Diario de Valladolid

Explosión de gas de la calle Goya

El hijo de la fallecida tras el archivo: "Alguien tiene que ser responsable del empalme sin soldar"

Miguel Fernández asegura que lo que quiere es "que todo esto termine y vivir tranquilo"

Miguel, el hijo de la fallecida en la explosión de la calle Goya, en el recuadro.-E. M.

Miguel, el hijo de la fallecida en la explosión de la calle Goya, en el recuadro.-E. M.

Publicado por
Fernando Martín
Valladolid

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El auto del Juzgado de Instrucción número 1 de Valladolid, que archiva las actuaciones en el caso de la explosión de la calle Goya número 32 al considerar que fue "accidental" no fue del agrado de Miguel Hernández, uno de los hijos de Teresa Bergondo, la mujer fallecida, quien tuvo la sensación, tras la lectura de los tres folios que ocupa el fallo, de que «se lo han querido quitar de encima».

El juez hace en su auto una valoración encomiable del informe de la Brigada de la Brigada Provincial de la Policía Científica, en el que se basa su decisión, y que califica de «detallado, prolijo, profesional» y «comprensivo de todos los elementos necesarios y adyacentes».  Además, deja abierta la posibilidad de recurrir a la vía civil. El informe en cuestión revela la existencia de un empalme sin soldar en la conducción de gas del 1º C, el punto en el que se produjo la fuga que acabó en explosión .

El hijo de Teresa aseguró, sin embargo, estar sorprendido dado que «alguien tiene que hacerse responsable» del empalme sin soldar que provocó la  fuga de gas y la consecuente explosión . Miguel añadió que había enviado el fallo a su abogado para saber «cómo proceder», aunque no sabe si «merece la pena hacer algo más» y señaló que lo que quiere es «terminar con todo esto y vivir tranquilo».

Ya en unas declaraciones a este periódico en el mes de octubre, Miguel reconocía  que tanto él como su hermana Laura  tendrán que  aprender  «a vivir con ello» y añadía : « Estoy deseando que todo esto se termine ya y lo pero es que no ha hecho más que empezar. Viendo los casos que hubo en Palencia o Rondilla se puede ir perfectamente a 15 o 20 años y lo que quiero es que esto se intente zanjar cuanto antes. Al igual que otros vecinos, el 1 de agosto de 2023 es una fecha que no vamos a poder olvidar fácil, se nos va a quedar marcado a todos».  

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