Los padres piden la prórroga de la guardería de Peñafiel
Padres de alumnos de la guardería municipal ayer, ante el alcalde, en el centro social ‘El Mirador’.-EL MUNDO
Los padres de los alumnos de la guardería de Peñafiel no quieren que las cosas cambien en el centro. Al menos, los que ayer acudieron a una reunión informativa convocada por el alcalde de la localidad, Roberto Díez. Todos se mostraron a favor de la prórroga del contrato con la empresa que hasta ahora se hace cargo del servicio: Clece. La marca gestiona 113 escuelas en España, con 9.000 alumnos de la franja de edad de 0 a 3 años.
Así lo explicó ayer a este periódico, tras el encuentro, el propio Díez: «Lo primero que he hecho es someter a la consideración de los padres la prórroga de la empresa, y el cien por cien ha manifestado que quiere prolongar el servicio».
La reunión tuvo lugar tras la negativa de los grupos de la oposición a efectuar esa prórroga en el último pleno municipal. PSOE, Ciudadanos, IU y CI rechazaron la propuesta presentada por el equipo de Gobierno –en minoría–, de ampliar el contrato desde el próximo 31 de julio, fecha en que expira el actual, hasta el 31 de julio de 2017.
La oposición cree más conveniente convocar un nuevo concurso «abierto a más empresas», con «un nuevo pliego de condiciones», para mejorar la transparencia. Así lo aseguró en su día el portavoz del PSOE, Javier Herrera.
Por su parte, el alcalde deploró la actitud de los grupos, y puso de manifiesto el «peligro» de que la guardería cerrara, ya que el Ayuntamiento mantiene el servicio desde su adjudicación en 2004, pero desde 2012, por ley, la competencia es de la Junta de Castilla yLeón. El primer edil defiende que lo único que puede hacer al Ayuntamiento es «prorrogar», y que si no lo hace, «es posible que no pueda volver a licitarlo porque es una competencia impropia».
Tras recabar el apoyo de los padres, Díez se comprometió ayer a sentarse «a hablar, lo primero con la empresa, para ver cómo podemos reconducir la situación», ya que tras la notificación del acuerdo contrario del Pleno «podría no hacerse cargo del centro», en cuyo servicio están inscritos 50 niños.
«A puerta cerrada»
Por su parte, los portavoces de los cuatro grupos de la oposición mostraron su enfado porque el alcalde no les permitió entrar a la reunión. «No quería que se produjera allí, con los padres, ningún debate político. Yo sólo quería informarles y que me manifestaran su punto de vista», aseguró Díez. Muy distinta es la opinión de los otros ediles.
«Se celebró la reunión a puerta cerrada. El alcalde impidió entrar a los concejales de PSOE, Ciudadanos, IU y CI», manifestaron en un comunicado conjunto. «Eso, a pesar de que sólo quisieron acudir para escuchar lo que el alcalde tenía que contarles». Los grupos de la oposición dan una versión distinta a la del primer edil incluso en el número de asistentes. Contra los 50 que registra Díez, los otros cifran la asistencia en «unos 20 padres y madres y empleados». También quisieron explicar el origen de la polémica sobre la prorrogación del servicio: «Cuando los concejales fueron convocados a la comisión informativa de Juventud, no constaba en el expediente ni tan siquiera el contrato original que iba a ser objeto de prórroga», manifestaron.
Los portavoces se quejaron de falta de transparencia: «El expediente que se discutió, a pesar de incluir el contrato fuera de plazo, carecía de evaluaciones de los padres y del resto de documentación que la oposición venía solicitando desde octubre de 2015», aseguraron.