Los sindicatos piden a Renault un segundo vehículo en Valladolid como en Palencia

«Sabemos hacer coches con calidad y fiabilidad», afirma Rubén González, delegado de CCOO Renault España. Prueba de ello es que la multinacional de rombo ha confiado en los trabajadores de la factoría de Carrocería-Montaje de Valladolid para la producción del nuevo modelo de la marca, el Nuevo Captur, una reconstrucción del SUV con el que la marca francesa ha puesto 1,2 millones de vehículos ‘pucelanos’ por todo el mundo. A principios de 2020 se empezará a vender el todocamino, que se solapará en la cadena de montaje con el antiguo Captur. Precisamente, esta coincidencia vuelve a traer una de las demandas de los sindicatos a la directiva de Renault: dotar a Valladolid de la producción simultánea de dos vehículos.

Desde CCOO confirman que introducirán este aspecto en la futura negociación para el cuarto plan industrial para Valladolid de la firma gala. El ejemplo a seguir para la petición es Palencia, que en sus líneas se producen dos vehículos: el Mégane y el Kadjar. Por capacidad de las instalaciones, habilidad de la plantilla y una previsión para crear más empleo, la demanda se buscará implementar en la negociación colectiva para el futuro de la compañía en la ciudad y en España, ya que un aumento de vehículos supondría que en Sevilla tuviese que aumentar la confección de más motores, por ejemplo.

La existencia del cuarto plan industrial fue planteada por José Vicente de los Mozos, presidente de Renault, que reconoció que se hará público «en el momento adecuado». Las peticiones iniciales de un nuevo vehículo para producir, pasan también por demandas sociales para mejorar la condición de los trabajadores.

Para González, tras tener que apretarse el cinturón, para recuperarse de la mala acogida del Modus, en la negociación del actual plan industrial y conseguir atraer de forma constante la producción a Valladolid, ahora es momento para exigir mejoras para los trabajadores, en condiciones y salario. Además de propiciar el paso de los eventuales a plantilla, situación que en este periodo se está produciendo con el paso de 2.100 de estos operarios a la plantilla, según expuso Laura del Ser, secretaria UGT.

En este aspecto, Unai Hernández, de la Confederación General del Trabajo (CGT), hace especial hincapié en la sistemática precarización de los trabajadores, que supone la firma de cada plan industrial, y apuesta por una negociación diferenciada del convenio que suponga un verdadero avance. El representante desvela que con el crecimiento pactado del «2% del salario», y el incremento del «2,5% del IPC», los jornales se están devaluando y recuerda que hace años los trabajadores de Renault en Castilla y León tenían una capacidad adquisición mayor.

Lo que sí que está claro para CCOO, es que con la nueva producción del Captur la carga de trabajo podría estar asegurada por «seis o siete años», más o menos la misma vigencia que ha tenido el SUV anteriormente producido en Valladolid.

Del Ser añade que, además de la producción en la factoría del Captur, en las instalaciones de la marca del rombo en la ciudad se ensamblaran las baterías que los modelos híbridos del todocamino van a usar. Del Ser quiso felicitar por ellos a las trabajadores de Valladolid por su «buen hacer» en la consecución de la tecnología.

La puesta en marcha de los modelos híbridos y el aumento de las medidas de seguridad, entre ellas un sistema de conducción autónoma de grado 2, en una escala de 5, supondrá una actualización al SUV de Renault. Aunque todo ello suponga un modelo nuevo como tal, puesto que el diseño supone una revolución para Renault y dejará obsoleto tecnológicamente al viejo todocamino, la permanencia del nombre atiende a razones comerciales para que los clientes relacionen la calidad de la antigua versión con esta nueva. Las centrales sindicales confían que esta asociación entre antiguo y nuevo traiga consigo la buena marcha de las ventas, de la misma forma que se ha venido produciendo desde 2013.

La recepción del anuncio oficial dentro de la factoría, según a que sindicato se pregunte, varía un poco. CGT habla de «indiferencia» de los trabajadores, puesto que entienden que al tratarse de una fábrica de coches esa es su finalidad. Además, Hernández explica que al tratarse de una «empresa subvencionada por las administraciones», éstas deben exigir que así sea.

Comisiones y UGT muestran su «satisfacción» por la noticia, aunque, como reconoce Del Ser, ya sabían que se trataba de un SUV, que bajo la denominación HJB venía a sustituir al Captur. Hernández manifiesta que ya habían visto salir el modelo por la línea de producción. Se fabricaron para pruebas 70 ejemplares que también se han podido ver en circulación por las calles de Valladolid.

El celo con el que Renault ha guardado el nombre final no ha pillado por sorpresa en la fábrica. Bajo una estrategia comercial de protección absoluta ya se sabía que habría un nuevo modelo y que este coincidirá en la línea de trabajo con el Captur. El hecho es que el inicio de la convivencia, en enero de 2020, podría suponer un primer ensayo para ver el funcionamiento de ambas producciones. Los sindicatos confían en que se podrá satisfacer sin problemas la demanda con el que aspiran a mantener las cifras registradas con anterioridad. El nuevo Captur será presentado en Salón del Automóvil de Frankfurt en septiembre de forma estática y en octubre se podrá probar el coche en Grecia.