TASA DE BASURAS
La Iglesia, principal damnificada de la tasa de basuras de Valladolid al pagar hasta 427€ por templo
El nuevo tributo afectará a las 58 iglesias de la capital vallisoletana, cuyo recibo oscilará entre los 80 y los 427 euros, según su superficie / Laguna aún no dispone de la nueva ordenanza y Medina del Campo y de Rioseco estudian como adaptar la actual
La nueva tasa de basuras que entrará en vigor el año que viene también afectará a los edificios de carácter religioso y en Valladolid la mayoría pertenecen a la Iglesia Católica. El Arzobispado de Valladolid cuenta con 58 templos a los que habría que sumar otro tipo de inmuebles o comercios que no estén catalogados como iglesias, santuarios o similares. De esta forma, la institución religiosa se convierte en el gran perjudicado por esta nueva tasa de basuras, que la Unión Europea hace obligatoria en todos los municipios, al ser el propietario que más inmuebles tiene, lo cual convierte a la Iglesia en uno de los que más pagará por este nuevo impuesto. Un coste que será de 427 euros por cada gran templo, aquel que tenga 300 metros cuadrados o más.
Pese a ser uno de los que más pagará debido a este nuevo importe, se encuentra en el grupo con los pagos más leves. Esto se debe a una clasificación que ha realizado el propio Ayuntamiento en cinco grupos (Grupo A, Grupo B, Grupo C, Grupo D y Grupo E, de menor a mayor pago). En el Grupo A se encuentran también empresas del ámbito deportivo, del religioso y de la industria agrícola. Cabe reseñar que esta nueva tasa de basuras es para los residuos doméstico o asimilables a domésticos. Por ello los restaurantes o los hoteles se encuentran en el grupo que más paga, en lo que a actividad se refiere.
Al igual que el resto de locales de la ciudad, la Iglesia también está sujeta a este nuevo tributo. Así un templo o local destinado al ámbito religioso de menos de 50 metros cuadrados abonará 80,74 euros por este importe. Una cifra muy similar a la que pagará alguien con una vivienda de entre 91 y 119 metros cuadrados con cuatro convivientes (80,12 euros).
Si bien, la mayoría de edificios religiosos tienen un tamaño mayor. Aquellos que tengan una superficie de 300 metros cuadrados o más serán las que paguen el importe más alto. La cuantía que deberán pagar será de 427,91 euros por local al año.
Si la extensión del inmueble se encuentra entre 200 y 299 metros cuadrados, la Iglesia deberá abonar 347,17 euros. En cambio, si la superficie va desde 151 a 199 metros cuadrados la cifra desciende hasta los 266,43 euros.
Los tramos más bajos de la tasa de basuras para locales se dan cuando la superficie no llega a los 150 metros cuadrados. Así, aquellos que tengan de 100 a 149 metros cuadrados abonarán 217,99 euros. Si la extensión se encuentra entre 76 y 99 metros cuadrados, la cifra baja hasta los 161,47 euros. Y si se encuentra entre los 50 y 74 metros cuadrados, la cuantía será de 121,11 euros. Una diferencia de 40 euros con el tramo más bajo de locales con menos de 50 metros cuadrados.
La Iglesia Católica como institución está obligada a pagar esta nueva tasa que entrará en vigor el próximo 1 de enero de 2025 debido a la Ley 7/2022, de 8 de abril,. Sin embargo, está exenta de otros tributos como es el caso del IBI (Impuestos sobre Bienes e Inmuebles). Un tributo que ha sido noticia en la ciudad al aprobar el equipo de Gobierno una reducción del 5% para el próximo año. Una reducción de la que no se verá beneficiada la Iglesia ya que no paga por este tributo, pero sí tendrá que abonar la tasa de basuras.
En una situación diferente se encuentran las fruterías, carnicerías, pescaderías o similares que deben organizar su propia recogida de residuos y tienen otra ordenanza a parte, por ello están exentos de esta tasa.
Debido a ello, la Iglesia se encuentra en el apartado, Grupo A, con menor pago de este nuevo impuesto al considerar que la intensidad de los residuos producidos de carácter domiciliario o asimilables es menor que la de otros comercios.
Pueblos y Diputación
La tasa de basuras no solo afecta al municipio de Valladolid, también lo hace al resto de la provincia. Por ello, los pueblos se preparan ante esta normativa que deberá entrar en vigor en los próximos tres meses.
Alguno de ellos ya contaban con un impuesto por este motivo y se encuentran en periodo de estudio para adaptarla a la nueva norma. Es el caso de Medina del Campo que lleva con esta medida desde 2012 y cobra a las viviendas una tasa fija de 49 euros al año. Su concejal de Contratación y Hacienda Municipal, Luis Carlos Salcedo, señala que se encuentran en un periodo de «estudio» para que los vecinos «tengan una menor presión fiscal». Su intención es continuar «con un cantidad fija» como hasta ahora, pero todavía no puede determinar como se adaptarán a la nueva ley.
En un caso similar se encuentra Medina de Rioseco que actualmente tiene este impuesto «congelado», según señala su alcalde, David Esteban. Aún no tienen definido como actuarán, pero abogan por una «congelación impositiva».
Laguna de Duero no tiene en su ordenanza municipal una tasa de basuras y se prepara para esta nueva. Su regidor, Avelino Álvarez, apunta que están «analizando variables» para definirla y apuesta por tener «un porcentaje fijo y otra parte variable». «Es lo más justo», sostiene. Según las estimaciones municipales, esto le costará a los vecinos algo más de un millón de euros: «Tenemos que ver de qué manera podemos hacerlo», finaliza el edil.
Otro municipio del alfoz vallisoletano, Arroyo de la Encomienda, se encuentra en una situación diferente. El Ayuntamiento deberá subir la tasa de basuras, pero esta solo repercutirá en una parte a los vecinos. Esta subida será de 9,24 euros al año al pasar de 46,20 a 55,44. Con ello, se repercutirá la mitad del incremento de los gastos, asumiendo el Ayuntamiento el 51% del aumento.
Por otro lado, la Diputación de Valladolid formará a alcaldes y a secretarios de ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes para «que sepan que tienen que aplicar la ley», según explica la diputada de Asesoramiento Local, Sonia Alonso. Además, añade que el servicio se prestará igual, solo que incrementará el coste para los vecinos.