El fiscal pide un total de 7 años y 9 meses de cárcel para el histórico miembro de la banda del BMW Alejandro G.E., de 47 años, por lanzar una maza de imponentes dimensiones al coche policial que le perseguía en una enloquecida huida de decenas de kilómetros por las autovías A-62 y A-6. Esta acción, que puso en serio peligro la vida de los agentes, fue solo uno de los tres presuntos delitos que cometió en la madrugada del 15 de noviembre de 2019, ya que además manejaba el coche sin poseer el carnet de conducir y lo puso a 200 por hora .
La vista oral por estos hechos se celebrará el próximo jueves 5 de octubre en la Audiencia Nacional. No es la primera vez que está citado para este juicio. La misma vista se señaló el 12 de enero de 2022, pero El Rini no se presentó y el tribunal ordenó automáticamente la orden de buscar y captura contra este acusado multirreincidente especialmente en delitos contra la seguridad vial a pesar de que carece de carné de conducir.
Ahora está asegurada su presencia en la sala de la Audiencia Provincial, después de que fuera arrestado el pasado mes de abril en una redada en Pajarillos que pasó a la historia de mayor resistencia de los vecinos del 29 de octubre al arresto de uno de los suyos.
La Fiscalía de Valladolid demanda en concreto cinco años de prisión por un delito de atentado con instrumento peligroso, dos años de cárcel por conducción temeraria con agravante de reincidencia, y nueve meses de prisión por conducción sin permiso.
Las conclusiones provisionales del Ministerio Público establecen además que concurren las circunstancias agravantes de multirreincidencia en el caso de los delitos de atentado y conducción sin permiso y de reincidencia en cuanto al delito de conducción temeraria.
Los hechos ocurrieron sobre las 00,30 horas del 15 de noviembre de 2019, cuando un indicativo policial observó, cómo un turismo conducido por una persona no identificada, en la carretera de Fuensaldaña, se incorporó a la A-62.
Como los agentes tenían conocimiento de un robo cometido en una gasolinera, en el que se había visto implicado un delito de similares características, decidieron identificar al conductor.
En la incorporación a la A-62 se encontraba detenido en el arcén otro coche conducido por el procesado, quien al ver que se aproximaba el primer automóvil, abandonó el lugar a gran velocidad.
Los agentes intentaron que se detuvieran ambos vehículos, pero sus conductores hicieron caso omiso a las indicaciones y emprendieron la huida a doscientos kilómetros por hora.
El conductor del primer coche tomó la salida hacia Zaratán, mientras El Rini siguió en dirección a Salamanca, perseguido por los agentes y, pasada la localidad de Geria, apareció de nuevo el primer vehículo, que adelantó al coche policía por la derecha y fue tirando por la ventanilla polvo gris, al parecer de un extintor, lo que puso en peligro la vida de los agentes.
El primer coche abandonó la autovía, el acusado se incorporó a la A-6 en dirección Madrid, también a doscientos kilómetros por hora, hasta que cambió de sentido, se incorporó de nuevo a la A-62 hacia Valladolid y comenzó a tirar cosas por la ventana y arrojó una maza de grandes dimensiones contra los agentes, que golpeó el vehículo policial, poniendo en peligro la vida de los agentes y de los demás usuarios de la carretera.
El acusado colisionó además con un camión, intentó abandonar el lugar y un agente realizó un disparo intimidatorio al suelo.
Hizo caso omiso a las indicaciones de los agentes para que bajara del coche y fue necesario sacarle por la ventana al haber quedado bloqueada la puerta del conductor por el impacto contra el camión. El transportista fue indemnizado por su compañía de seguros y renunció a la indemnización que pudiera corresponderle.
