Seleccionados los precandidatos a jurado en el juicio por el doble crimen machista de Paloma e India

El juicio con jurado por el doble asesinato de Paloma Pinedo, de 46 años, y su hija India, de ocho, ya ha arrancado a efectos de la selección del jurado popular de cara al juicio que se celebrará a partir del 11 de diciembre.

La sección segunda de la Audiencia Provincial (AP) de Valladolid ya ha realizado el primer sorteo para esta causa, con la preselección de 36 precandidatos a jurado, según informaron fuentes del caso. En estos momentos la fase se encuentra en el envío del cuestionario a los 36 elegidos por sorteo (edad, profesión, etc.), y cuando se reciba, la fiscalía y las partes podrán presentar recusaciones a algunos aspirantes.

El objetivo es que el día de inicio de la vista oral esté ya flitrada una lista de no menos de 20 candidaros, para iniciar las sesiones con 9 jurados titulares y dos suplentes, siempre con la máxima que exista paridad de sexos.

Un total de 50 personas, entre testigos-peritos y peritos declararán en el juicio con jurado contra el acusado David Maroto, de 47 años, por los asesinatos de la que era su pareja, Paloma Pinedo, y la hija de ésta, India, el 23 de enero de 2023. Un juicio que desarrollará por la modalidad de jurado y que arrancará el próximo 11 de diciembre, aunque con novedades, ya que se ceñirá a cuatro días de sesiones (para evitar entrar en fechas navideñas), prácticamente la mitad de lo que suelen alargarse los casos de homicidio, especialmente cuando hay además dos fallecidos.

Así lo han informado a este diario fuentes de una causa que va a tener al magistrado Miguel Ángel de la Torre como presidente del jurado, y está previsto que el fiscal sea Manuel Javato, a la sazón, fiscal delegado contra la Violencia sobre la Mujer en la provincia desde el 31 de diciembre de 2022, tan solo tres semanas antes del brutal asesinato de Paloma e India en el domicilio de ambas en el paseo de Zorrilla. A lo largo de las cuatro sesiones previstas pasarán por la sala 31 testigos, siete testigos en la condición también de peritos y doce peritos, en total 50 personas. Entre ellas las hermanas y la madre de Paloma, tías y abuela, también respectivamente de la niña India, de 8 años. «Será un trago muy duro, pero es inevitable su comparencia en el juicio», indicaron las fuentes consultadas.

Petición de prisión permanente

Las penas a las que se enfrenta Maroto, a tenor de lo que interesan las acusaciones, son tan elevadas, que pueden hace historia en Valladolid. De hecho el tudelano puede ser, con alta probabilidad, el segundo condenado a prisión permanente revisable de Castilla y León, después del caso de Roberto Hernández, condenado por el asesinato y violación de la niña Sara, de 4 años, en Rondilla.

La Fiscalía de Valladolid solicita para David Maroto prisión permanente revisable por el homicidio de la niña y otros 25 años más de cárcel por el asesinato de su pareja. La calificación de los hechos es similar en todas las acusaciones: la Fiscalía, la que ejerce la familia de Paloma, la del padre de la pequeña India, la de la Junta de Castilla y León y la popular ejercida por la asociación Clara Campoamor.

En realidad había poco margen de variación de calificación de los hechos, ya que David Maroto había confesado a su cuñado en la misma noche de autos el asesinato de ambas. Un reconocimiento que solo desembocaba en una petición de prisión permanente revisable para el caso de India, según la legislación española. Todas las partes ven agravantes de alevosía y parentesco en este caso de la menor. Sobre la calificación de la madre, que podría abrirse a una horquilla de 15 a 25 años de cárcel por asesinato, las acusaciones han concluido que la petición adecuada de cárcel es de 25 años porque confluyen las agravantes de parentesco y de ensañamiento. ­

Coartada desmontada 

La defensa del acusado, en su escrito de calificación, solicita una condena global de 25 años de prisión al tipificar ambas muertes como delitos de homicidio, con la eximente incompleta derivada de la ingesta involuntaria de sustancias suministradas por terceros. Así, pide 12 años de privación de libertad por la muerte de Paloma y 13 por la de la pequeña. La última diligencia de la fase de instrucción se llevó a cabo el 21 de noviembre de 2023 con la segunda declaración en el Juzgado del sospechoso. Maroto solo respondió a preguntas de su abogado para decir que no recordaba «nada» de la noche del crimen. A preguntas de su letrado aseguró que un amigo «le dio una sustancia», por lo que no tenía recuerdos de lo que sucedió ese 22/23 de enero de 2023 en la vivienda de Paloma del paseo de Zorrilla. Pero el testigo que era presentado por la propia defensa del acusado desmentía la versión y negaba ante el juez haberle dado ni vendido sustancia alguna. Dejó claro que estuvieron tomando tres copas en La Rondilla y que cuando se despidieron «estaba perfectamente»