«En avances para la mujer hemos dado un gran paso para la humanidad»

Pregunta.- ¿Dónde estaba hace 50 años cuando Armstrong piso por primera vez la luna?

Respuesta.- Pues estaba en el mundo de los posibles porque yo nací al año siguiente.

P.- ¿Es verdad que llegaron?

R.- Por supuesto. No hay duda.

P.- ¿Y la bandera de Estados Unidos por qué ondeaba?

R.- No ondea. La bandera está siempre igual, lo que pasa es que iba doblada y estaba en esa posición. No hay viento que la pueda mover.

P.- ¿Por qué no se ve ninguna estrella?

R.- Y en el cielo de Madrid tampoco (risas). Si quieres sacar estrellas te hacen falta medios, y en la luna, en pleno día, sacar una imagen en 20 segundos es abrasarla. Las exposiciones de los astronautas son de centésimas y a esa velocidad no se ve ni una.

P.- ¿Y por qué hay gente que no se lo cree?

R.- (Suspira). Yo que sé. También hay gente que piensa que el sol gira en torno a la tierra, o que es plana. Tengo ganas de ver qué pasa con ese crucero que han alquilado los ‘terraplanistas’ para ver el final del mundo. Lo mismo se encuentran como los de Juego de Tronos con un muro de hielo…Es más atractivo hablar de conspiraciones que creer en la realidad. Pero si los soviéticos lo confirmaron, es que fue verdad.

P.- El negacionismo lunar, de hecho, encaja en el concepto de posverdad y las ‘fake news’.

R.- Si es repetir muchas veces una mentira, sí. Y ‘fake news’ también porque hay muchas leyendas. Dicen que Aldrin y Armstrong vieron ovnis y se asustaron. Lo que sí es verdad es que Aldrin tomó la comunión antes de salir y Armstrong se ató con una cuerda por si acaso.

P.- ¿Por qué no se ha vuelto?

R.- Porque el presupuesto se redujo a la quinta parte. Y porque Nixon, presidente de entonces, estaba en contra una vez que ya se llegó. Había más misiones a otros planetas y se dedicaron a otras cosas.

P.- ¿No le interesa al ‘lunático’ Trump llegar ahora otra vez a la luna?

R.- Espero que no llegue (risas). No me afecta la política americana, pero no es un personaje que me atraiga demasiado. Quizás con Obama todavía…Pensaban que para 2024 pero está todo en desarrollo.

P.- Y en la luna no había más que polvo y rocas. ¡Vaya desilusión!

R.- (Risas) Para muchos sí, pero era lo que se esperaba. Pero la llegada dio para estudiar muchas cosas. Por ejemplo que nos formamos al tiempo y que tenemos muchas cosas en común.

P.- Y no sería preferible dejar a la Luna tranquila e investigar más en cosas terrenales.

R.- Ya…Es cierto que en la tierra hay que hacer muchas cosas. No somos un planeta inteligente, hay personas inteligentes, pero hasta que no logremos solucionar problemas de guerras, hambres, muertes, etc no seremos una raza inteligente. Sin embargo si no salimos fuera y tenemos una Visión más amplia de nosotros mismos, si no vemos la tierra como algo frágil, no nos daremos cuenta de que lo somos y de lo que tenemos qué hacer. Los avances científicos ayudan al ser humano pero el objetivo es que lleguen a todos los lugares. Merece la pena invertir.

P.- ¿Cuántas horas se pasa el día en la luna?

R.- No tantas como me gustaría. Todos los días echo un ojillo al cielo, sobre todo antes de acostarme.

P.- ¿Vacaciones en el Caribe o en Marte?

R.- En el Caribe que nunca he ido. Pero Marte no estaría mal, aunque el verano es con unos cuantos grados bajo cero. (Risas).

P.- ¿Es cierto que cuando el sabio señala la luna, el necio mira el dedo?

R.- Sí. Y se puede aplicar a muchos ámbitos científicos. Cuando la gente de ciencia habla de temas importantes, los que no tienen ni idea solo miran lo que están haciendo. Es el problema.

P.- ¿Qué le hechiza?

R.- Aparte de mi mujer (risas), las constelaciones que están más allá de las estrellas. Las nebulosas, galaxias, etc.

P.- ¿En qué estamos dando pequeños pasos para el hombre pero grandes para la humanidad?

R.- En la evolución del pensamiento. Por ejemplo en el tema de la mujer para darle su papel en la sociedad. También en la solución a enfermedades en la búsqueda de nuevas vacunas, en nuevos tipos de cultivos.

P.- ¿Cómo va España en su carrera a la luna?

R.- En esa carrera no entramos (risas). Estamos en la Agencia Espacial Europea y participamos en varios proyectos. Estamos cerca de la cabeza, pero no para ganar.

P.- ¿A quién mandaría a la luna en un cohete?

R.- A personas que sepan lo que tengan que hacer y que estén preparados.

P.- ¿Y a los políticos a qué planeta?

R.- (Risas). Si les mandamos a otro planeta no podrían desarrollar su trabajo, y tienen mucho que hacer, por lo tanto les dejamos mejor aquí. Que se centren en solucionar problemas y que ayuden lo que tenemos aquí.

P.- Y Pedro Duque de ministro.

R.- Así es creo que es una buena noticia. Y no hay que olvidar que contamos también con Miguel López-Alegría.

P.- ¿En España quién está en la luna?

R.- Hay mucha gente que no se acaba de enterar de la importancia que tiene la ciencia en la sociedad y de cómo la ciencia ayuda a las personas.

P.- Ya hace medio siglo que fuimos a la Luna. Y Marte, ¿para cuándo?

R.- Hay previsiones ‘de’, otra cosa es que se cumpla. La previsión es para 2034, pero antes hay que llegar a la luna. Es un viaje de seis meses y es algo que hay que pensarse que la maleta tarda en hacerse. (Risas)

P.- Y cuando lleguemos a Marte, ¿nos lo cargaremos al igual que estamos haciendo con la tierra?

R.- El hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, y en este caso, nunca mejor dicho. Espero que aprendamos de los errores y sepamos que los recursos de un planeta son limitados. Aunque algunos dicen que el ser humano es una plaga para la tierra confío en ser lo suficientemente racionales para en unos años, amortiguar el cambio climático.

P.- Dijo Mark Twain que todo el mundo es una luna, y tiene un lado oscuro que nunca muestra a nadie. ¿Usted?

R.- Efectivamente. Las personas tenemos un lado más desconocido que no queremos mostrar. ¿En mi caso? Pregunta a mi mujer. (Risas).