Segundo atraco en la calle Aurora de La Farola: encañona y maniata a un trabajador y dos clientes para robar 193 euros

Nuevo intento de atraco en el barrio de La Farola en Valladolid. Solo tres días después de que dos hombres se llevasen 4.148 euros de un supermercado de la calle Aurora tras amenazar a dos cajeras a punta de pistola, ayer un hombre robó 193,02 euros en un locutorio tras entrar oculto tras un pasamontañas y con un arma con el que encañonó a un trabajador y dos clientes llegando a maniatándoles en un baño. La colaboración ciudadana tras cometer el asalto fue fundamental para que la Policía Nacional le detuviese en la tarde de ayer y que pase a disposición de la autoridad judicial en la mañana de este miércoles como presunto autor de un delito de robo con violencia. 

Fue a las 18.00 horas cuando agentes en servicio de seguridad ciudadana eran comisionados al barrio de la Farola  donde un individuo manifestaba, a través de la Sala 091, que se estaba produciendo en el locutorio Cibermarket un atraco por un individuo oculto tras un pasamontañas. Según los testigos y las víctimas del atraco, el hombre se había dirigido a un establecimiento pidiendo el dinero al trabajador amenazándole con una pistola de aire comprimido y obligándole a tirarse al suelo donde le habría maniatado con unas bridas .

En ese momento entró otro cliente al local que rápidamente fue encañonado con la pistola por el atracador y obligado a meter el dinero de la caja en una bolsa y, además, robándole el efectivo de su propia cartera. Tanto el cliente como el responsable del local fueron introducidos en un baño, como también una mujer que entraba en la tienda durante aquel instante , siendo también apuntada con el arma. El asaltante cacheó a las tres personas para comprobar si tenían teléfono móvil amenazándoles para que no salieran del baño.

Tras completar el atraco, el hombre salió del local descubriendo su rostro momento en el que fue observado por otro testigo que fue quien dio aviso a la Sala 091 de lo que estaba ocurriendo. Rápidamente, la Policía Nacional se dirigió a la casa de apuestas donde el atracador se habría introducido y una vez en el interior los agentes reconocían al individuo , que coincidía plenamente con las características aportadas por los testigos, por lo que procedieron a su detención comprobando en el cacheo realizado al mismo que portaba una pistola de aire comprimido. Del mismo modo se le localizaba una bolsa de plástico que contenía un pasamontañas, un guante y una visera negras unas gafas marrones y 193,02 euros en monedas y billetes .