Las obras de integración driblan al soterramiento: el ansiado túnel de Labradores arranca el 9 de abril

Las obras de integración driblan al soterramiento: el ansiado túnel de Labradores arranca el día 9. Es la fecha fijada para el inicio de las obras que transformarán su estructura. El acta de replanteo se firmará un día antes. Los trabajos permitirán llevar a cabo dos modificados, el de la altura de gálibo y el de la anchura. De los 3,2 metros que tiene el túnel se pasará a 5,2 y esos dos metros se ganarán excavando del paso subterráneo. La otra actuación de los operarios se destinará a la ampliación de la anchura con un total de 30 centímetros, 15 por cada lado. De este modo, los vehículos dispondrán de una mayor amplitud. El plazo de ejecución es de siete meses, por lo que estará a punto a finales de año.

La ejecución de las obras de Labradores supondrá un incremento de 2,3 millones de euros más IVA sobre los 14,3 millones que se adjudicaron inicialmente para este túnel y el de Panaderos, que forma parte también del proyecto de integración ferroviaria aprobado por el anterior equipo de Gobierno del Ayuntamiento.

El trabajo de los operarios consiste en sustituir el cajón hincado, que resulta más invasivo. Las obras, que fueron aprobadas por la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (SVAV), tendrán un plazo de ejecución de siete meses, por lo que el paso estará a punto antes de fin de año. Si no se producen retrasos, el tráfico se abrirá de nuevo a primeros de noviembre. El túnel de Labradores estará abierto únicamente a vehículos, a diferencia del paso de Panaderos que permite también el tránsito peatonal.

Los planes para ejecutar los modificados surgieron el año pasado. El director de las obras envió en el mes de octubre un escrito al Ayuntamiento de Valladolid con el proyecto modificado por un importe de 17.070.259 €, con iva incluido, lo que supone un incremento de 2.312942€, y solicitó su aprobación por el órgano de contratación. Cuatro meses después, el consejo de administración de la SVAV aprobó esta modificación y dio luz verde a las obras. Con anterioridad, en diciembre, el propio consejo había autorizado la redacción del modificado. Era cuestión de tiempo y una vez cumplidos los plazos, las máquinas accederán al túnel la segunda semana de abril.

Los trabajos en Labradores corresponden a un cambio en la técnica constructiva que consiste en la remodelación del paso existente en lugar de su demolición, lo que supondría construir uno nuevo con el consiguiente incremento del coste ya previsto en el proyecto de integración ferroviaria. Los trabajos se realizarán tras detectarse una serie de unidades de obra que no contemplaba el proyecto o que lo hacía pero de forma imprecisa. El túnel permite el tráfico de vehículos hacia Delicias y otras zonas en las afueras de Valladolid por debajo de las vías. Forma parte del plan diseñado por el anterior equipo de Gobierno, que defendió la integración ferroviaria en lugar del soterramiento al considerarlo un proyecto menos costoso y con un plazo de ejecución de las obras mucho más corto.

Las labores de remodelación en Labradores y el modificado que se llevará a cabo también en el paso que une Padre Claret con las calles Estación, Guipúzcoa y Andalucía constituyen un paso más por parte del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) para seguir adelante con el proyecto de integración ferroviaria que defiende Óscar Puente, exalcalde de Valladolid y ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, y aleja el soterramiento por el que apuesta el primer edil vallisoletano, Jesús Julio Carnero, que lo plantea como la gran obra de la ciudad.

El anterior equipo de Gobierno del Ayuntamiento defendió la integración ferroviaria con obras que permiten salvar las vías del tren, mientras que el actual continúa apostando por el soterramiento. Puente lo vio inviable por el coste y Carnero, sin embargo, asegura que es posible y añade que se ha hecho en otras ciudades y por lo tanto Valladolid puede acometerlo.

La cuestión ahora es ver cómo se hacen compatibles las obras ya realizadas y estos modificados con el soterramiento que plantea el equipo de Gobierno. En este sentido, el concejal de Urbanismo, Ignacio Zarandona, señala que sí es compatible mantener los túneles. De lo que no cabe duda es de que Adif apuesta claramente por la integración.

Las obras para modificar el paso de Labradores no son las únicas aprobadas por la Sociedad Valladolid Alta Velocidad y es que también tiene luz verde el modificado en el paso que une Padre Claret con las calles Estación, Guipúzcoa y Andalucía, con una inversión de 600.000 euros.

El túnel de Padre Claret, en la actualidad en obras, se adjudicó en más de 4,5 millones de euros. Los trabajos del modificado van encaminados a mediciones y aspectos constructivos ya previstos en el proyecto inicial, por lo que no será necesaria la redacción de uno nuevo.