Pingüinos 2024
De finalista de La Voz a Pingüinos
El cantante canario Mario Leal conoció a su novia en un bolo este verano y ella le ha contagiado la pasión por la moto
Viene dispuesto a dar el do de pecho, a pesar de un neumotórax reciente, en su primer Pingüinos. Una cita a la que ha llegado por una de esas causalidades que se cruzan el camino y que cambian la vida para siempre. Mario Leal, natural de Las Palmas de Gran Canaria, es cantante de profesión y fue finalista del concurso televisivo La Voz de 2017 . “Fui tercero de 53.000 aspirantes. Una pasada, aunque tiene una parte no tan positiva, ya que la gente da por hecho que subes muchísimo el caché y no es así”, asegura este nuevo entusiasta de la concentración motera vallisoletana.
Una química con el mundo de las dos ruedas que surgió sin esperarlo. “Fui a cantar una gala en San Bernardo el pasado verano y allí conocí a mi pareja, Paula, que se presentó como una gran seguidora. Comenzamos una relación y ahora trabajo en esta pedanía de Valbuena de Duero en un restaurante que se llama ‘Casa Paca La Estrella Canaria’", resume el solista especializado en pop español.
El vínculo con su novia y sus suegros le ha llevado también de cabeza a una afición hasta ahora desconocida para él. Buena parte de la pasión por las motos, las concentraciones y todo el mundillo de las dos ruedas se la debe a su suegro, José, alias ‘El inglés de San Bernardo’ , que es todo un apasionado, propietario de varias ‘cabalgaduras’, entre ellas una Triumph 800.
Para dar fe de quién es el ‘inglés de San Bernardo’, el protagonista pide al periodista que alce la vista y lea una gran pancarta atada a la rama de un pino y ya raída por el paso del tiempo, que lleva su nombre. Está colocada hace muchísimos años y marca el punto exacto donde despliega las tiendas de campaña todos los años.
Mario ha empezado de forma modesta en el motociclismo pero ya posee una custom Daelim 125 , con la que disfruta “muchísimo”. Y no solo eso, también se está volcando en vivir en persona eso de ser ‘puingüino’ en su formato más auténtico, el de hoguera, saco, tienda de campaña y reunión de amigos. La mañana de este lunes se estaba dedicando a montar las tiendas con su grupo: José, Rafa, Estrella, Fernando, Lourdes y Paula.
La jugada es coger sitio, hacer acopio de leña y esperar al jueves para llegar a ‘casa puesta’ y comenzar la liturgia de los abrazos y las risas con los incondicionales de todos los años.