Los dueños de las mascotas de Valladolid deberán llevar agua jabonosa para limpiar la orina

El Ayuntamiento de Valladolid aprueba el proyecto de recogida de residuos. Una normativa «muy necesaria» dado que el anterior reglamento data del año 1993 con una modificación en 1998, según detalló el concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, Alberto Cuadrado.

Se trata de una normativa cuyo objetivo es «concienciar» a la población para que la ciudad esté más limpia. El proyecto de Ordenanza municipal selectiva de residuos y de limpieza viaria de Valladolid conlleva un cambio en relación a las mascotas. La Policía Local podría sancionar hasta con 750 euros a los dueños de las mascotas que orinen o defequen en la vía pública, a mayores, también será obligatorio que se disponga de «bolsas impermeables» para recoger los excrementos y de una «botella con agua jabonosa para minimizar el efecto de las micciones». No llevar el material para recoger los excrementos de los animales o limpiar la orina será considerado como una falta leve, cuya sanción máxima recogida es de 750 euros, a excepción de los responsables de los perros guía. Un importe que también podría llegar a ser aplicado a las personas que orinen o defequen en la calle, «en caso de tratarse de menores, serán responsables del pago de la sanción correspondiente, sus padres o tutores», recoge la normativa.

Esta es la forma que tiene la Concejalía de Salud Pública y Seguridad Ciudadana para atajar esta cuestión , de higiene pública que, en palabras del responsable del departamento, no es «propia de Valladolid», porque este fenómeno se da en más ciudades de España. Aunque el animal no realice sus necesidades en la calle, el dueño estará obligado a llevar el material necesario para su retirada. Esta ordenanza viene a matizar al anterior reglamento porque este ya exigía a los dueños retirar los excrementos de los perros de la calle. «Soy el primero que defiende a los animales, el problema está en los dueños que son incívicos», sostuvo. A mayores, indicó que si es obligatorio que se lleve el material para retirar los excrementos y micciones, «se invita a que se utilice». Otro de los puntos que abordó durante su intervención fue la sacudida de alfombra u otros elementos en balcones y terrazas: «Se puede sancionar, es tan difícil como el de los perros. Si hay una persona que lo denuncia y la policía lo constata, se puede denunciar».

La intención es que este proyecto de ordenanza de recogida selectiva de residuos domésticos entre en vigor a finales de este mismo año, tal y como trasladó el concejal durante una rueda de prensa, aunque el nuevo régimen sancionador comenzaría a aplicarse el 1 de enero de 2025.

El Ayuntamiento de Valladolid quiere «concienciar» a la ciudadanía para evitar este tipo de comportamientos. Si bien, Cuadrado expuso durante una rueda de prensa que «el 99% de las personas lo hacen bien». Pese a ello, en ocasiones se ven excrementos de perro por la calle y desde la Concejalía se apunta a «una necesidad de que se lleven productos de limpieza». «No se trata de sancionar, se trata de concienciar. Tiene que ser una ordenanza que funcione, de nada sirve poner que no se pueden tirar chicles al suelo, si luego se hace», expuso el edil sobre la necesidad de sensibilizar a la población con la limpieza.

En esta misma línea, anunció futura campañas de sensibilización: «Si entre todos concienciamos un poquito, iremos mejorando». «Todos estamos en la misma línea, lo mejor que tiene esta ordenanza es ordenar y concienciar. El servicio de limpieza puede limpiar todos los días, pero no es la mamá del quinceañero que está recogiendo el cuarto», comparó Cuadrado.

"Organización"

Más allá de la obligatoriedad de llevar la botella de agua jabonosa para limpiar la micción y las bolsas para retirar los excrementos, la novedad es «la organización y estructuración de la ordenanza».

El objetivo de este texto es facilitar «la gestión, reutilización, reciclado y otras formas de valorización, de modo que se reduzca su depósito en el vertedero y mitigar el mejor resultado ambiental y global» de los residuos.

El nuevo texto abarca la recogida de residuos domésticos o asimilables a domésticos. Esto incluye a los que son generados por el sector HORECA (hoteles, restaurantes y cafeterías). Los residuos que sí quedan fuera son los de establecimientos comerciales que superen los 400 metros cuadrados de superficie. Tampoco entrarán dentro de la recogida la basura que se produzca en centros comerciales, supermercados, fruterías, pescaderías, carnicerías y charcuterías. Igualmente, al no ser de carácter público, también se excluye la limpieza de urbanizaciones, parcelas y solares privados, pasaje, patios interiores, galerías comerciales y otros elementos similares.

Otro elemento que resaltó Cuadrado fueron los eventos públicos. Con la nueva normativa, los organizadores del evento serán responsables de la suciedad que se genere y estarán obligados «a informar al Ayuntamiento del recorrido, horario y lugar del evento a celebrar». Incluso, el Consistorio podrá exigir una fianza por los costes de la limpieza y recogida de residuos.

La nueva ordenanza, al igual que la antigua, recoge tres tipos de recogida, ordinaria, con los contenedores; a demanda, como es la de enseres; y la de entrega al poseedor, como son los puntos limpios.

En otro orden de asuntos, el concejal señaló que sobre los meses de junio y julio llegará una primera remesa de «contenedores de cartón». Cuadrado expuso que «el tema el cartonaje es un problema» porque los camiones actuales están «muy anticuados». «Cuando no se recoge el cartón con cierta habitualidad las cajas quedan ahí, y si lo hacemos más a menudo, se producen averías en los camiones», explicó. Con los nuevos contenedores la recogida no será con una grúa, «sino mediante carga lateral».

Si bien, pidió que la gente tome conciencia, porque en ocasiones «hay contenedores vacíos o medio llenos y fuera está lleno de cajas». «Es la imagen de la ciudad», apuntó.