Gredilla deja la viceconsejería de Empleo
El viceconsejero rechaza la oferta de Barrios para continuar y volverá a su plaza en Presidencia / El PSOE pide a Igea que sustituya al juez Crespo por una mujer para que no haya «tanta testosterona»
Germán Barrios y Mariano Gredilla, en una imagen de archivo.-ICAL
Otra salida. Bien es cierto que aún no estaba refrendendado pero el Gobierno de la Junta del Partido Popular y de Ciudadanos pierde a otro de sus efectivos. Y, de nuevo, por decisión, aunque en este caso nada tiene que ver con José María Crespo, el juez fichado por el vicepresidente Francisco Igea para la dirección general de su Consejería de Transparencia, Ordenación y Acción Exterior.
Mariano Gredilla dejará de ser viceconsejero de Empleo y Diálogo Social, según detallan las fuentes consultadas por EL MUNDO DE CASTILLA Y LEÓN. Una salida que se produce por una decisión personal del propio Gredilla, a decir de estas mismas fuentes. Tanto es así, que el todavía viceconsejero de Empleo rechaza incluso la continuidad que ya le había ofrecido el consejero de Empleo e Industria, Germán Barrios, para que mantuviera su cargo al frente de la Viceconsejería.
De esta forma, siempre según las fuentes a las que han tenido acceso este periódico y salvo sorpresa de última hora que no se prevé, Gredilla regresará a su plaza como jefe de Unidad que ostenta en la Consejería de la Presidencia.
Gredilla toma esta decisión, en palabras de las mismas fuentes, porque entiende que ya está cubierta una etapa tras casi veinte años ocupando un alto cargo en la administración de la Junta, en la que se ha granjeado una buena relación con los sindicatos y la patronal.
Eso sí, Mariano Gredilla se mantendrán al frente de la Viceconsejería de Empleo y Diálogo Social el tiempo que sea necesario, hasta que el Consejo de Gobierno decida sobre su cese y nombre a la persona que lo sustituya.
Crítica del PSOE al juez
Mientras, José Francisco Martín, coordinador de Hacienda del Grupo Socialista en las Cortes de Castilla y León pidió ayer a Francisco Igea que «aproveche» la dimisión del juez José María Crespo para nombrar a una mujer en el puesto que ha dejado libre para que no haya «tanta testosterona» en la Consejería de Transparencia. Además, desveló su creencia de que los verdaderos motivos para la renuncia se deben a la actuación en la instrucción de la «manipulación» del PGOU de Valladolid.
Ante los argumentos presentados por Crespo para renunciar a su cargo de director general de Atención al Ciudadano y Calidad de los Servicios en la Junta para no perder su plaza, Martín manifestó que le parecen «excusas» y que no se lo acaban de creer porque es «demasiado pueril para creérselo».
El socialista espetó que «en verdad lo que pasa es que le hemos pillado» porque «dijimos que no era posible que fuese director general de Calidad de los Servicios una persona que ha demostrado que no presta el servicio que tenía que prestar con un mínimo de calidad».
Con esto Martín quiso hacer referencia a la actuación del juez en la instrucción del Plan General de Ordenación Urbana de la capital.
Martín criticó que tras «11 años desde la primera denuncia», debido a la instrucción del caso realizada por el juez Crespo, en las que había «más de 20 empresarios de la construcción y promotores imputados, que ya están fuera» porque han prescrito varios delitos, sólo lo ocuparán cuatro de los investigados, integrantes de la cúpula urbanística en el Consistorio en la etapa del popular Francisco Javier León de la Riva.
«Nos parece muy curioso», ironizó, «que el director de Atención a la Ciudadanía y Calidad de los Servicios no sepa pedir sus servicios especiales y se lance a la piscina sin saber él su situación administrativa. ¿Qué calidad de servicios vas a garantizar si no sabes gestionar lo tuyo, cachondo?».
El coordinador de Hacienda del Grupo Socialista reprendió a Crespo porque, a su entender, la renuncia del cargo demuestra que el juez no tiene «vocación de servicio público» y «no le importan nada los ciudadanos». Martín defendió la labor de muchos políticos que prefieren ganar menos que en su trabajo, sacrificando la posibilidad de promoción interna, y que prefieren dedicar su vida a la función pública. «En política hay gente que gana menos de lo que ganaría en otros sitios o que tiene más problemas y esta persona no se juega nada», añadió.