Vox reclama al PP entrar en el pacto como Ciudadanos en la Diputación

Punto y final a la ronda de contactos del presidente de la Diputación de Valladolid, el ‘popular’ Conrado Íscar, con el resto de grupos de la Institución provincial. Unos encuentros que concluyen con el diputado de Vox, Mario de Fuentes, único alcalde de la formación que preside Santiago Abascal.

Un partido, Vox, con el que precisamente el PP sí había hablado antes de la investidura y con el que había, y todavía existe, una buena sintonía. Pero como nada se concretó, el alcalde de Barruelo del Valle se votó a sí mismo en el pleno de constitución.

La realidad es que, ahora, una vez que desde Cs se insiste en hacer valer un pacto a nivel autonómico, que nadie conoce y que el partido naranja no presenta, Vox reclama también entrar en ese acuerdo en la Diputación como Ciudadanos.

La razón que esgrimen desde el partido de Abascal no es otra que el hacer valer lo sucedido en otras instituciones, en este caso en los ayuntamientos de Palencia y Burgos. En el primero el alcalde es de Cs, gracias al acuerdo firmado por la formación naranja con PP y Vox por el que la única concejal de Vox votó a Mario Simón y con ello se ganó un área delegada en el gobierno municipal, la Agencia de Desarrollo, lo que ella había exigido.

En el caso de Burgos, pese a que en la investidura los ediles de Vox no votaron al candidato de Ciudadanos, acaban de cerrar un pacto junto con el PPy la formación naranja para imponer las comisiones al alcalde socialista Daniel de la Rosa.

Y eso, precisamente, es lo que la formación de Santiago Abascal quiere hacer valer, si Cs entra en el gobierno, los acuerdos de Palencia y Burgos, donde ahí Cs y PPnecesitan de Vox para mantener la Alcadía en el caso palentino y recuperarla, en el burgalés.

Poco importa, además, que con Cs le baste al PP para gobernar la Diputación de Valladolid porque como señala el diputado Mario de Fuentes, en declaraciones a este periódico, «también le vale sólo con nuestro voto». De Fuentes es claro y asegura que si el PP y Cs pactan «nada» tendrá que hacer, pero eso no le impide hacer valer la fortaleza de su voto.

Cabe recordar que Cs sugiere que existe un acuerdo secreto con el PPpara repartirles cargos con sueldo en la Comunidad. Y eso es lo que se atribuye y se arroga el secretario de organización de Ciudadanos, Miguel Ángel González, al menos según demuestran los últimos hechos desvelados por este periódico en los que lo único que le interesa son los cargos.

Y eso, puestos, es lo que Miguel Ángel González y su protegida y portavoz en la Diputación de Valladolid, Gema Gómez Olmos, vienen exigiendo al presidente Conrado Íscar. Una vicepresidencia que, en palabras del diputado de Vox es «una aberración» que reclamen con sólo dos diputados, frente a los 13 del Partido Popular. Eso sí, Mario de Fuentes sí reclama un «puesto en el gobierno» si, finalmente, saliera adelante el acuerdo con Vox.

La realidad, en estos momentos, es que el partido naranja, con su secretario de organización autonómico a la cabeza exige una vicepresidencia en virtud de un desconocido pacto, que el presidente de la Diputación niega que exista pero que la portavoz de Cs insiste que se trata de un acuerdo alcanzado con el PP en Castilla y León por el que le correspondería una de las vicepresidencias.

«A día de hoy no hay ningún acuerdo», afirmaba este martes Conrado Íscar a preguntas de los medios durante su visita a Pedrajas. «Yo conozco los acuerdos a nivel nacional, en los que Cs tiene como socio prioritario al PP, y el pacto que ayer –por el martes– se firmó en Castilla y León», insiste el máximo dirigente de la Institución provincial, quien, como ya avanzó este periódico, reconoce que fue una de las personas que se enteró en el Pleno del viernes del voto a favor de su candidatura por parte del partido naranja.

«No tenía ni idea de que Cs iba a apoyar el candidato del PP, que era yo», manifiesta el también alcalde de Matapozuelos, quien se limita a señalar que están escuchando a todos los grupos «y una vez recogidas sus peticiones, las valoraremos y con el consenso de todo el grupo ‘popular’ decidiremos cuál es la mejor opción», matiza entonces Conrado Íscar, quien habla de las reuniones con los portavoces del resto de grupos.

«Ayer –por el lunes– se mantuvieron dos reuniones, con Cs y el PSOE, y estamos abiertos a escuchar a todos los grupos y una vez que nos trasladen sus opiniones no se cierra ninguna puerta», aclara el presidente de la Diputación, quien finaliza: «Sólo una vez que tengamos las opiniones de todos lo expondremos al resto de diputados, para decidir lo que sea mejor para la gobernabilidad».

Malestar diputados

Y eso, informar a los suyos, a sus compañeros de bancada, al menos no a la gran mayoría, es lo que no ha hecho Íscar. De ahí el malestar que existe entre un gran número de diputados del Partido Popular, primero por el paso atrás del ex presidente Jesús Julio Carnero del que fueron conocedores los últimos y por boca de Alfonso Fernández Mañueco, y ahora porque siguen sin tener explicaciones sobre ese supuesto acuerdo con Cs. Sin contar el malestar que también generó el nombramiento de Víctor Alonso como vicepresidente la misma tarde del viernes, sin que nadie les informara.