Uno de los pueblos más visitados de Valladolid se queda sin su único cajero

El envejecimiento de la población o la falta de recursos son una de las desventajas de vivir en el mundo rural. En la ciudad es más sencillo acceder a una serie de recursos que se necesitan en el día a día y, cuanto más pequeño es la localidad, más complicado es hacerse con dichos recursos. Uno de los pueblos más visitados de la provincia se queda sin su único cajero . Un municipio que ostenta el reconocimiento de conjunto histórico-artístico desde 1975 y es catalogado como uno de los pueblos más bonitos de España. 

Los vecinos de Urueña tan solo disponían de un único cajero para retirar dinero y realizar otro tipo de operaciones bancarias, pero ya no podrán contar con este servicio. "Lamentablemente hoy hemos recibido un correo del grupo bancario propietario del cajero automático que tenemos en Urueña que el próximo viernes se procederá a la retirada definitiva del mismo ", con este mensaje en redes sociales el ayuntamiento de la Villa del Libro anunciaba que ya no habrá cajeros en el municipio a partir de este viernes. 

"La batalla del mundo rural contra los bancos está perdida de antemano", señalaba el consistorio a través de X, antes Twitter, para comunicar a sus vecinos que con la entrada del próximo año se quedarán sin este tipo de servicio. Un mensaje en señal de protesta que su alcalde, Francisco Rodríguez, secundaba a través de Facebook: "Se ha intentado por todos los medios, contactando con todas las administraciones para evitarlo pero no ha sido posible" .

"La batalla del mundo rural contra los bancos está perdida de antemano sólo velan por sus intereses, por sus cuentas de resultados y si hay pérdidas con el cajero pues se elimina ...", lamenta el primer edil a través de las redes sociales. "Soy el primero en lamentarlo, lo hemos intentado. Salvo milagro de última hora pues nos quedamos sin el cajero que tan buen servicio daba a Urueña, pueblos de alrededor y turistas", señala el regidor del municipio. 

De esta forma, con pocos días de antelación, los vecinos de la Villa del Libro, uno de los pueblos más visitados de la provincia, se enteran que antes de la entrada del nuevo año, se quedarán sin su único cajero en el pueblo.