JUICIO ATROPELLO MORTAL ESTELA
Juan Carlos Domínguez: "Vamos a seguir luchando, Estela valía su peso en oro"
El padre de la ciclista vallisoletana de 18 años que fue atropellada asegura que las penas en estas situaciones "se quedan muy cortas, no piensan en la familia que se queda rota ni en los que se van"
Ya se conoce la sentencia del juicio por el atropello de Estela Domínguez, la ciclista vallisoletana que con tan solo 18 años fue atropellada mortalmente por un camionero. El juez decreta la pena máxima para el acusado, que en este caso son una multa de 5.400 euros y la prohibición de conducir vehículos a motor durante los próximos 18 meses. A mayores, debe pagar también las costas judiciales, una pena para nada suficiente para su padre, Juan Carlos Domínguez. "Te quedas indignado, pensaba que se podía sacar más cosas", cuenta Domínguez. El padre de la fallecida asegura que seguirán luchando. "Vamos a seguir luchando, Estela valía su peso en oro", y muestra su rechazo a la sentencia aclarando que las penas en estas situaciones "se quedan muy cortas, no piensan en las familias que se rompen ni en los que se van".
"Se concluye que en el lugar del siniestro concurría un deslumbramiento solar por la presencia del sol en el horizonte", señala la sentencia. "Aunque en el punto de colisión, al trazar la curva hacia la izquierda la visibilidad aumentaba al quedar el sol hacia el margen derecho, lo que permitía ver a los vehículos que circulaban delante, y en consecuencia, permitía ver a la bicicleta".
Por otro lado, el juez recoge varios argumentos para determinar que el atropello fue una "imprudencia menos grave". De esta manera apunta que "el cristal parabrisas del camión no estaba limpio" y "que el conductor del camión debería haber detectado la presencia de la bicicleta circulando delante de él con mucha antelación puesto que la bicicleta portaba una luz trasera de color rojo visible a más de 300 metros, evidenciando con ello que, por distracción, no se apercibió de la presencia de la bicicleta".
Por otro lado, se aclara que el condenado llevaba en el momento del accidente colocado "el parasol del vehículo y que, a la vez, puso su propia mano debajo para protegerse de la incidencia del sol", lo que redujo "aún más, su propia visibilidad".
Sin embargo, para Domínguez la versión de los testigos es vital. "El primer testigo vio a los dos, el segundo testigo vio a Estela debajo del camión, y el tercero vio cómo el camión daba un saltito", afirma el padre. "No contento con ello me fui al lugar del atropello, había 40 segundos desde donde giraron", afirma. "Te da rabia por que es algo que se podría haber evitado, te duele mucho" cuenta el padre, y añade que "si se hubiera roto una pierna lo puedo perdonar, pero le ha quitado la vida". En cuanto a emprender nuevas medidas legales, el ex ciclista profesional asegura que seguirán luchando, aunque deberá valorar con su abogado si se puede iniciar un nuevo proceso según contaba.
El exciclista habla también de las penas en cuanto a los accidentes en los que una bicicleta está involucrada. "Es algo que va a volver a pasar, hay mucha desatención". "La gente se lo toma muy a la ligera", y cuenta que según actuaba el camionero, "parecía que lo que le dolía más era la multa o la retirada de carnet". Añade que este tipo de penas "se quedan muy cortas, no piensan en la familia que ha quedado rota ni en el que se ha ido". "Daría mi vida por ella, ojalá hubiese sido yo", finaliza el padre.