"Las vías romanas eran carreteras con tecnología avanzada y no estaban enlosadas"

El anterior entrevistado, Pifa Montgomery, hizo esta pregunta sin saber a quién iba destinada:

Pregunta.- ¿Por qué tú y yo podríamos ser amigos?

Respuesta. Porque es lo razonable. Lo natural es ser amigo de todo el mundo. La enemistad viene después.

P.- ¿Qué es para usted ser un espíritu libre?

R.- La libertad es un mito. Para mí ser un espíritu libre es pasar por esta vida y por esta sociedad sin que te fastidien mucho y con una cierta dosis de felicidad.

P.- ¿Cómo se gana la vida?

R.- Holgadamente, pero con mucho esfuerzo.

P.- ¿Qué le gustaría ser de mayor?

R.- Ser mayor ya es un éxito, así que de mayor me gustaría ser mayor.

P.- ¿De qué se siente más orgulloso en su vida?

R.- Teniendo en cuenta que casi todo se lo debo a mis padres, de lo que más orgulloso estoy es de ellos.

P.- ¿Tiene algún sueño por cumplir?

R.- Los sueños son peligrosos, es mejor no querer cumplirlos porque puede que sean incumplibles. Pero he hecho casi todo lo que me ha dado la gana en esta vida, ¿para qué quiero más?

P.- ¿Qué es para usted el amor?

R.- Soy muy prosaico. Es una reacción química. Biología pura y dura.

P.- ¿Qué tal se lleva con Dios?

R.- Ni bien ni mal. No soy creyente.

P.- Un espíritu libre al que admire.

R.- Félix Rodríguez de la Fuente. Hizo lo que quiso en contra de todo el mundo.

P.- ¿Qué tal se lleva con el ministro de Transportes?

R.- No me he llevado nunca con ningún ministro de Transportes porque están en otra órbita.

P.- ¿Tenemos una buena red de carreteras en este país?

R.- Sí. España ha tenido una de las mejores redes de carreteras del mundo y yo creo que aún la seguimos teniendo.

P.- ¿Cuándo se dio cuenta de que las vías romanas eran claves incluso para diseñar nuevos caminos hoy?

R.- Muy tarde. Yo ya estaba trabajando cuando descubrí que las vías romanas eran carreteras con tecnología avanzada. Me impactó muchísimo y me di cuenta de que estábamos despreciando un elemento que podría haber sido valiosísimo para el mundo contemporáneo de haberlo estudiado y respetado.

P.- La puesta en valor de la calzada romana de Uxama a Numancia en la autovía en Soria, ¿es su medalla de oro hasta la fecha?

R.- Para mí es un honor poder haber participado de ello, poderlo haber diseñado y llevado a término. Deseo que sirva de ejemplo.

P.- ¿Están las calzadas romanas bien identificadas?

R.- No. La identificación de las verdaderas carreteras romanas está todavía por hacer en casi todo el Mediterráneo, aunque en Castilla y León tenemos la fortuna de que se ha hecho en gran medida.

P.- ¿Cómo se lleva con los arqueólogos?

R.- En general, bien. Los arqueólogos hacen lo que pueden, bien porque no tienen los medios o porque no tienen los conocimientos, como sucede en materias como la ingeniería histórica. Son gente que trabaja por vocación, solo por eso te tienen que caer bien.

P.- ¿Qué hay de cierto en las rodadas?

R.- Rodadas hay de varios tipos: las de la construcción que quedaban como impronta en las capas cuando basculaban la siguiente capa; y hay otras por el monte que no son otra cosa que las rodadas de los últimos carros que han circulado por allí. Los romanos no enlosaban sus carreteras, solo adoquinaban las calles.

P.- ¿El Itinerario Antonino es para llevarlo a misa?

R.- Yo no me lo llevaría a ningún lado. Es una fuente de información, pero es producto de muchas transcripciones hechas a mano y tiene muchísimos errores. Nos ha ayudado mucho para saber que había muchos itinerarios entre ciudades, pero también tiene muchas carencias.

P.- Si tuviera que llorar por una de ellas, ¿Uxama o Numancia?

R.- Las dos tienen su importancia. Numancia tiene un aspecto sentimental por el asedio mítico, pero Uxama es una gran ciudad aún por excava y descubrir. Es difícil decir que una es más importante que la otra. Eso sí, Numancia se ha quedado con el turismo.

P.- ¿Estaban locos los romanos?

R.- Yo creo que los que estaban locos fueron los que les sucedieron. Tenían una calidad social y de vida muy mitificada y demonizada. Hay leyenda negra sobre la civilización romana.