Diario de Valladolid

Fuensaldaña

El castillo triplica los turistas con la torre del homenaje

Suma 180 visitantes en un sólo día frente a los 60 habituales de un fin de semana completo

Daniel, convertido en un infanta del siglo XV que viaja al XXI en busca de su corona revela a las familias los secretos del castillo-El Mundo

Daniel, convertido en un infanta del siglo XV que viaja al XXI en busca de su corona revela a las familias los secretos del castillo-El Mundo

Publicado por
Laura G. Estrada
Valladolid

Creado:

Actualizado:

Atraídos por la inmensidad de la llanura que se observa desde la torre del homenaje, el castillo de Fuensaldaña recibió el domingo, en un sólo día, al triple de público que el resto de los fines de semanas gracias al acondicionamiento de esta azotea para convertirse en nuevo atractivo. Después de casi dos meses de obras para implementar sistemas de seguridad, los turistas accedieron por primera vez a la parte alta de la fortaleza de principios del siglo XVI y disfrutaron de las vistas que permiten sus 34 metros de altura.

El segundo castillo más alto de la provincia, sólo por detrás del situado en Medina del Campo, acogió en total 137 personas en los cuatro turnos de visitas guiadas que permiten el acceso a esta particular ‘terraza’, cuando lo habitual es recibir entre 50 y 60 personas en el conjunto de un fin de semana, según confirmaron en la oficina de turismo allí instalada.

Y la cifra completa asciende a 180 visitantes en la jornada del domingo, pues hay que sumar los 43 «cortesanos» que participaron en la visita teatralizada. Aunque en este caso la torre del homenaje no forma parte del recorrido, la presencia del infante del siglo XV que viaja hasta el XXI gracias a una pócima mágica y busca la corona entre las dependencias del castillo para subir al trono de rey, ya es suficiente reclamo, sobre todo para los más pequeños de la familia, ilusionados e implicados en la aventura.

El resto de los turnos de visitas, divididos en dos de mañana y otros dos de tarde, sí tuvo la oportunidad de deleitarse con el horizonte. Para evitar riesgo de caídas por los matacanes [aberturas en el suelo que se incluían antiguamente en estas construcciones para lanzar piedras o flechas al enemigo] la Diputación de Valladolid ha colocado una barandilla acristalada a lo largo de los alrededor de cincuenta metros de perímetro.

Además, se han incluido una especie de peldaños que prohíben el paso en las escaleras de subida a las almenas, así como una pequeña puerta que también restrige el paso a los prismas, puesto que los torreones están a baja altura y existe riesgo de caída.

Elementos, en todo caso, que no interfieren en las extensas vistas que ofrecen estos muros, mandados levantar en 1451 por Alonso Pérez de Vivero, contador mayor del reino, y culminados por su hijo Juan en 1509, con el doble objetivo de convertir el castillo en fortaleza y residencia señorial, aunque su uso ha variado desde el almacén de grano hasta albergar las Cortes de Castilla y León durante 25 años.

La inclusión de luminarias completa las actuaciones desarrolladas en la azotea gracias a una inversión de 63.000 euros, que han servido también para mejorar el sistema de acceso al paseo de ronda. En esta zona se ha cambiado el vallado que rodea en círculo las escaleras y se ha colocado una cubierta conectada a un anemómetro que se cierra de forma automática en caso de fuertes vientos.

Finalizados ya estos trabajos de acondicionamiento, tanto de la azotea como del adarve, la Diputación comienza ahora a estudiar la disposición y las posibilidades de trabajo del histórico edificio para convertirlo, como resalta el presidente de la Institución provincial, «en el castillo de los castillos».

Nuevos atractivos para un emblema de Fuensaldaña consolidado como destacado reclamo de la provincia, pues recibe cada año más de 10.000 turistas.

tracking