El PP apunta a Marta Merlo como sucesora de Alejandro García

El Partido Popular apuesta por la actual teniente de alcalde y concejala de deportes de Íscar, Marta Merlo, como sucesora del regidor de la localidad, Alejandro García quien, después de 28 años sujetando el bastón de mando –siempre con mayoría absoluta a excepción de la primera de sus siete legislaturas– comunicó el lunes por sorpresa su decisión de no presentarse de nuevo como cabeza de lista en los comicios municipales de mayo.

Merlo concurrió como número tres del partido en las elecciones de 2011 y, tras la dimisión de la número dos en noviembre de 2013, García la aupó como teniente de alcalde. Es, de hecho, su clara apuesta para sucederle en el cargo, según confirmaron fuentes del partido.

Se trata de la alternativa que suena con más fuerza para alzarse como candidata a la Alcaldía, pero no la única. El nombre de otra mujer, de María Jesús Llorente Cabrero, también se hace eco después de varios años retirada de la política municipal. En concreto, la última legislatura en la que trabajó como concejala fue la de 2003-2007.

Serán los militantes de la junta local de Íscar los que decidan esta noche a partir de las 21 horas quién será la elegida y la secretaría general del partido la que ratifique el nombramiento de la sucesora de Alejandro García tras casi tres décadas como alcalde y 23 años como diputado en la Institución provincial.

«Quieto no me voy a quedar, pero el partido no me ha prometido nada», subrayaba ayer García sobre su futuro. La primera vez que sujetó el bastón de mando del municipio maderero, tenía 29 años. Ahora ha cumplido ya los 57. Tomó posesión un 30 de junio de 1987, recordaba, y durante su primera legislatura al frente del Consistorio, bajo las siglas de Alianza Popular, tuvo que lidiar para sacar adelante sus propuestas, pues ganó con mayoría simple al lograr seis de los trece concejales.

Su pasado poco tenía que ver con la política. Durante trece años, sin haber cumplido siquiera la mayoría de edad cuando se introdujo en el mercado laboral, trabajó en un matadero de pollos como administrativo y también se ganó un salario como comercial, recuerda. «No terminé el bachillerato; siempre fui un mal estudiante y creo que la mejor carrera es la filosofía de la vida».

Tras anunciar que se tomará un descanso después de las elecciones municipales del 22 de mayo, Alejandro García dice que descansará «un poco» porque «llevaba ya una marcha muy acelerada» y después, prefiere no adelantar acontecimientos. Volver al sector privado o buscar un hueco en la política, pero alejado de la primera línea. «Todo se andará».

Su despedida en el Ayuntamiento no será la única, pues su marcha arrastra a otros concejales, aunque también en este caso, como ocurre con el nombre su sucesor, Alejandro García guarda silencio y apela a la junta local que se celebra esta noche.

Balance

En el balance de sus casi tres décadas al frente del Consistorio, García destaca el impulso de una residencia de la tercera edad para la que contó con donativos vecinales, la solución de los problemas con el arsénico a finales de los 90, la construcción de un auditorio, de la casa de cultura, del frontón y un largo etcétera cuya enumeración finaliza con el aumento patrimonial, de los dos millones de euros a los 35 actuales, y con la rebaja de la deuda hasta los 1,6 millones.

La espinita la representan los 800 desempleados de la localidad, con una tasa de paro del 15%, estima, porque «la crisis ha afectado de pleno» al sector de la madera –que representa el 70% de la actividad laboral en Íscar– por la caída de la construcción.