Despilfarro en Arroyo

La obra del cuartel de la Guardia Civil de Arroyo de la Encomienda ya está en marcha. Una construcción que supondrá un despilfarro de 1,87 millones para las arcas municipales del Ayuntamiento del alfoz de Valladolid. Despilfarro toda vez que el consistorio costeará con dinero del presupuesto municipal una infraestructura que depende del Ministerio del Interior, que es a quien compete la construcción y mantenimiento de los cuarteles de la Guardia Civil y que ve como Arroyo le ahorra el gasto el nueva infraestructura para la Benemérita.

Pese a todo, el Ayuntamiento de Arroyo, con su alcalde Sarbelio Fernández a la cabeza y el respaldo del resto de grupos en el Ayuntamiento, gastará esos 1,87 millones en levantar el cuartel en la nave situada en el número 89 de calle Colón del municipio del alfoz de Valladolid. Un despilfarro de casi dos millones de euros para un acuartelamiento que, conviene recordar, nace sin un continente definido en lo que a agentes se refiere y que va a suponer el cierre de otro, casi con toda seguridad el de Zaratán, aunque desde la Subdelegación del Gobierno de Valladolid el subdelegado Jacinto Canales se limitaba a asegurar recientemente que está claro que uno cerrará. A lo que se le suma el hecho de que se va a ubicar a poco menos de diez kilómetros de la Comandancia de la Guardia Civil en Valladolid.

La realidad es que el cuartel de Arroyo, cuya construcción ya se encuentra en marcha, sólo tiene previsiones, cuando no elucubraciones, de a cuántos agentes puede albergar, pero nada concreto sobre el número de los que serán cuando entre en servicio.

Tanto en así que, en reiteradas ocasiones, desde la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) se viene denunciando precisamente esa falta de dotación de medios para este nuevo espacio en Arroyo. La AUGC denunciaba recientemente que se desconoce cuántos agentes se incorporarán al nuevo cuartel de Arroyo que estará a punto a finales de año.

La agrupación de la Guardia Civil mostraba, ya cuando se planteaba el proyecto, su preocupación al no saber si los altos mandos de la Benemérita enviarán al nuevo edificio a integrantes del cuerpo procedentes de las vacantes que se irían conociendo o, por el contrario, decidirían reagrupar efectivos de otros cuarteles de la provincia.

Pues ni lo uno ni lo otro, nada se ha dicho, ni se ha decido aún. La única realidad es que el cuartel ya está en obras y que le va a costar esos casi 2 millones al erario público del Ayuntamiento de Arroyo. Un dinero que le ahorra al Gobierno, que es quien tiene la competencias y debería ejecutarlo. Pero es que, además, esto cierra el que el municipio del alfoz de Valladolid cuente con una comisaría de Policía Nacional, que le daría al municipio un mayor servicio. A los propios de seguridad se le sumarían otros como la expedición del DNI.

Ejemplos de comisarías de Policía Nacional en municipios de las dimensiones de Arroyo existen varios en Castilla y León. Incluso más pequeños, como es el caso de Astorga en León, que con casi 10.000 habitantes menos que Arroyo cuenta con comisaría.

Y, todo, mientras servicios como el del autobús continúa recibiendo más de una crítica por los tiempos de espera y la escasez de frecuencias, dado que el consisorio se resiste a integrarse en Auvasa, a través de un convenio como sí tienen sin ir más lejos Simancas, para contar con más frecuencias y, por tanto, con un mejor servicio de autobuses.

El proyecto, es decir el continente, señala que el cuartel con ocho despachos y oficinas para en torno a los 18 puestos de trabajo, a lo que se le añadirán tres calabozos, una sala para los custodia de los menores detenidos, además de armero, archivo, vestuarios, baños, oficinas para materiales y sala/almacén para la guardia y custodia de los efectos que se les retiren a los detenidos y otra para los diferentes materiales requisados.