El Ayuntamiento de Valladolid fracasa en la venta de los chalés ‘okupados’ de Parque Alameda

Al Ayuntamiento de Valladolid le está costando dar salida a los cuatro chalés conocidos como Villa Paulita , ubicados en el barrio de Parque Alameda , que durante casi cuarenta años estuvieron ‘okupados’ por los descendientes del que fuera propietario –y familiares políticos de un trabajador municipal– , pues los ha sacado ya dos veces a subasta y no ha recibido ninguna solicitud . Ni siquiera después de haber rebajado el precio de venta, con una cifra de salida por la que esperaba recaudar apenas la mitad de lo que se pagó en su día por ellos.

Y es que la adquisición de los inmuebles, fechada en 1982, supuso un desembolso para las arcas municipales de 2,9 millones de euros –al cambio, pues la operación se realizó en pesetas– y a hora la puja inicial no llegaba a los 1,5 millones . En concreto, 1,479.277 era a lo que aspiraba el área de Planeamiento Urbanístico y Vivienda en este segundo intento fallido realizado por lotes, después de una primera operación en la que pretendía recaudar, como mínimo, 1,61 millones en un sólo pack.  Pero el resultado ha sido el mismo en ambos casos: los procedimientos se han declarado desiertos.   

Así que la decisión de enajenar estos bienes municipales por separado, y con una rebaja del 8% , parece que no ha sido suficiente. Según el detalle de la tasación, la más grande de las parcelas –en la que hay dos viviendas solapadas que se pueden demoler para construir más en su lugar–, salió a subasta a finales del año pasado por 885.678 euros; otra se valoró en 300.408 euros; y por la tercera  pidieron 293.190 euros.

Un precio, a priori, que encaja con las características de esta zona al sur de la ciudad –según se aprecia en portales inmobiliarios respecto al coste del metro cuadrado– teniendo en cuenta, además, que aunque un chalé se debe conservar en los términos actuales , hay otro que únicamente tiene que mantener la estructura, pero se puede subdividir, y en la parcela de mayor superficie hay espacio para edificar nueve casas unifamiliares tras demoler las dos que hay ahora .

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Esas nueve casas unifamiliares son las que calcula el área de Planeamiento Urbanístico, teniendo en cuenta que se trata de un espacio sujeto a las condiciones urbanísticas de ‘Ciudad Jardín’, pero el promotor que las adquiera (cuando las adquiera) puede apostar por un diseño en el que quepan menos viviendas pero de mayores dimensiones. 

En todo caso, no hay por el momento ninguna operación sobre la mesa porque nadie se ha interesado en los terrenos. Según explicó el concejal del área, Manuel Saravia, hasta octubre de este año siguen vigentes los precios de la segunda subasta y, si algún promotor quiere adquirir uno o varios lotes de estas parcelas ubicadas en la calle Montes Torozos –entre el paseo de Zorrilla, la avenida de Zamora y la carretera de Rueda–, puede hacerlo. Después, si nadie ha ‘llamado a la puerta’, el Ayuntamiento tendrá que volver a hacer una subasta, en unos términos que aún no han definido.  

Mientras, esta manzana que suma casi 6.000 metros cuadrados de extensión, continúa ‘bloqueada’, en el sentido de que, una vez resuelto el episodio de ocupación que sufrió durante casi cuatro décadas, se topa ahora con el problema de que no haya interés en los terrenos o, al menos, no encuentre compradores al precio estipulado por el Consistorio. 

La ‘historia reciente’ de Villa Paulita se remonta a noviembre de 1982, cuando el equipo de Gobierno capitaneado por Tomás Rodríguez Bolaños compró la finca por 480 millones de pesetas (2,88 millones de euros) , para su desarrollo urbanístico posterior. La propiedad pertenecía a José María Luelmo y a  Margarita Suárez y, aunque los familiares que residían allí tenían en torno a un año de plazo para abandonar las viviendas –hasta el 31 de diciembre de 1983–, lo cierto es que continuaron residiendo en ellas, de manera ilegal, hasta hace poco más de dos años. 

Los ‘okupas’, además de ser los herederos de aquellos antiguos propietarios, eran familiares de un funcionario del propio Ayuntamiento, del interventor Rafael Salgado. La suegra y los tíos de su mujer son los que continuaron allí afincados hasta mayo de 2020 , después de tres requerimientos de desalojo, el primero de ellos registrado durante la etapa de León de la Riva y los dos últimos, con Puente en la Alcaldía. 

Una vez el Ayuntamiento pudo recuperar la finca, treinta y siete años después de haberla adquirido , es cuando formuló la primera subasta, con ese precio de salida ya mencionado de 1,61 millones de euros para todo el terreno en conjunto, si bien la ausencia de interesados en el procedimiento les llevó a aplicar una rebaja hasta rozar los 1,5 millones de euros fijados en la segunda subasta, con una nueva propuesta parcelada en lotes que tampoco a despertado el interés, a tenor de un resultado, de nuevo, desierto. 

Según consta en su ficha urbanística, «las viviendas fueron proyectadas y construidas por el arquitecto madrileño José Antonio Corrales Gutiérrez en 1965 para José María Luelmo, con uso predominante del ladrillo cara vista». El encargo, continúa la descripción del catálogo, «constaba de tres viviendas unifamiliares que fueron resueltas miméticamente adosadas de manera simétrica».

De ellas, la vivienda de Montes Torozos número 8 (la situada en la intersección con la calle Bureba) tiene un grado de protección ambiental, por lo que están protegidas las fachadas, su volumetría y los acabados exteriores. Es decir, la persona que la adquiera deberá mantener la estética exterior, pero la puede subdividir . Se trata de una casa que cuenta con 332 metros cuadrados de superficie –313 de ellos destinados a vivienda y 19 correspondientes con el aparcamiento–, sobre una parcela de 1.483 metros cuadrados. Por el momento el precio que pide el Ayuntamiento es de 300.408 euros .

Por su parte, el chalé ubicado en el número 6 de Montes Torozos (el situado en el medio de las edificaciones) tiene un grado de protección estructural, lo que implica que deben mantenerse su «volumetría, tipología y elementos de la envolvente exterior». Es decir, hay que conservarlo según está. En este caso el terreno suma 1.317 metros cuadrados y el chalé dispone de 308 metros cuadrados, con una tasación de 293.190 euros en la subasta. 

La única edificación que se puede demoler es la correspondiente con los números 2 y 4 de la calle Montes Torozos (esquina con Ancares), puesto que no goza de ninguna etiqueta de protección. Así que no hay obligación de conservar las dos viviendas pareadas por el garaje , que tienen 240 metros cuadrados una y 172 metros cuadrados la otra. En su lugar se podrían erigir en torno a nueve chalés sobre los algo más de 3.000 metros cuadrados de superficie de la parcela. El último precio de salida fue de 885.678 euros .