Valladolid suma ya 7.688 abonados al nuevo sistema de alquiler de bicis 'Biki' y alcanza los 40.000 viajes al mes
En los siete primeros meses desde que empezó el servicio de BIKI son ya 240.000 los usos, el 80% de los previstos para todo el año
El nuevo sistema del alquiler de bicicletas, BIKI, puesto en marcha el pasado mes de febrero por el anterior equipo de gobierno municipal que dirigía Óscar Puente, es una fuente de buenas noticias, esas que tanta falta hacen. Ya lo fue al principio, cuando el número de usuarios se disparó el primer mes de funcionamiento al pasar de 3.322 que había en enero a 22.652 de febrero, y la tendencia al alza se mantiene transcurridos siete meses desde su implantación, con pequeños altibajos propios del periodo vacacional.
BIKI es un éxito que admiten desde el nuevo equipo de gobierno municipal, aunque, como paradoja, una de las primeras medidas adoptadas por la nueva Corporación fue, como ya habían anunciado, suprimir carriles bici como el de Isabel la Católica para dar más espacio al coche, mientras el carril que hay ahora se desplaza hacia la acera. Lo cierto es que las cifras cantan la excelente acogida que ha tenido BIKI entre los usuarios de bicicleta, aunque no hay que engañarse y Valladolid está todavía muy lejos, siquiera de acercarse, al festival de bicis que se vive cada día en las ciudades de los Países Bajos y del norte de Europa en general.
Los últimos datos del Ayuntamiento hasta el pasado mes de julio incluido revelan que son ya 7.688 los abonados al nuevo sistema en sus diferentes modalidades, un número que sigue al alza, de los que 6.089 tienen una suscripción anual y 1.075 mensual. Los que optan por la suscripción ganan por goleada, 7.164, a los que sacan un bono, apenas 520, de los que 314 lo tienen de forma anual para usar la bicicleta mecánica y otros 130 la eléctrica.
El promedio de viajes diarios es otro dato que revela el impacto de BIKI en el uso de la bicicleta para moverse por la ciudad. Con el anterior modelo de alquiler, ‘Vallabici’, nunca se llegó a los 500 viajes al día durante sus últimos cuatro años de funcionamiento. Es más, entre 2019 y 2022, el último año, el declive fue evidente y se pasó de 462 usos a 144.
Con BIKI, los viajes en días laborales casi se han multiplicado por diez respecto a 2022 y alcanzan los 1.286, cifra que baja a 1.015 los domingos y a 948 los festivos y que deja una media anual de 1.199; más del doble que el mejor año de ‘Vallabici’. El récord se consiguió el pasado mes de mayo con 1.700 viajes en días laborales, un número que bajó en junio y julio, aunque la cifra mensual se mantiene estabilizada ahora en 40.000 usos al mes.
Transcurridos siete meses desde que se implantó el nuevo modelo de alquiler, ya se han superado la barrera de los 240.000 viajes, lo que supone que en agosto ya se ha llegado casi al 80% de los previstos para todo el 2023. En cuanto a la preferencia entre la bicicleta eléctrica y la convencional, son mayoría los suscriptores anuales que optan por esta última, 4.648, mientras 1.445 prefieren la que funciona con electricidad, más cara. Por contra, en el día a día, el usuario se decanta por la eléctrica, hasta el punto de que la utilizan más del doble que la convencional.
Desde el Ayuntamiento, consideran que «uno de los éxitos de BIKI se debe a la amplia cobertura de puntos de préstamo en la ciudad , con las 97 estaciones instaladas ya y el 82% de la ciudadanía que ya dispone de una a menos de 250 metros de su casa o trabajo» .
Además de estar completada la red de estaciones, el Ayuntamiento añade «la facilidad y seguridad de los anclajes, junto a la monitorización continua de bicicletas y estaciones hacen que el sistema sea fiable y con unos niveles altísimos de disponibilidad y calidad del servicio».
Sea como fuere, lo cierto es que BIKI funciona y las bicicletas de color naranja y verde, estas últimas eléctricas, forman ya parte del paisaje urbano en cualquier punto de la ciudad.
La última e stación en abrir fue la que se encuentra en la carretera de Segovia, junto a la Universidad Europea Miguel de Cervantes, UEMC , con el objetivo de facilitará el desplazamiento tanto a los estudiantes que acuden al centro universitario como a los que se desplazan a los colegios de la zona y, en general, a los ciudadanos todos los ciudadanos al Hospital Río Hortega. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), apuntó el pasado mes de junio la necesidad de incorporar a la red de estacionamientos a otras zonas de la ciudad y del alfoz.
En concreto, proponían un nuevo emplazamiento junto a la fábrica de Michelín, una alternativa que ya planteó el anterior equipo de gobierno, y otra en la Avenida de Salamanca, cerca del término municipal de Arroyo de la Encomienda, al residir en este municipio muchos jóvenes que trabajan en el centro de Valladolid.
Las novedades que estudia el Ayuntamiento para BIKI hasta final de año pasan por «dotar de nuevos servicios asociados a la promoción del uso de la bicicleta en todo su abanico de posibilidades» y aquí se incluyen a las personas con movilidad reducida, bicicletas de carga y promoción en el uso para los centros de trabajo de la ciudad , todo ello con el objetivo «de ser un servicio que conquiste a todos los perfiles de la sociedad vallisoletana».
Desde que está en marcha BIKI, los usuarios han presentado ante el Ayuntamiento más de dos mil preguntas e incidencias relacionadas con el funcionamiento del servicio , de las que, según fuentes municipales, están resueltas 2.262, el 98%, con un tiempo medio de primera respuesta mediante correo electrónico de menos de dos horas.