Cae una red de estafa por internet con dos detenidos en Zaratán

Agentes del puesto de la Guardia Civil de Zaratán han detenido en la localidad a dos individuos, residentes en Asturias, por pertenencia a una red de estafas por internet que tenía su base de operaciones en la localidad vallisoletana. La Benemérita continúa sus pesquisas para detener a otros dos implicados, con residencia en Palencia.

La investigación se ha realizado en colaboración con la Guardia Civil de Sevilla, donde se recibieron las denuncias de las víctimas de la red de estafas. En concreto, fue la Guardia Civil de la localidad sevillana de Lebrija la que inició las averiguaciones, tras recibir la denuncia de un ciudadano, en abril de 2018, en la que ponía en conocimiento que había sido víctima de una estafa al realizar compraventas de productos cárnicos a través de un portal de internet.

Tras una primera transacción satisfactoria de escaso importe, la víctima había efectuado un pedido por valor de 980 euros, pagándolo de forma anticipada, y había recibido productos en mal estado y sin etiquetas, no aptos para el consumo.

Las gestiones realizadas, se centraron en las cuatro personas que integrarían la banda, a las que les consta numerosos antecedentes policiales por delitos similares. Tras las dos detenciones y la búsqueda de los otros dos integrantes, los agentes esclarecen ahora otras estafas denunciadas en las que se da el mismo modus operandi.

Además del delito de estafa investigado, tres de los integrantes de este grupo ya fueron detenidos por la Guardia Civil de Zaratán a principios del mes de septiembre, por un delito de usurpación de identidad y dos delitos de estafa. El importe de la mercancía estafada en su momento asciende a unos 15.665 euros.

Estas personas formarían parte de un grupo criminal «perfectamente organizado», explicó ayer la Benemérita, con reparto de funciones y ámbito de actuación por la geografía española, que se dedica a la comisión de ilícitos penales contra el patrimonio, «concretamente a la comisión de estafas a través internet, y por eso poseen en este sentido numerosos antecedentes policiales».

‘Modus operandi’

El grupo, antes de delinquir, publicaba en internet anuncios relacionados con la venta de productos cárnicos (jamones, embutidos y paletillas), con fotografías de productos alimentarios, nombres de contacto ficticios y líneas de teléfonos, que en algunas ocasiones eran contratadas usurpando la identidad de terceras personas. Para las transacciones utilizaban datos de una empresa real y en funcionamiento, con el fin de parecer dignos de confianza.

Una vez contactan con la víctima de la estafa –por lo general personas que se inician en una actividad empresarial relacionada con el suministro de productos cárnicos–, esta realiza un primer pedido a modo de prueba. Después, tras ganarse la confianza de la víctima, esta realiza un pedido mayor, ingresando antes de recibir el producto el importe del mismo.

Una vez realizada la transacción económica, la víctima recibe la partida de los productos encargados, conteniendo ésta una mercancía menor de la acordada o, en caso de recibirla en su totalidad, los productos llegan sin etiquetar y sin ningún código de sanidad, no siendo aptos para el consumo. La Guardia Civil del puesto principal de Zaratán instruye las correspondientes diligencias, que serán puestas junto con los detenidos a disposición judicial.