La concesión de 231 licencias de vivienda permite superar el nivel de la precrisis

La última junta de gobierno del Ayuntamiento sirvió para que se concedieran licencias de construcción para 231 viviendas en diferentes ubicaciones de la ciudad. Éstas, sumadas a las concedidas anteriormente en lo que va de año suponen un total de 1.197, una cifra que supera el techo de las 1.000 que se toman como referencia en 2008, justo antes de la crisis.

Con estos nuevos datos se demuestra que la construcción de viviendas en la ciudad continúa en aumento, aunque de manera progresiva. Con respecto a 2018, en lo que va de año se han edificado 443 viviendas más, lo que se traduce en un crecimiento del 58,7%.

Las licencias aprobadas en la junta de gobierno de ayer permitirán la edificación de 150 viviendas en las calles Mieses, Trilla y Sementera. 41 se ubicarán en la parcela 12A del ‘El Peral’, la avenida de Burgos contará con 39 y la última se situará en la calle La Palma. También se concedieron permisos de primera ocupación para las dieciocho viviendas adosadas de la calle Espiguete.

En el recuento total del presente año, las licencias concedidas afectan principalmente a bloques de viviendas, pues un 88,5% autorizan este tipo de edificaciones. Con respecto al año pasado, esta tipología gana 338 licencias. Los permisos para viviendas unifamiliares aumentan en 30 y suponen algo más de un 5% del total. Algo similar ocurre con los alojamientos privativos para mayores, que aportan un 5,8%, pero las 70 concesiones de ente año contrastan con 2018, cuando no hubo ninguna de este tipo. Finalmente, los apartamentos también aumentan, aunque mínimamente. Este curso se han concedido cinco nuevos permisos por ninguno del año pasado, un porcentaje muy moderado en comparación con el acumulado total.

En esta reunión del consistorio también se ha aprobado la reforma del Centro de Personas Mayores La Rondilla con un presupuesto que asciende a los 410.600 euros.