El patrimonio desmoronado de Valladolid

1. Valladolid

2. Ávila

3. Burgos

4. León

5. Palencia

6. Salamanca

7. Segovia

8. Soria

9. Zamora

"Miré los muros de la Patria mía, si un tiempo fuertes, ya desmoronados, de la carrera de la edad cansados, por quien caduca ya su valentía". Aquellos versos que escribió Quevedo no pueden estar más de actualidad en Castilla y León. A más ruina, más patria, más duelen. La Comunidad acapara la mayor parte del patrimonio en peligro del país incluido en la ‘lista roja’ de Hispania Nostra, 365 bienes en preocupantes condiciones de deterioro y riesgo de destrucción o desaparición, que suponen el 30% de todos los clasificados del país. Patrimonio cultural, industrial, militar y natural que se desmorona en la Comunidad con más patrimonio del conjunto nacional. La estación de Castroverde, Zamora; el castillo de Castronuevo, Ávila, y una torre medieval en Villanueva de la Torre, Burgos, son las últimas incorporaciones de las 68 que suma en un año, desde abril del ejercicio anterior .  Registrando más de una veintena en lo que va de 2023. Un patrimonio abandonado en el que la asociación Hispania Nostra pone el foco para intentar que perdure y se restaure. De hecho, frente a la ‘lista roja’, está la de la esperanza, la ‘lista verde ’. La de aquellos que se restauran y recuperan parte de su esplendor. Mientras hay casi 70 nuevos en peligro, siete dejaron de estar dentro de esta clasificación.

Este listado de bienes y monumentos en riesgo del olvido, sin cuidados y en cada vez unas condiciones más alarmantes, que saca los colores a las comunidades, sobre todo a la de Castilla y León, en parte porque es la que más patrimonio atesora, no incluye la misma proporción de bienes en peligro en todas las provincias . De las nueve castellanas y leonesas, destacan cuatro como las que más patrimonio de estas características contienen . Burgos encabeza el ranking con 61 monumentos , 17 de ellos incluidos en el último año y es, junto con Palencia la que más lleva este 2023 señalados: seis y ocho respectivamente. Precisamente la provincia palentina le sigue en número de monumentos y bienes en peligro dispersos por su territorio, con 58. León (55) y Salamanca (53) presentan una situación muy similar. 

El reverso son Ávila (16), Segovia (25) y Valladolid (27), las tres provincias con menos bienes culturales, industriales o naturales en una situación peligrosa para su supervivencia. De hecho, en tierras vallisoletanas y segovianas no se ha incluido ninguno este 2023 ; mientras en las abulenses, dos. En una situación intermedia se encuentran Zamora (32) y Soria (38), dos enclaves paradigmáticos de la despoblación no sólo de Castilla y León, sino de todo el país. 

Desde Hispania Nostra explican que su lista «es una herramienta de participación social creada con el fin de dar a conocer, sensibilizar y actuar sobre los elementos patrimoniales del territorio español en riesgo de desaparición». Inciden en que se trata de « una llamada a la acción » para evitar que la herencia patrimonial y cultural «se pierda y pase a la ‘lista negra’ [la de la desaparición]» y conseguir que «e recupere y forme parte de la lista verde».

El director general de Patrimonio Cultural de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Prieto , subraya  «la importante labor de Hispania Nostra en defensa del patrimonio» y señala que «la principales competencias sobre esos bienes es del propietario, ayuntamientos, diócesis y particulares». Y señala que «la Junta colaborará con todos ellos como viene haciendo».  

La provincia vallisoletana no se encuentra entre las que más patrimonio en peligro alberga. Es más, está a la cola en Castilla y León, junto con Segovia y Ávila, tal y como puede verse en el gráfico adjunto. Posee 27 elementos patrimoniales en la ‘lista roja’ de Hispania Nostra por el riesgo de «desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores». La mayoría lleva varios años en este listado ya que en lo que va de 2023 no se ha incluido ninguno nuevo y desde abril del año pasado, apenas dos: los restos de la iglesia de San Juan Bautista , en Tamariz de Campos, y la fortaleza y torreón de ‘El Cubo ’, en Villacid de Campos, que se engloba en patrimonio militar.

Estos se suman a otros ya incluidos tiempo atrás como los castillos de Mota del Marqués , levantado en tiempos de Alfonso X el Sabio; el de Mucientes , del que se tiene documentación sobre su existencia «desde el siglo XIV, cuando el rey Alfonso XI se lo entrega a su mayordomo Alvar Núñez Osorio y fue utilizado como palacio residencia por los sucesivos condes de Ribadavia», tal y como recoge la web de Hispania Nostra, y el de  Villalba de los Alcores. En este listado también se incluyen por su mal estado de conservación el colegio de los Escoceses, en Boecillo ; el Hospital Mater Dei, en Tordesillas, o la fábrica de harinas ‘La Confianza’ de Tordehumos .

Es la provincia de Castilla y León que menos elementos patrimoniales incluye la ‘lista roja’, con tan solo 16. Aunque en el último año ha incorporado tres nuevos bienes a la lista; el Castillo de Castronuevo, el Molino de los Méndez y el Castillo de Torralba. El Castillo de Castronuev o ha sido la última incorporación a la lista el pasado 5 de abril. El castillo, que data de 1437 y se sitúa en el municipio de Rivilla de Barajas, se encuentra invadido por la maleza y ha sufrido varios derrumbes, necesita ser restaurado para evitar que desaparezca por completo. El Molino de los Méndez , situado en Mijares, fue incluido en la lista el 17 de marzo de 2023 por ser el único molino del término que se puede rescatar en su totalidad y aunque se define como "en ruinas" se considera que "mediante la adecuada rehabilitación" puede ser recuperado. Este antiguo molino harinero data de 1751, y aún conserva en buen estado la mampostería del canal, así como el cubo circular de aguas, el edificio molinero, una muela, las puertas y ventanas, el cárcavo y la casa del molinero. Por otra parte, el Castillo de Torralba en Cisla entró en la lista roja en mayo de 2022 por "no estar protegido legalmente» y por «contar con un avanzado estado de deterioro". Las nuevas incorporaciones de este año también incluyen: el palacio de Don Pedro del Águila, la muralla y castillo-palacio de Bonilla de la Sierra. 

El patrimonio burgalés es el que mayor riesgo sufre dentro de la Comunidad, encabeza la lista con 61 bienes de los cuales 17 se han incluido en el último año y que recogen patrimonio civil, religioso, militar e incluso industrial, como el Castillo de Rebolledo o el Monasterio de San Francisco. Si bien la provincia recuperó la Torre de los Porres en diciembre de 2022, el 16 de marzo de 2023 aparecieron en la lista roja la ermita de la Virgen del Sol y el Molino Caído, ambos en el municipio de Piedrahita de Muñó.

La ermita de la Virgen del Sol ,  ubicada en una vega, data del siglo X, siendo un ventanuco de la parte izquierda del altar su parte más antigua que se une a varias ampliaciones En la actualidad, se conserva parte del retablo y la decoración de las paredes en el interior. Declarada en ruinas, es propiedad del Arzobispado de Burgos, "urge ser rehabilitada por su antigüedad, así como por ser parte del Cantar de Fernán González". Piedrahita de Muñó acoge también el Molino Caído o molino Riole , del que no se tienen registros hasta principios del siglo XX. El motivo que fomenta su recuperación es "la curiosa arquitectura popular que integra las paredes en la roca caliza de la pared norte".

Asimismo, las incorporaciones a la Lista Roja de Burgos en el último año son: el castillo de Rebolledo de la Torre, el monasterio de San Francisco de los Reyes, el órgano barroco de la iglesia de San Martín de Busto de Bureba, los restos del Monasterio de San Cristóbal de Ibeas, la ermita románica de San Juan Bautista, la ermita Nuestra Señora de Uralde, la torre de telégrafo óptico, el órgano de la iglesia de San Martín, el castillo-fortaleza de Torregalindo, el castillo de Coruña del Conde, el horno de fundición de Huerta de Abajo, la antigua botica de Barbadillo del Mercado, el castillo de Rojas, la iglesia de El Salvador y la espadaña de Torremoronta

El patrimonio en peligro en la provincia leonesa apenas ha cambiado en un año. Salvo la, nada desdeñable, tropelía de destruir hace unas semanas por unas obras un tramo de una calzada romana en la localidad leonesa de Castrocalbón que hasta entonces era una de las mejor conservadas. Mientras otros territorios de Castilla y León incorporaron hasta una veintena, en el caso de Palencia, de bienes patrimoniales a esta lista roja, León apenas incluyó cinco nuevos desde abril del año pasado y este 2023 tan solo incorporó Compostilla II . La Junta desestimó a finales del año pasado el expediente para la declaración BIC de las torres de refrigeración y chimeneas de Compostilla II en León, después de conocer los estudios preliminares que cifraron en más de 20 millones el coste de reparación y mantenimiento de estos elementos singulares. 

En una provincia con tanta tradición minera, entre los bienes señalados por su riesgo de abandono se encuentra el conjunto minero-industrial de los lavaderos de La Recuelga, al norte del apeadero ferroviario de la localidad de Santa Cruz del Sil, o el poblado Minero de Peña del Seo. Hay ermitas, iglesias, puentes, cuevas y una calzada, la del Esla. Las últimas incorporaciones, aparte de Compostilla II, son la Ermita del Bendito Cristo, la Cueva de San Martín, la Ermita de San Roque y la iglesia de San Martín.

Es la segunda provincia con más patrimonio en peligro: 58 elementos , 22 durante el último año, entre los que destacan los edificios industriales como harineras o almacenes de las esclusas, así como estaciones de ferrocarril. En el último año la provincia registró ocho nuevos lugares: la torre medieval de Villanueva de la Torre, el puente medieval de Reinoso de Cerrato, los almacenes y vivienda de la esclusa nº 4 y nº 5 y la fábrica de harina del Ramal de Campos del Canal de Castilla, el castillo de Castil de Vela y la estación de Villaumbrales.

La última incorporación data del 5 de abril de 2023 y fue la torre medieval de Villanueva de la Torre , una fortificación del siglo XI, declarada como BIC, que servía como control de paso de personas  y animales. Asimismo, se incluyó en marzo el puente medieval de Reinoso de Cerrato . Su origen se remonta a la época romana, si bien sus 17 ojos lucen una estética medieval, aunque seis se encuentran hundidos. El estado de ruina amenaza con hacerlo desaparecer, así como lo convierte «en un elemento con peligro de derrumbe en situaciones de riadas». Por otra parte, «la vegetación que ha surgido a su alrededor dificulta la vista», señalan desde Hispania Nostra.

Desde abril de 2022, Palencia a sumado a la Lista Roja el telégrafo óptico de Tariego- Torre 21 línea de Castilla, el telégrafo óptico Alto de la Frausilla-Torre 20 línea de Castilla, la harinera del Serrón y conjunto de bienes vinculados, la harinera La Estrella de Castilla, la harinera de Villamuriel de Cerrato «La Palentina», la Venta de Valdemudo, las pinturas de la ermita de Nuestra Señora de la Piedad, la harinera de Campos Los Ángeles y complejo ferroviario, la harinera de Grijota, la estación del «tren burra» de Villamartín de Campos, la ermita románica del cementerio viejo, la alcoholera de Palencia, el molino de las Once Paradas y la fábrica La Azucarera Palentina

Se sitúa entre las cuatro provincias con mayor número de patrimonio dentro de la Lista Roja. Salamanca suma un total de 53 edificios en peligro , 12 clasificados desde abril de 2022. La última incorporación, en enero de 2023, ha sido el Palacio del Marqués de Caballero en la localidad de Aldeávila de la Ribera; una edificación del siglo XVIII construida por Jerónimo Caballero. El palacio, que  es una de las construcciones neoclásicas más destacadas de Castilla y León, ha sido incluido en la lista roja «por encontrarse totalmente abandonado»; lo que «ha provocado un desplazamiento de los sillares y unas cubiertas que podrían caer u derrumbar el edificio». 

Por otra parte, el edificio de las Tres Culturas de la capital salmantina también llegó a la lista en diciembre. Ubicado en la Rua Mayor, con una fachada elaborada con sillería muy decorada, arcos de herradura y un balcón decorado con la estrella de David, se encuentra en la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco. «El abandonó del por parte del propietario ha producido el deterioro de la fachada y el balcón que se declare en estado de ruinas, motivo por el cual se encuentra en esta lista», indica la organización. 

A estos dos emplazamientos se sumaron otros diez bienes en el último año: la Casa de los Ybarra o Pacheco de la Puebla, el chalet del paseo de la Estación, la iglesia vieja de Aldehuela de la Bóveda, el Convento de Nuestra Señora de los Ángeles, iglesia románica de Santibáñez del Río, el torreón de Santibáñez de Béjar, el caserón neobarroco de la avenida de Italia nº 36, el convento franciscano de Tejeda, la Casa del licenciado Andrés López de Talavera y los escudos del Palacio del Duque de la Roca.

Es la segunda provincia con menos bienes en peligro , sólo 25. Durante el último año solo ha tenido una nueva incorporación: las Casas de Esquileo de Trescasas , surgidas cerca de los lugares de trashumancia en el siglo XVI. Pese a que se conservan la mayoría de los muros, «los techos de las naves han cedido por el abandono y los planes urbanísticos amenazan con hacerlos desaparecer, unido al uso de los propietarios que los utilizan como garaje o almacén», recoge Hispania Nostra.

Acumula 38 elementos en la lista roja , como el Castillo de Calatañazor,  la Iglesia de San Bartolomé o las Casas de la Travesía Cinco Villas. Este año se han incorporado dos nuevos emplazamientos: la Casa Alta de los Carrillo Yáñez de Barnuevo y el castillo de Castillejo de Robledo. La Casa Alta de los Carrillo Yánez de Barnuevo  en Deza se unió a esta lista en febrero de 2023. La construcción del siglo XVIII «se encuentra en un estado de completa ruina, aunque los muros exteriores aguantan, los tejados están hundidos». La asociación alerta de que «se requiere su rehabilitación por su importante valor histórico».

También se incorporó el castillo de Castillejo de Robledo ,  propiedad de la Orden del Temple hasta que fue suprimida por el Papa Clemente V en 1311. Cuenta con un doble recinto amurallado y un foso artificial; todo junto a un castillo templario del que se conserva el aljibe, dos torres y algunos lienzos. Bien de Interés Cultural «se encuentra arruinado y en malas condiciones de conservación». 

La estación de ferrocarril de Castroverde de Campos , en Zamora, es el último elemento patrimonial en formar parte de la lista roja de Castilla y León.  Lo hace porque su «estado de conservación es malo y el estado de ruina es avanzado en los tres edificios», apuntan desde la asociación. Pertenece a una provincia, la zamorana, que se encuentra en una situación  intermedia en una comparativa entre los distintos territorios castellanos y leoneses. Mantiene 32 bienes patrimoniales en peligro , cuatro de ellos incluidos desde el último año.  

La ermita de San Lorenzo de Tábara, también se ha incorporado este año, se suma a los castillos de  Castronuevo de los Arcos, Belver de los Montes y el de Peñausende. Y a varias iglesias, como las de San Pedro, de Villalpando; la de Santa María de la Asunción, de Quintanilla del Monte; o la de San Pedro del Olmo, en Toro, entre otras. En el último año se han añadido también el convento de los Dominicos de Tábara y las ruinas de la Iglesia de San Salvador.