La sorpresa de la iluminación navideña de Valladolid ya se vislumbra en Portugalete

El olor a castañas, las bufandas prietas y la calle Santiago abarrotada son señales de que la Navidad se acerca a Valladolid, aunque realmente, es con el encendido de luces del próximo 23 de noviembre cuando se hará oficial. Una fecha que fuera de estar elegida 'al azar', llega antes del conocido 'Black Friday', el viernes del año en el que las calles del centro deberían de estar abarrotadas. Un año más la ciudad se viste de gala de la mano de Iluminaciones Ximénez, quienes aterrizaron hace ya unos meses con grúas y elevadores para ir adelantando los preparativos. Cerca de 60 localizaciones a lo largo de toda la ciudad han sido iluminadas con más de 350 elementos como arcos, pórticos, árboles en 3D, letreros, figuras de suelo y otros motivos luminosos para engalanar las fiestas navideñas, que dejan a resolver la incógnita de la decoración elegida para Portugalete este año.

Una iluminación de Navidad que este año llega con sorpresa en Portugalete , que es donde se procederá al encendido de toda la iluminación navideña. Una sorpresa, que ya comienza a vislumbrarse en en su montaje a base de arcos y que viene a sustituir a las coronas de los Reyes Magos. ¿Qué será? Esa es la sorpresa que continúa sin desvelar el Ayuntamiento de Valladolid, más allá de que no serán los angelitos que ya había previsto en el anterior equipo de gobierno municipal de Óscar Puente. Los primeros elementos que se aprecian en el montaje son unos arcos dorados luminosos, fondos muy coloridos y alguna que otra caseta de madera. Se trata de una megaestructura que va a sorprender a los vallisoletanos y que durante este sábado ha seguido avanzando para conformar un pórtico de luces  con un estampado angelical en la parte superior.

Como los tiempos cambian pero las tradiciones se mantienen, la plaza Mayor volverá a tener un espacio reservado para su gigantesco árbol de 31 metros de altura, que cuenta con miles de luces LED. El color rojo y dorado llenará de glamour el principal enclave vallisoletano  hasta el día de Reyes, el 6 de enero , por lo que se tendrá el tiempo suficiente para transcurrir y captar momentos icónicos desde debajo de la estructura. 

Le acompañará  el tradicional mercado artesanal , ya en su séptima edición, que el pasado 31 de octubre empezó su instalación para levantar puestos de repostería, frutos secos, chocolate caliente, embutidos, cervezas artesanas y conservas. Tampoco faltarán los puestos de venta de figuras para el belén, artículos navideños, marionetas, cerámica, marroquinería o decoración en madera., que ya están instalados. 

El TioVivo 1900 también formará parte del decorado de la plaza Mayor como atracción de los más pequeños de la casa. Está previsto que alargue su actividad hasta el próximo 6 de enero, sin embargo y dependiendo de su afluencia, podría extender su actividad durante los siguientes meses, como ya ocurrió el  año pasado .

Otra de las novedades este año es que el portal de  Belén, el  misterio del nacimiento de Jesús, que los últimos años se situaba frente al edificio del Ayuntamiento, se llevará al centro de la plaza Mayor, en el entorno del Conde Ansúrez. Se trata con ello de darle mayor relevancia y que sea el eje que de la decoración navideña de la plaza Mayor de la capital vallisoletana.