El abandono del soterramiento no penaliza a Puente y gana en los barrios afectados

Uno de los interrogantes que dejan las recientes elecciones y sus resultados en la capital es si el soterramiento del tren pasará a un segundo plano y dejará de estar en la agenda política de los partidos con representación en el Ayuntamiento. ¿Volverá a repetirse en los plenos del mandato que empezará a partir del 15 de junio el enfrentamiento entre los defensores de recuperarlo y los que recuerdan el fiasco del proyecto y el agujero de 400 millones de deuda que dejó en la Sociedad Valladolid Alta Velocidad?

Había cierta incertidumbre en el PSOE y en Valladolid Toma la Palabra, promotores del proyecto de integración en superficie y del envío al cajón, no se sabe si para siempre, del soterramiento, por el impacto que esta decisión podía tener en el conjunto de la ciudadanía vallisoletana y en especial en aquellos barrios más beneficiados por la eliminación de la barrera del tren. Es posible que un proyecto emblemático bien ejecutado no garantice una reelección, pero sí puede tumbar al mandatario de turno si resulta fallido. Así de ingrata es la vida política.

Pero al final no pasó nada. La eliminación del soterramiento no ha pasado factura al vencedor de las elecciones, Óscar Puente, ganador en todos los barrios beneficiados por la supresión del tren en superficie, que en el proyecto original contemplaba un túnel desde la calle Daniel del Olmo, a la altura de La Rubia, hasta el apeadero de la Universidad, en Los Santos-Pilarica.

La candidata del PP, Pilar del Olmo, jugó la baza del soterramiento y su promesa de recuperar el proyecto si llegaba a la alcaldía como una de los principales reclamos durante la campaña electoral. Los ‘populares’, con la ex ministra Isabel García Tejerina a la cabeza, se fotografiaron a la entrada del túnel de Labradores para refrendar su apuesta por el soterramiento y su rechazo a la construcción de una veintena de túneles y pasarelas a lo largo de trazado ferroviario, el proyecto alternativo puesto en marcha por Puente y por el concejal de Urbanismo, Manuel Saravia. La remodelación del túnel de Labradores y su entorno es, junto al paso de la plaza de Rafael Cano, en La Pilarica, la primera de las más de veinte actuaciones previstas para los próximos años.

El compromiso del PP con el soterramiento llevaba aparejada la firme decisión de paralizar la integración en superficie y con ello confiaba en rentabilizar el descontento con el cambio de proyecto.

Los resultados por barrios revelan, sin embargo, que, con independencia de la mayor o menor aceptación del plan de túneles y pasarelas, la renuncia al soterramiento no erosionó a Puente.

De todos los barrios atravesados por el tren, el de Delicias es el más poblado y aquí el PSOE casi dobló en votos al PP: 9.275 frente a 5.296. En La Pilarica, donde los vecinos mantienen la esperanza en que algún día se acometa el soterramiento y no recibieron muy bien la renuncia al proyecto, los socialistas, aquí sí, duplicaron los apoyos de los ‘populares’, y también vencieron en La Rubia, Vadillos, Pajarillos, los otros tres barrios, en especial estos dos últimos, que tienen que convivir con la barrera del tren.

A la vista de los datos, la lectura del concejal de Urbanismo es que el proyecto sustitutivo de túneles y pasarelas empieza a calar. Afirma Saravia que «es muy difícil saber cuáles son las motivaciones de cada persona al votar», pero añade que «mucha gente ha ido valorando la solución de integración como una buena solución a la permeabilidad», al tiempo que se muestra convencido de que «se valorará más al ir viendo las obras (hoy solo está la plaza de Rafael Cano)». Recuerda que «ha sido el tema de la campaña electoral, y algunos partidos han creído que prometer el soterramiento (sin saber cómo se financiaría) sería una buena baza».

Saravia matiza, sin embargo, que «no puede decirse, como hacen algunos políticos, que los resultados de las votaciones, sean los que sean, permiten decir sin más que cualquier asunto del programa queda asumido o rechazado». Reitera que «la decisión para optar por una u otra candidatura es compleja», aunque sí considera que «con este resultado electoral se legitima, aún más, seguir trabajando para construir lo previsto en el convenio de Valladolid Alta Velocidad de 2017».

A partir del 15 de junio se sabrá si el soterramiento queda relegado al cajón o vuelve a ser motivo de enfrentamiento durante los próximos cuatro años.

Cs «aportará» a la ciudad mediante un pacto o bien en la oposición

El concejal electo por Ciudadanos, Martín Fernández Antolín, aseguró ayer que su formación no está en el Ayuntamiento «para ocupar cargos», sino para «aportar a la ciudad» mediante un pacto con el PSOE o desde la oposición. Fernández Antolín explicó que solo ha hablado con el alcalde y candidato del PSOE a la reelección, Óscar Puente, durante la noche electoral, cuando le saludó y le dio la «enhorabuena» por los resultados, informa Europa Press. En todo caso, subrayó que los ciudadanos de Valladolid tienen que saber que van a encontrar en la formación ‘naranja’ «lealtad a lo que sale de las urnas». Asimismo, dijo que tanto el alcalde como VTLP como Ciudadanos valoran las posibilidades que puede haber, buscan «probabilidades programáticas» y valoran posibles «acuerdos de investidura o de gobierno». Fernández Antolín explicó que no plantean líneas rojas pues entiende que «las líneas rojas se marcan en la mente de las personas y los vallisoletanos no tienen líneas rojas establecidas, han votado libremente, han ejercido derecho a voto libremente y sería absolutamente contraproducente y desleal establecerlas». En cuanto a la posibilidad de que un acuerdo en el Ayuntamiento esté «sujeto» a los de otras instituciones como la Junta dijo que las «lecturas» quedan «muy diluidas» entre el plano autonómico y el local.