El granizo arrasa 2.000 hectáreas de viñedo en el corazón de la Ribera del Duero
Pesquera, Piñel de Abajo y Quintanilla de Arriba pierden gran parte de la cosecha tras una tromba de agua que provocó numerosas inundaciones y afectó a vehículos y mobiliario urbano
Una tromba de agua y granizo destrozó viñedos y cultivos en varios pueblos de la Ribera del Duero. Los más afectados son Pesquera, Piñel de Abajo y Quintanilla de Arriba. En apenas 20 minutos la espectacular granizada arrasó las tierras, provocó inundaciones en numerosas casas y afectó también a vehículos y mobiliario urbano. Poco antes de las nueve de la noche del domingo los vecinos de estos municipios esperaban una fuerte tormenta. Estaban avisados por la previsión meteorológica y el color del cielo había cambiado de forma sorprendente pero no esperaban la espectacular tromba que arrasó viñedos y cultivos.
Los destrozos son cuantiosos. El alcalde de Pesquera, José Luis Martínez, señaló ayer a este diario que la granizada dejó inservibles 700 hectáreas de cereales y 500 de viñedos. «Han quedado destrozadas las zonas de cultivos con los cereales, patatas y todo lo que se había sembrado. Antes de comenzar a llover soplaba fuerte el viento y después llegó la tromba de agua y granizo que afectó también a los vecinos en casas y vehículos».
Los daños en otros municipios elevan a más de 2.000 las hectáreas afectadas. El panorama con el que despertaron ayer en Piñel de Arriba y Piñel de Abajo era desolador. El alcalde de esta localidad, Fernando Sanz, se encontraba este pasado domingo en Valladolid cuando se desató la tormenta y regresó de inmediato tras ser avisado. «Está todo destrozado, las cebadas, los trigos y los viñedos. Las cerezas están por los suelos». La espectacular tromba de agua y granizo resultó también demoledora para las viviendas, los vehículos y el mobiliario, como recordó ayer el alcalde. «En las casas hubo muchas goteras e inundaciones y estuvimos achicando agua hasta la madrugada, en mi casa se fue la luz».
Los vecinos de Quintanilla de Arriba también sufrieron las consecuencias. Cuando la lluvia y el granizo descargaban sobre la localidad ya eran conscientes de las pérdidas que la tormenta iba a ocasionar. El alcalde, Tomás Madrazo, indicó ayer que muchos caminos están arrollados y no ha habido posibilidad de pisar por allí. «La parte este ha quedado muy afectada, está destrozada. Poco antes de las nueve de la noche comenzó a llover. Fue minutos de agua y granizo, con truenos y relámpagos. Además del daño en cultivos y viñedos hubo inundaciones y goteras», añadió.
Los viñedos afectados pertenecen a la zona denominada milla de oro, de donde salen los mejores vinos de la Ribera del Duero. Muy cerca de la localidad de Pesquera, donde se encuentra una de las zonas más dañadas por la tromba de agua y granizo, se encuentran los viñedos de la Dehesa de los Canónigos y Vega Sicilia.
Los alcaldes y los vecinos de los municipios afectados no descartan la posibilidad de solicitar zona catastrófica por las cuantiosas pérdidas económicas. Algunos ya han presentado un parte con los daños estimados pero desde las organizaciones agrarias aseguran que es pronto para hacer un cálculo del dinero que dejarán de ingresar al haberse perdido toda la cosecha en muchas zonas. Agroseguro espera que los expedientes se multipliquen en los próximos días. Ayer no se habían cumplido ni las primeras 24 horas de la tormenta y la gran mayoría de los agricultores afectados no han podido ni pisar los terrenos que habían cultivado.
Agroseguro indica que aún es pronto para saber con exactitud el daño y la superficie real afectada y a ello hay que añadir el riesgo de tormentas. En Agroseguros tienen constancia de parcelas de viñedo con daños muy elevados e incluso que podrían rozar el 100%.
La Diputación de Valladolid tiene asignada un partida de 100.000 euros para que puedan paliarse los daños por fenómenos meteorológicos. Desde la Institución provincial se pusieron ayer en contacto con los alcaldes de estos municipios para ofrecerles su apoyo. La diputada Myriam Martín señaló a este diario que existe ahora mismo otra partida de 41.000 euros correspondiente al ejercicio anterior. «En los presupuestos de Diputación se destinan ayudas para situaciones imprevistas como pueden ser las tormentas». Los municipios afectados deberán enviar los partes a la Diputación y una vez analizados estos expedientes se aplicará el dinero que recibirá cada uno de ellos.