Carnero insiste en reunir a la Sociedad Alta Velocidad para cambiar el convenio: «Valladolid nunca pedirá su disolución»

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, insiste en convocar a la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (SVAV) para modificar el convenio de integración 2017, con el objetivo de cambiarlo de rumbo hacia el soterramiento de las vías del ferrocarril. Por otro lado, a propósito de noticias en medios locales que apuntaban a un futurible final de la sociedad pública, participada por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible a través de Adif y Renfe en un 50%, y por la Junta y el Ayuntamiento en otro 50% –al 25% cada una–, «el Ayuntamiento nunca pedirá su disolución», aseguró este miércoles en respuesta a los periodistas. «Si quiere solicitarlo el Ministerio, ellos serán los que tengan que explicarlo». También recordó que el «objetivo claro» por el que se creó en su día la entidad fue precisamente el soterramiento.

Fuentes consultadas por este periódico confirman que el Ministerio, por su parte, no ha hecho ningún movimiento para convocar una reunión de la SVAV, más allá de la comisión de seguimiento, que ya estaba convocada para este mes de octubre. Por ello, Carnero apuntó que «continúa el requerimiento» por parte del Ayuntamiento de Valladolid para que se convoque, lo antes posible, una reunión del SVAV con capacidad de decisión. Una decisión que pasa, por parte del Consistorio vallisoletano, por el cambio del convenio de 2017. «Puede modificarse igual que se modificó en 2017», remarcó el primer edil.

Carnero descartó, también, que en la próxima reunión de la SVAV se pueda decidir sobre la licitación del paso inferior del Arco de Ladrillo, como había planteado el ministro Óscar Puente durante su último acto público en Valladolid: «Estamos en el estadio previo, en el del requerimiento de una reunión para que se cambie el convenio. Mientras eso no suceda, el Ayuntamiento no se puede pronunciar sobre el Arco de Ladrillo», añadió. También recordó que, en ese proyecto, el Consistorio requirió a Adif para que lo anulara, «porque desde el punto de vista técnico hemos hecho una serie de alegaciones que no se han tenido en cuenta ni se nos ha dado contestación».

«Aquí lo importante son las vallisoletanas y los vallisoletanos, que es el terreno de juego donde yo me muevo. Quiero lo mejor para ellos y creo que lo mejor es el soterramiento de las vías del tren, creo que se puede hacer y voy a trabajar para ello», matizó. «Los seres humanos y los vehículos, las bicicletas, los patinetes y el peatón tienen que andar por arriba y no por abajo».

En cuanto a la propuesta de ley que obligaría al Ayuntamiento a pagar el 50% de la obra, el regidor vallisoletano puso de manifiesto que esa ley «aún no ha iniciado su tramitación parlamentaria, y las leyes en este momento y en este país, y en esta legislatura, están teniendo el resultado que están teniendo». Por ello, «veremos a cuál es el resultado final de dicha ley. Nosotros cumpliremos lo que las leyes digan en el momento en que estén aprobadas, porque nosotros no somos de los de la amnistía, nosotros somos de los del cumplimiento. Por tanto, lo que diga la ley en el momento en que lo diga, lo cumpliremos», advirtió.

El alcalde aprovechó la ocasión para hacer hincapié en que el Ayuntamiento de Valladolid es de los que más aporta en estos casos: «Nosotros, en este momento, somos de las Administraciones locales que más aportamos dentro de los distintos convenios que hay establecidos con Adif para llevar a cabo las distintas infraestructuras ferroviarias». Y es que «otras ciudades aportan bastante menos. Incluso hay ciudades que no aportan absolutamente nada, se lo aporta todo el Gobierno de España. Busque por Cataluña», espetó.