Cantarranas, a un paso de convertirse en zona protegida contra el ruido

La histórica plaza de Cantarranas se encuentra cerca de convertirse en Zona Acústicamente Saturada (ZAS). El Ayuntamiento comenzó en el mes de enero a medir el ruido en el céntrico coso para determinar si cumple las características necesarias para ser declarada como ZAS.

«Todo indica que se va a tener que declarar como Zona Acústicamente Saturada», indica el concejal de Medio Ambiente, Alejandro García Pellitero. De esta manera el Consistorio daría respuesta a las reiteradas peticiones de los vecinos que llevan solicitando esta declaración para mitigar los excesos del ruido nocturno.

Fue precisamente a petición de los vecinos cuando el Ayuntamiento decidió instalar tres sonómetros para medir la intensidad del ruido y, a raíz de los datos recogidos, todo apunta que se podrá declarar como ZAS. Las mediciones deben durar al menos 12 meses, pese a que todavía queda tiempo para calibrar los datos. La ansiada petición vecinal parece que va a llegar a buen puerto. En enero de 2025 cesará la recogida de datos y comenzará el trámite necesario. Por ello, Pellitero señala que será a lo largo del «primer semestre» del año que viene cuando se puede declarar como ZAS.

Si finalmente se considera como ZAS este icónico lugar será el tercero en toda la ciudad. Si bien, no deja de ser un hecho curioso que fue la primera zona en la que se reclamó. Se adelantó la declaración como Zona Acústicamente Saturada la Plaza Martín y Monsó (popularmente conocida como plaza Coca) y la plaza San Miguel y sus respectivos entornos.

Los vecinos llevan años clamando contra el excesivo ruido nocturno que comienza a última hora de la tarde, continúa por la noche y se prolonga hasta la madrugada. Es una de las zonas de copas más concurrida de Valladolid y allí se concentran multitud de ciudadanos, sobre todo jóvenes. La música y el ruido en general superan los niveles permitidos por la ley y los vecinos sufren las consecuencias. Resulta muy difícil conciliar el sueño y los residentes en el entorno se dirigieron al Ayuntamiento en busca de una solución.

La Ley 5/2009, de 4 de junio, del Ruido de Castilla y León recoge que se podrá denominar a un zona como ‘Área ruidosa’ si supera los 65 decibelios por la noche, cuando Cantarranas tiene su mayor pico de actividad y de ruido, en especial los jueves, viernes y sábados. Un horario de noche que la propia ley define entre las 23.00 y las 07.00 horas. Esta cifra de decibelios es superada en esta plaza, a raíz de los primeros datos recogidos.

«Aquellas zonas del municipio en las que existan numerosas establecimientos o actividades destinadas al ocio, y los niveles sonoros ambientales producidos por la adición de las múltiples actividades existentes y por las personas que las utilizan sobrepasen en más de 10 decibelios (...) podrán ser declaradas como Zonas Acústicamente Saturadas», recoge dicha normativa. Antes de poder señalar que Cantarranas es una ZAS se deben realizar diversos trámites.

El primero de estos procedimientos es elaborar un «plano de delimitación de la zona afectada». En segundo lugar se debe conocer la situación de las «actividades que influyen en la aglomeración de personas fuera de los locales», el principal foco de ruido nocturno. El tercer punto indica que se deben valorar los «niveles continuos equivalentes durante el periodo en que se manifiestan las molestias», la noche en este caso. Para llevar a cabo este análisis, se deben realizar medidas, en al menos tres puntos de la zona, tal y como está llevando a cabo la Concejalía de Medio Ambiente.

Una vez todo esto esté realizado, el expediente para declarar la zona como ZAS se deberá someter a información pública durante al menos un mes, según estipula la Ley.

Una vez esté declarada como Zona Acústicamente Saturada, el Ayuntamiento de Valladolid tendrá la potestad de tomar hasta cinco medidas. La primera de ellas es no dar nuevas licencias de apertura de actividades potencialmente ruidosas; en segundo lugar no se podrán ampliar actividades, salvo que sea para disminuir el ruido. El tercer punto recoge que se podrá limitar el horario de las actividades y de los establecimientos y es aquí cuando se podrá determinar que deben pasar cuatro horas entre el cierre y apertura de un negocio. A su vez, también podrá imponer las «medidas correctoras necesarias» y declarar «normas más restrictivas al funcionamiento de nuevas actividades».

En la reunión de verano de la Agenda Local 21 el Ayuntamiento comprobó que en los últimos seis meses se superaban los niveles permitidos, como admite el concejal. Los datos que la Concejalía de Medio Ambiente ha obtenido hasta ahora apuntan a que Cantarranas se convierta en Zona Acústicamente Saturada una vez verificado que esos niveles de ruido se encuentran por encima de lo que marca la ley.

Las mediciones continuarán hasta finales del próximo mes de enero ya que comenzaron a primeros de año y es necesario que se lleven a cabo doce meses. A la luz de los datos actuales, los vecinos tienen razón porque los niveles superan lo permitido por la ley. A continuación se abrirá el expediente que durará un mes y después se iniciará el periodo de exposición pública. En Medio Ambiente prevén que Cantarranas se convierta en Zona Acústicamente Saturada en el primer semestre de 2025.

Son buenas noticias para los vecinos, cansados de soportar un ruido excesivo. Cantarranas es uno de los lugares en los que se concentran más personas, sobre todo los fines de semana, y a última hora de la tarde comienza el suplicio para quienes residen en la zona.