El policía de Valladolid condenado por pegar a un hombre mantuvo su puesto de agente durante el juicio y la instrucción
Jorge A.S.A. siguió ejerciendo como agente hasta hace 6 meses, cuando solicitó la baja laboral
El policía nacional Jorge A.S.A. , condenado a tres años de cárcel y ocho años de inhabilitación tras pegar sin motivo a una persona por preguntar en la comisaría de Parqueso l, estuvo trabajando durante el tiempo de la instrucción y del juicio . Es más, no fue hasta hace seis meses, una vez solicitó la baja laboral , cuando el encausado dejó temporalmente de ejercer como agente del Cuerpo Nacional de Policía.
La información a la que ha tenido acceso este periódico ha resultado con que Jorge A.S.A siguió trabajando durante más de dos años desde que en una tarde del 25 de mayo de 2022 propinó un puñetazo y una patada en la pierna contra Atila S. , quien acudió a la comisaría de Parquesol tras confundirse con un hospital y realizar una serie de «preguntas incoherentes», según el agente condenado, que también le detuvo ilegalmente.
Sin ser expedientado por el cuerpo, dejó de ejercer sus funciones como policía nacional tras solicitar la baja laboral hace seis meses . Y a pesar que este miércoles la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia Provincial consideró probada por parte de Jorge A.S.A. la autoría de un delito de detención ilegal, la Policía Nacional todavía no ha abierto expediente al funcionario debido a que no le ha sido notificada la sentencia, según trasladan las mismas fuentes. Por tanto, hasta no que no sea recibida por el cuerpo y comprobar que es firme, no puede ejecutarla .
Además del ingreso en prisión, el agente también deberá hacer frente a una indemnización de 9.000 euros en favor de la víctima , en concepto de daños morales. La cuantía ya fue depositada en el tribunal con carácter previo al juicio mediante transferencia bancaria con la intención de reparar el error cometido cuando, como así reconoció, propinó un puñetazo al ciudadano rumano y luego le pateó tras caer éste al suelo. Esta acción lleva a la sala a aplicarle la citada atenuante de reparación del daño.
Tanto el fiscal del caso como la acusación particular coincidieron en rebajar la petición global de condena a tres años y medio de presión que pedían -seis meses por delito contra la integridad moral y tres años por detención ilegal- , pese a que inicialmente solicitaron siete años y medio y otros cinco de cárcel, respectivamente.
La defensa, por contra, había solicitado una pena mínima y multa de 90 euros por un delito leve de maltrato e interesó la absolución por el delito de detención ilegal al concurrir, a su juicio, un error invencible. Subsidiariamente, por delito de detención ilegal imprudente pidió una suspensión de mes y medio de empleo y sueldo.
«Pensé que me la liaba» , llegó a declarar Jorge A.S.A. sobre el modo de actuar contra Atila S., de quien declaró que llegó a golpearle en la mejilla y la oreja tras encontrarle en las dependencias policiales de Parquesol, a las que accedió sin permiso. Al recibir esa supuesta agresión -no probada por los policías que se encontraban en comisaría-, le redujo segundos después con un puñetazo , por lo que el agente insistió en que había motivos para la detención al haber sido objeto de un delito de atentado .