La Junta avanza en los pisos colaborativos en Valladolid con la construcción de 50 en la calle Mieses

La construcción de viviendas colaborativas en régimen de arrendamiento social destinadas, sobre todo, a la población joven , va cogiendo impulso en Valladolid y, una vez en marcha los expedientes de este tipo de edificios con estancias compartidas en los barrios de Parquesol y de Los Viveros, la Junta de Castilla y León avanza también ahora con el proyecto de Huerta del Rey . 

En este caso, se van erigir 50 apartamentos en la calle Mieses , frente a la sede de Familia, dispuestos en dos hileras en forma de ‘L’ , con una inversión estimada de 6 millones de euros –asociados al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea–, si bien habrá que esperar a que se adjudiquen las obras para saber el precio definitivo.     

Según las previsiones reflejadas en el proyecto básico, la superficie útil aproximada de cada piso será de 66 metros cuadrados , distribuidos en dos habitaciones, dos baños y un cuarto principal concebido como salón, comedor y cocina. Dentro del bloque también se contemplan dos casas accesibles de tamaño más pequeño, de en torno a 55 metros cuadrados de superficie útil, similares a las otras pero sólo con un dormitorio y un baño. 

Y en todas ellas habrá una terraza cubierta de seis metros cuadrados, que no sobresaldrá de la rasante de la fachada, con lo que el aspecto estético del inmueble desde la calle será parecido al de una colmena, con esos ‘huecos’ de los balcones. En la planta semisótano se situarán el garaje y los trasteros, con 63 plazas de aparcamiento para vehículos y 72 ‘desvanes’ , tal y como figura en el documento inicial de trabajo.  

Aunque todos los apartamentos cuenten con el espacio necesario para poder residir de forma independiente, la característica diferenciadora de este tipo de propuestas es que tienen lugares de uso común para los residentes y, en este caso, se aprovechará la ‘articulación’ de la ‘L’ para situar esas zonas compartidas . 

Así, habrá espacios de coworking en cada una de las tres plantas (una baja y dos en altura) y, además, en la que está a pie de calle se reservará un espacio para cuartos de aparcamiento de bicicletas y de cochecitos de bebés , mientras que en la segunda habrá un tendedero asociado a la lavandería de la terraza.  

Además de estos espacios, el resto de zonas también están diseñadas pensando en ese concepto de cohousing. El patio interior en forma triangular –como resultado de esa disposición del edifico en forma de ‘L’–  se plantea como un lugar «de ocio, descanso y disfrute de los habitantes del edificio», con elementos de juegos infantiles para los niños.

Sin olvidar que el acceso a las viviendas será a través de un pasillo común en cada planta, tipo pasarela, pensado «para que la gente que viva allí pueda interrelacionarse y crear una comunidad vecinal», añaden en la memoria. 

La parcela elegida por Somacyl –la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León que se está encargando de éste y de otros proyectos de viviendas colaborativas– tiene 3.570 metros cuadrados de superficie y actualmente está vacía, «ocupada por árboles y vegetación». En ella se erigirá el edificio, que contará con dos portales de entrada .

Según los plazos establecidos en la licitación, una vez se seleccione a la adjudicataria, ésta dispondrá de tres meses para la redacción del proyecto definitivo y después comenzarán las labores sobre el terreno. El cálculo es que la construcción dure 19 meses , es decir, en torno a un año y medio, y luego hay otro mes de margen para la puesta en uso del edificio. 

A tenor de estos plazos, el proyecto podría arrancar esta primavera –aunque las máquinas tardarán más en entrar a la parcela– y estaría listo, siendo optimistas, a finales de 2025 , si bien parece más probable apuntar a 2026 para dar la bienvenida a los inquilinos que estrenen los apartamentos.

En esas fechas Somacyl también calcula que pueda tener terminadas las viviendas colaborativas de la calle Julio Senador Gómez, en el barrio de Parquesol . En este caso se trata de 107 pisos, con una inversión estimada de ocho millones de euros, si bien el expediente va con más retraso, pues aún están en la fase de licitación del proyecto básico.

Los primeros que se podrán estrenar en la capital vallisoletana parece que serán los promovidos en Los Viveros , en la calle de los Jardines de los Alcázares de Sevilla, esquina Calle Jardines de Sabatini, pues los trabajos ya están adjudicados. En concreto, de su construcción se está encargando Ferrovial por 6,6 millones de euros –un 3,5% menos de lo estimado–, para erigir esta promoción en la que habrá 54 viviendas .  

Del resto de estancias colaborativas que está promoviendo la Junta en otras ciudades y municipios de la geografía autonómica, destaca en la provincia de Valladolid el de Medina del Campo , cuyas obras están en proceso de evaluación de ofertas. En este caso el presupuesto estimado son 3,5 millones de euros para habilitar 27 pisos en régimen de alquiler destinado a jóvenes.