Cs se arroga una vicepresidencia tras un pacto que desconoce el grueso de los diputados del PP
L El pacto con Ciudadanos, avalado por la dirección regional, está consensuado con Carnero y el nuevo presidente, que ayer por la tarde se apresuró a ratificar en la Vicerpresidencia a Víctor Alonso ante el desconcierto del resto del equipo
De sorpresa en sorpresa. Cuando se pensaba que ya se había visto todo en la crisis que vive el Partido Popular de Valladolid, a cuenta de la designación de diputados y de que Jesús Julio Carnero fuera el candidato a repetir como presidente, salta una nueva sorpresa. Esta vez en forma de pacto de gobierno, aún no firmado, pero sí avalado por la dirección autonómica del PP y confirmado por fuentes de Ciudadanos de Castilla y León consultadas por este periódico.
Acuerdo que pasa porque Ciudadanos se arroga una vicepresidencia de la Diputación de Valladolid, tras ese pacto que, y esto es lo más sorprendente, desconoce el grueso de diputados del PP, según pudo confirmar EL MUNDO DE VALLADOLID a través de diversas fuentes.
Si en el pasado mandato el pacto Cs-PP se limitó a un acuerdo de investidura, en esta ocasión la formación naranja entrará en el gobierno de la Diputación y lo hará con una de las vicepresidencias, en palabras de las mismas fuentes. El mandato que acaba de concluir había tres, las que ostentaban Víctor Alonso, Guzmán Gómez y el hoy presidente Conrado Íscar.
Así lo anunció la portavoz del grupo provincial de Cs, Gema Gómez, instantes antes del pleno en el que el «inesperado», como él mismo se calificó en su discurso, Conrado Íscar fue elegido presidente de la Institución provincial con 15 votos, los trece del PP y los dos de Ciudadanos. El PSOE votó en blanco, como había anunciado, y Toma la Palabra yVox se votaron a sí mismos.
La diputada de Cs y secretaria de organización del partido en Valladolid, calificó su voto favorable al nuevo presidente como un «voto de confianza» dentro del acuerdo alcanzado por ambas formaciones. Un acuerdo que se concretará y rubricará en los próximos días, y que consistirá en un pacto programático y otro de cargos institucionales, entre los que figurará esa vicepresidencia, para la formación naranja, tal y como desveló Gema Gómez y confirmaron después a este periódico fuentes del PP y de la formación que preside Albert Rivera.
La realidad es que Gema Gómez se atribuyó antes de estar firmado y conocerse la vigencia de un acuerdo entre ambos partidos, del que oficialmente nadie había dicho absolutamente nada, hasta que la diputada de Cs lo anunció en la antesala de la constitución.
Precisamente con quien sí habían hablado desde el PP de la Diputación fue con Vox, que está dispuesto a cerrar un pacto, pero los ‘populares’ no quieren sellar acuerdo alguno con la formación de Santiago Abascal para no importunar a Ciudadanos. Conviene recordar, que al PP le bastaba con el voto de Vox para tener la mayoría.
Y todo esto, sin que la mayor parte de los compañeros de bancada de Conrado Íscar y Jesús Julio Carnero sepan nada acerca del mismo. El acuerdo, avalado por la dirección autonómica, está consensuado con Carnero y el nuevo presidente de la Diputación de Valladolid.
Y si no se ha firmado antes, a decir de las fuentes a las que ha tenido acceso este periódico, «es porque hasta el jueves en el PP no sabían ni quién iba a ser el candidato», que finalmente fue Conrado Íscar tras claudicar Carnero ante Génova y ceder el paso a su lugarteniente. Una decisión, la del nombramiento a dedo, que nada tiene que ver con el proceso democrático de elección de diputados, impulsado por el propio Jesús Julio Carnero.
Acuerdo que es similar al firmado en la mañana de ayer en Burgos, instantes antes de la constitución de la Diputación. Y pasa porque allí donde necesiten a Ciudadanos para gobernar y quien presida sea el PP, el partido naranja contará con una vicepresidencia.
Y, por si este desconocimiento del pacto por parte de gran parte de los diputados, fuera poco, Conrado Íscar se apresuró en la tarde de ayer a ratificar como vicepresidente a Víctor Alonso ante el desconcierto del resto de diputados. Un nombramiento que se oficializó a través de una nota de prensa y al que, por supuesto, aún le falta el decreto que le dé oficialidad.
Los diputados del Partido Popular acataron ayer las directrices del partido y eligieron presidente a Íscar, tal como había propuesto Carnero el día anterior, ante las exigencias de Génova y convencido por el presidente regional, Alfonso Fernández Mañueco, de que diera un paso a un lado. A sus trece votos se unieron, finalmente, los dos del Grupo provincial de Ciudadanos.
El recuento de votos, a cargo de la presidenta de la mesa de edad, la alcaldesa de Mucientes, Emiliana Centeno, arrojó la mayoría absoluta de Íscar por 15 votos (13 del PP y dos de Cs), 10 votos en blanco, que correspondían al PSOE tal como había anunciado, y un voto a Virginia Hernández, de Toma la Palabra y otro a Mario de Fuentes, el representante de Vox.
Entre papeleta papeleta, Centeno fue haciendo referencia con desparpajo al asfixiante calor del salón de Plenos. Un ambiente que provocó el desvanecimiento de una de los maceros, antes de que acabara la sesión. Un médico presente en el lugar atendió a la funcionaria.
Ya en el turno de discurso, Gema Gómez señaló que su grupo «no defraudará» a los 225 municipios que y nueve pedanías que integran la provincia en su tarea basada en la «vocación de servicio, cercanía, humildad y responsabilidad política», que, dijo, se basará en el «diálogo, el consenso y una actuación eficiente, útil y seria para mejorar la vida de la gente en los pueblos».
Como principales pilares de Cs citó la creación de empleo; la mejora de accesos a los pueblos; la optimización de servicios públicos, sociales y educativos; apoyo a las familias; alternativas de ocio; fomento del turismo cultural, rural y accesible; digitalización; y la regeneración política e institucional. Entre las medidas que Gómez señaló que su formación impulso la pasada legislatura está el Plan de Libertad de Gasto o los Presupuestos Participativos.
«Estos esfuerzos deben confluir en la lucha contra la despoblación rural, un problema que esquilma nuestra tierra y que urge revertir y para lo que es preciso un Pacto de Estado con una política útil y responsable», arguyó.
Eso sí nada dijo durante su intervención ante el plenario de la Diputación del porqué de su apoyo al Partido Popular ni de ese acuerdo que nadie hasta ahora había ni oficializado ni verbalizado, siquiera.
Parece claro que, en el PP de Valladolid todo puede pasar. Sobre todo, después de la reunión de este jueves en el grupo ‘popular’ de la Diputación, en la que los diputados del PP se desayunaron, para su sorpresa, con que Carnero cedía a las presiones de Génova y dejaba paso a Íscar, y de que ayer vuelven a desayunarse con que existe un pacto con Ciudadanos del que la mayor parte de ellos no sabía ni palabra.