Teresa, la fallecida en la explosión de Valladolid que enviudó recientemente

Tenía 53 años y dos hijos. Era viuda desde hace poco tiempo. Teresa vivía en el primer piso del número 32 de la calle Goya. Ese que saltó por los aires en la pasada noche. Ella es la única víctima mortal del suceso que ha conmocionado a la ciudad. Otras dos personas, un hombre y su hijo, continúan graves en el Río Hortega. Teresa había sido camarera del restaurante Manolín, en el Camino de La Esperanza, en el barrio La Farola, que ha pasado la noche desvelado por el suceso que se produjo sobre las 22.50 horas y causó un estruendo que se escuchó en varias partes de la ciudad.

La mujer tenía dos hijos, Laura y Miguel, de 28 y 30 años, y su marido había fallecido hacía poco. Después de la pérdida de su esposo se trasladó hace año y medio a este piso de la calle Goya 32 en el que la mujer vivía sola con la compañía de tres perros, cuatro gatos y dos hurones.  La hija, que reside en Huerta del Rey y también trabajó en el Manolín, fue la que dio la voz de alarma. Su hijo vive en Cantabria. Fue hasta el lugar e informó al equipo de rescate que no podía localizar a su madre. Pasadas unas horas, los bomberos encontraron su cadáver entre los escombros. El bloque tenía 4 pisos que han quedado derruidos. A falta de que la investigación avance, las primeras hipótesis hablan de que el foco de la explosión pueda ser precisamente el piso de Teresa . Los residentes muestran sus condolencias por la pérdida de esta vecina y todavía se encuentran impactados por lo ocurrido.