Ahora en el Grupo provincial se aúna la experiencia con otras caras nuevas, se conjuga la ilusión con la templanza. Todos los miembros del Grupo tienen mucha autonomía, aunque yo sea la cabeza visible. Todo se discute mucho y solemos llegar a consensos. Si no, nos sometemos al criterio de la mayoría.

P.– ¿Y en cuanto a la labor del Grupo en concreto?

R.– En cuanto a la labor realizada, estoy satisfecha. Nuestros mayores esfuerzos se centran en dar visibilidad a los alcaldes. Ahora estamos trabajando la modificación del Reglamento Orgánico, y nos preocupamos de los asuntos que más preocupan a los pueblos, de sus necesidades desde un punto de vista práctico.

Por eso nuestras mociones se centran en asuntos muy concretos de los municipios como, por ejemplo, si la Confederación Hidrográfica delDuero se ocupa adecuadamente del mantenimiento de las riberas de los ríos, o cómo luchar contra las plagas de procesionaria. Necesidades que detectamos tras escuchar a los municipios.

P.– PP y PSOE aprobaron recientemente una moción en defensa de las Diputaciones. Son partidarias de su existencia, pero ¿es urgente abordar reformas?

R.– Las diputaciones tienen que abordar una reforma, pero como todas las cosas. Reformas para modernizarlas. Yo soy una defensora de las diputaciones. El ejemplo más claro de que son útiles es que cuando la Junta deja en terreno de nadie a 61 municipios con las ayudas del Plan de Empleo, ahí está la Diputación para corregirlo. Sin diputaciones no habría transporte escolar público para esos pueblos en los que sólo viven tres o cuatro niños. Los padres tendrían que apañárselas llevándolos en coche.

El PP habla ahora de hacer reformas, pero no las hicieron cuando tenían una mayoría sobrada. Es urgente abordar el asunto de las competencias impropias. ¿Que la elección de los diputados provinciales sea directa? Sí, también soy partidaria.

P.– Ciudadanos ha acusado de falta de transparencia a Sodeva, en los contratos menores. ¿Cree que es necesario mejorar la transparencia de la Diputación?

R.– Ciudadanos ha visto que lo de la transparencia tiene calado social y hace bandera de ello. Le pasó a Rosa Díez con la unidad de España y algún otro asunto. Lo que pasa es que quieren hacer tanta bandera que lo plantean incluso en instituciones que cumplen con la transparencia.

No creo que sea ese, en absoluto, el problema de la Diputación, en absoluto. Es una Institución transparente.

P.– ¿Y cuál sería ese ‘problema’ al que alude?

R.– El problema es que se dedica a tapar muchas vergüenzas de la Junta de Castilla yLeón.

P.– ¿Cree usted que se solucionará el proyecto de Meseta Sport después de tanto dinero invertido sin fruto?

R.– De Meseta Sport lo que hay que decir es que se necesita una solución ya. Hay que hacerlo rentable. Hay que acabarlo y rentabilizarlo. No nos podemos quedar a medias. Tiene que ser un revulsivo para dinamizar la zona.

P.– Supongo que habrá tranquilizado al PSOE que el PP haya sido finalmente quien prohibiera dar muerte al Toro de la Vega...

R.– Yo no me he quedado ni más ni menos tranquila porque haya sido el PP el que lo haya prohibido. Lo que sí es cierto es que durante mucho tiempo al PP le dio lo mismo que se violentara a la ciudadanía con ese asunto. Ahora, al fin la Junta ha cogido el toro por los cuernos, nunca mejor dicho.

A mí, personalmente, no me gustan los toros ni el maltrato animal. Ahora bien, comprendo que nuestro alcalde en Tordesillas está en una situación complicada. Pero al final ha pasado lo que tenía que pasar: la prohibición.

P.– Medina del Campo posee unos encierros declarados de interés turístico nacional. ¿Ha sentido en su localidad presiones por parte de los antitaurinos?

R.– No. En Medina no hay ninguna presión porque en los encierros no existe maltrato. Y además, son preciosos. Aprovecho la ocasión para invitar a todo el mundo a presenciarlos.

Como he dicho, no me gustan especialmente los toros. Sin embargo los encierros de Medina sí, y siempre voy. Nunca imaginé que yo llegaría a decir que me gusta ver cómo los toros y los caballos se desplazan a la villa por el campo. Son imágenes de una gran belleza.

P.– Uno de los asuntos acuciantes de la Institución es el servicio de Bomberos de 35 localidades del alfoz de Valladolid, del que se ocupa la capital. El concejal de Seguridad y Movilidad, Luis Vélez, y el diputado provincial de Protección Civil y Extinción de Incendios, Artemio Domínguez, no se ponen de acuerdo en la valoración económica del servicio. ¿Cree que llegarán a una solución?

R.– Yo conozco de cerca esa labor porque tengo en mi casa a dos bomberos, mi marido y uno de mis hijos. Los dos son del Ayuntamiento. Y también conozco a muchos bomberos de la Diputación.

Entre ellos son tan solidarios que me gustaría que esa solidaridad se trasladara a los responsables políticos. Es una labor que requiere la ayuda de unos y de otros, y ellos colaboran siempre. No es momento de sembrar tensiones ni mala sintonía entre los efectivos de un cuerpo y de otro.

Por otra parte, yo conozco a Luis Vélez y a Artemio, y no me cabe duda de que son buenos negociadores y sabrán encontrar una solución.

P.– Hubo miembros de la Corporación, como Héctor Gallego, de Sí Se Puede, que entraron en la Diputación criticándolo todo duramente. Ahora, ¿qué tal es la relación entre los portavoces de los grupos, los nuevos y los antiguos?

R.– Cuando se ve una institución desde fuera, es fácil criticarla. Yo creo que Gallego ha conocido mejor la Diputación, las necesidades de los pueblos, y ahora lo ve de otra manera. Es importante ver cómo los alcaldes de los pueblos agradecen la ayuda prestada por un diputado provincial, que sabe que no va a ‘tragar’, sino a aportar. Es importante que los alcaldes se sientan arropados, porque muchas veces se trata de vecinos sin formación en leyes, que necesitan apoyo.

La relación entre los portavoces es muy buena. Es muy fácil dialogar con Sí Se Puede y con Toma la Palabra. Ahora estamos ilusionados con la modificación del Reglamento Orgánico, para dar más participación a los alcaldes y a las asociaciones más importantes de la provincia. Es una de las metas que tenemos todos, y creo que lo aprobaremos por unanimidad.