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ALQUILERES

El bono alquiler del Gobierno deja fuera al 90% de la oferta de Valladolid

Únicamente el 10% de las viviendas disponibles para arrendar en la capital vallisoletana cuestan menos de 600 euros, uno de los requisitos marcados por el Ejecutivo central para acceder a la ayuda de 250 euros al mes

Una persona observa los anuncios en el escaparate de una inmobiliariaPHOTOGENIC

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Valladolid

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El bono alquiler joven puesto en marcha por el Gobierno de España y que movilizará 200 millones de euros en ayudas a través de las comunidades autónomas tiene, entre otros objetivos, permitir la emancipación de los jóvenes aliviando el desembolso que supone alquilar una vivienda. Sin embargo, la realidad del mercado desvela que apenas uno de cada diez arrendatarios que acceda ahora a una vivienda la conseguirán, ya que solo el 10% de los pisos disponibles para arrendar en Valladolid, el 13% en Castilla y León, están por debajo de los 600 euros que el Ejecutivo central marca como tope. Dicho de otro modo, el 90% de los pisos de la capital del Pisuerga no pueden aspirar a la subvención.

Son cifras que desvela el portal inmobiliario Fotocasa a través de su análisis ‘Impacto del Bono Joven según la oferta’, y del que se desprende que únicamente el 13% de la oferta de vivienda en alquiler en Castilla y León se encuentra por debajo de los 600 euros y, por tanto, sus futuros arrendatarios podrán optar a la ayuda. Eso sí, los datos ofrecidos se refieren únicamente a las capitales de provincia, donde por otra parte reside la mayor parte de la población y donde la demanda de alquileres es más elevada.

Es evidente que para aquellos jóvenes que ya tengan un alquiler en vigor y por el que paguen menos de 600 euros mensuales las ayudas llegarán, eso sí, mientras duren los 10,8 millones que el Gobierno ha asignado a Castilla y León, pero aquellos que estuvieran esperándolas como incentivo para emanciparse se encontrarán en la mayoría de los casos con el obstáculo de un mercado con los precios disparados.

A pesar de todo lo anterior, la convocatoria del Bono Alquiler Joven abre la puerta a que las comunidades autónomas puedan, previo acuerdo de la Comisión de Seguimiento, elevar la mensualidad máxima de 600 a 900 euros, una opción diseñada para dar cobertura a aquellas zonas donde los precios de los alquileres están en constante ascenso.

En este sentido, y en el caso de que Castilla y León lograra elevar la cuantía de 600 a 900 euros, algo que de hacerse efectivo abarcaría solo algunas zonas concretas de la Comunidad, las ayudas tampoco llegarían al total de las viviendas que se ofertan actualmente. De nuevo según los datos de Fotocasa, el 66% de la oferta castellana y leonesa de alquiler está por debajo de los 900 euros, lo que deja todavía un tercio de las casas y pisos sin ninguna opción de acceder a las ayudas de 250 euros mensuales que se concederán por un plazo de dos años.

En relación con todo lo anterior la directora de Estudios y portavoz de Fotocasa, María Matos, señala que «si lo que se persigue es que el Bono Joven llegue a quien más lo necesita, sería necesario revisar y ampliar el límite de la cuota mensual, ya que el precio del alquiler medio en España ya supera los 1.000 euros y, por tanto, un gran volumen de jóvenes no podrá solicitarlo porque su renta supera los 600 euros o los 900 dependiendo en la autonomía en la se encuentre».

A pesar de todo, la situación en la que se encuentra el mercado de alquiler de Castilla y León es mejor que la del conjunto de España, donde solo el 6% de las viviendas ofertadas están por debajo de los 600 euros y el 31% por debajo de los 900.

En lo que se refiere a las nueve capitales de provincia de la Comunidad, la que menos oferta de alquiler registra por debajo de los 600 euros mensuales es Soria, con solo un 4,5%. Se sitúa, por tanto, en la decimoctava posición de la tabla nacional, con la particularidad de que en el primer puesto hay un cuádruple empate entre Pamplona, San Sebastián, Palma de Mallorca y Vitoria, donde ninguna vivienda ofertada en Fotocasa se sitúa por debajo de ese umbral.

A continuación de Soria aparece Ávila, donde solo el 5,3% de las viviendas en alquiler están por debajo de los 600 euros y lo que hace que ambas ciudades si sitúen por debajo de la media nacional, de un 6,3%. Le siguen Segovia, con un 6,5%; Valladolid, con el 10,1%; Salamanca, con el 10,5%; y Burgos, con el 12,8%. Las tres ciudades de la Comunidad con más pisos ofertados a precios inferiores a los 600 euros mensuales son León (22,3%), Zamora (36,8%) y Palencia (54,8%).

Conviene señalar, en este punto, que la palentina se sitúa como la capital de España con mayor porcentaje de pisos en alquiler por debajo de 600 euros mensuales, superando así los registros de Ciudad Real (52,1%) y Jaén (47,9%).

Por otro lado, en lo que se refiere al porcentaje de viviendas para alquiler por debajo de los 900 euros mensuales, la estadística de Fotocasa señala que la primera capital de Castilla y León en aparecer en la lista es Segovia, que lo hace en el puesto quince un con un 40,9% de sus viviendas por debajo de este umbral. Es, además, la única capital provincial de la Comunidad por debajo del 50%, aunque a pesar de ser la primera no alcanza el 31% de la media nacional.

Precisamente entre Segovia y la siguiente ciudad en la lista, Salamanca, hay una diferencia notable de más de veinte puntos, puesto que en la capital charra el 61,7% de las viviendas que componen la oferta de alquiler están por debajo de los 900 euros al mes.

A algo más de distancia, Burgos y Valladolid aparecen de manera sucesiva en la tabla nacional, con la capital burgalesa con el 71,6% de sus pisos por debajo de los 900 euros frente a un 72,5% de la vallisoletana.

Por su parte, León arroja un 77,7%, por delante del 81,8% de Soria; el 85,7% de Palencia y el 89,5% de Zamora. Finalmente, es Ávila la capital que cierra tanto la tabla autonómica como la nacional y con la particularidad de que es la única ciudad donde el 100% de las viviendas aparecen por debajo de ese umbral de los 900 euros mensuales.

Precisamente, ante esta situación el análisis de Fotocasa señala que «la media nacional muestra que casi una tercera parte de viviendas en alquiler cumplirían con el requisito del límite de la cuota de 900 euros, sin embargo, el reparto es totalmente desigual al analizar la oferta por capitales de provincia. La mayoría de viviendas de alquiler con precio menor a 900 euros se encuentran en las ciudades que menos presión de la demanda soportan».

De nuevo María Matos apunta que «si tenemos en cuenta el significativo ritmo de encarecimiento del alquiler, se observa que cada vez hay menos viviendas que se ofrezcan por 600 o 900 euros en el mercado». Así, la directora de Estudios y portavoz de Fotocasa pone como ejemplo que «en 2022 el 14% de las viviendas en Madrid costaban menos de 600 euros, ahora solo el 0,3%. En el caso de Barcelona el 0,8% de la oferta estaba por debajo de los 600 euros hace dos años, y en estos momentos solo que el 0,1% del total».

A la vista de los datos que expone el informe de Fotocasa, se pone de manifiesto que a las ya de por sí muchas dificultades que encuentran actualmente los jóvenes para acceder a una vivienda se suma la imposibilidad de optar a las ayudas estatales dado que el mercado marca unos precios que están por encima de los requisitos que establece la Administración.

Es cierto que los datos que recoge el portal inmobiliario se refieren únicamente a las capitales de provincia, pero es en ellas donde se concentra el mercado de la vivienda. Es posible que en el caso de las más pobladas, como Valladolid, León, Burgos o Salamanca, algunos municipios del alfoz puedan absorber parte de esa demanda, pero en el resto no existe esta posibilidad, lo que deja sin excepciones un mercado de viviendas en alquiler que, además de encarecido, cuenta con una oferta incapaz de satisfacer la demanda, lo que favorece ese aumento de los precios.