INTEGRACIÓN
El PSOE acusa a Carnero de conocer desde febrero el rechazo a aplazar el pago de los 11 millones
Los socialistas reprochan que el alcalde lleve nueve meses diciendo que la Sociedad no le ha contestado a su petición para aplazar el pago de la cuota, cuando se lo comunicaron hace ocho meses
Carnero pide al Ministerio y al PSOE que "se lean los papeles" y reitera que el Ayuntamiento "no ha incumplido"
El PSOE de Valladolid acusa al alcalde, Jesús Julio Carnero, de mentir sobre los 11 millones que debe pagar el Ayuntamiento de Valladolid dentro de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (SVAV). El Grupo Municipal Socialista sostiene que el regidor conocía desde febrero el rechazo de la Sociedad a aplazar el pago de dicha cantidad. Una negativa a posponer este dinero que viene reflejada en el acta de la SVAV del 16 de febrero de 2024, aunque Carnero ha argumentado desde entonces que la institución que preside no ha recibido una comunicación al respecto.
"La realidad es que el alcalde ha ocultado durante nueve meses la respuesta de los órganos de esta sociedad pública. En febrero el consejo de administración desestimó la petición de Carnero de aplazar el pago de los 11 millones de euros", recoge el PSOE a través de una nota de prensa.
Una reunión en la que, según recoge el acta, tanto Ayuntamiento como Junta (a través del propio alcalde y del consejero Juan Carlos-Suárez Quiñones) votaron a favor de dicho aplazamiento. Las dos partes dependientes del Ministerio (Adif y Renfe) votaron en contra de la propuesta de Jesús Julio Carnero. El voto de calidad del secretario de Estado de Transportes y presidente de la Sociedad, José Antonio Santano, fue lo que decantó el 'no' a la propuesta del regidor.
Los socialistas explican que "dos meses después de su primera solicitud, el alcalde de Valladolid volvió a plantearla, esta vez en el consejo de administración de la Valladolid Alta Velocidad, celebrado el 16 de febrero de este año" y, en dicha reunión, se rechazó formalmente" el aplazamiento del pago de los 11 millones, "según figura en el acta de la reunión".
En ese momento Santano, "que es el presidente del consejo de administración de la sociedad Valladolid Alta Velocidad", recordó a Jesús Julio Carnero la "obligación de ingresar" la cuantía correspondiente antes del 31 de marzo y le advirtió que "no aprobar el presupuesto de la sociedad para este año podría tener graves consecuencias para los compromisos y obligaciones ya asumidas".
Una actuación del alcalde que ha motivado las críticas del principal partido de la oposición: "El Partido Popular, el mismo que nos dejó sin soterramiento y con deuda nos va a dejar también con una integración que está a medias y es el único futuro que tiene la ciudad", criticó el portavoz municipal socialista, Pedro Herrero.
Carnero: "Que se lean los papeles"
Jesús Julio Carnero rechazó las acusaciones del PSOE y les invitó a "leerse los papeles". El regidor vallisoletano sostiene que el Ayuntamiento no ha cometido ningún incumplimiento dentro de su papel en la Sociedad Valladolid Alta Velocidad: "Seguimos esperando la respuesta al aplazamiento".
En este sentido, sostuvo que el Consejo de Administración de la SVAV "no es el órgano que tiene que dirimir esta cuestión", el aplazamiento en el pago de los 11 millones. A renglón seguido afirmó que el órgano encargado para tal fin es "la comisión de seguimiento".
"Cuando quieran que contesten. Hoy por hoy quien tiene que contestar no es el Ayuntamiento, el Ayuntamiento ha pedido un aplazamiento y no tiene respuesta al mismo", indicó sobre cómo se encuentra la situación, a su juicio. Es decir, el Consejo de Administración celebrado el pasado 16 de febrero, donde se rechazó su propuesta no es suficiente para el alcalde de Valladolid.
"Yo he pedido que se aplace y como no nos han dado contestación al aplazamiento, yo no he incumplido, el Ayuntamiento de Valladolid no ha incumplido. Habrán incumplido quien no contesta al aplazamiento que ha pedido el Ayuntamiento de Valladolid", argumentó el primer edil que finalizó su intervención a los medios como lo empezó, pidiendo al PSOE y al Ministerio de Transportes que "se lean los papeles".