Los autobuses de Valladolid sufren dos accidentes de media al día, el 54% provocados por terceros

Acabar con los accidentes, reducirlos a cero, resulta imposible, una utopía a la que, sin embargo, hay que tender, y la empresa de autobuses urbanos de Valladolid, Auvasa, se marca ese objetivo para 2050 como parte del proyecto Visión Cero de la  Unión Europea.   Más factible, aunque también complicado, parece rebajar la siniestralidad a la mitad en 2030, el horizonte más próximo de las dos fases en las que se divide el proyecto  de seguridad vial recogido en las recomendaciones de Bruselas.

     El plan de Auvasa para conseguir una reducción significativa de los accidentes en los que se ven involucrados los autobuses de la flota pasa por la puesta en marcha de una batería de medidas tanto preventivas como de formación,  estas dirigidas a los conductores, de información, en este caso para los usuarios, y de seguimiento de los datos de siniestralidad para tener una visión de las causas y aplicar actuaciones correctoras.

El pasado año fueron 671 los accidentes en los que se vieron implicados autobuses urbanos hasta diciembre, 111 con daños para las personas, y en el 46% de los casos la responsabilidad fue de Auvasa, mientras en el 54% restante fue por culpa de terceros . Los frenazos y la distracción fueron las causas principales apuntadas este viernes por el gerente de Auvasa, Eduardo Cabanillas, entre los casos en los que la responsabilidad fue de terceros. El gerente subrayó el descenso tanto de los accidentes el pasado año respecto a los 722 de 2022, como el número de aquellos en los que la empresa fu responsable, el 58% hace dos años.

  Convencido de que «la inversión en políticas de seguridad tienen retorno social», Cabanillas anunci ó la incorporación a una primera remesa de 44 autobuses, a los que seguirán otros hasta completar la flota, de sensores inteligentes de detección y alerta para la eliminación de ángulos muertos y reforzar la visión frontal de los conductores. El sistema  Adas, siglas en inglés de sistemas avanzados de  asistencia al conductor,  alertará del riesgo de colisión, atropello, salida de carril, permitirá la detección de peatones y avisará del exceso de velocidad. Las pantallas de alerta estarán en el puesto de conducción.

Los 11 autobuses eléctricos cien por cien, incorporados el pasado año a la flota, ya disponen de este sistema, pero Auvasa reforzará la seguridad con cámaras frontales en los pilares delanteros y monitores laterales para la visión de conductor. Cabanillas anunció la disposición de la empresa fabricante, la navarra Irízar, para colaborar en el refuerzo de la seguridad de los 11 vehículos. Con estas medidas serán 55 los autobuses que contarán con una visibilidad del cien por cien.

El monitor de autobús será una figura nueva a la que deberán acostumbrarse los usuarios. La misión del monitor, que estará en los autobuses pero también en las marquesinas, será recordar a los viajeros la necesidad de respetar ciertas normas para reforzar la seguridad . Los conductores de autobús, por su parte, deberán reciclarse para afianzar su formación en materia de seguridad y también los mandos intermedios de la empresa.

La información, los datos, serán claves en el plan de reducción de los accidentes que aplicará Auvasa, dotado con una partida económica de 400.000 euros.  El análisis periódico de la siniestralidad por líneas, recorridos y vehículos permitirá la elaboración de un sistema de información geográfica y la detección de los puntos más conflictivos para así aplicar medidas específicas.Con los datos disponibles, las líneas 1 y 2 son las de mayor siniestralidad, en consonancia con su mayor número de frecuencias y con su recorrido, al atravesar ambas la ciudad.